Tal parecía que mi comentario no les había caído bien del todo, ya que estos dos empezaron hacer un complot en contra mía, no obstante, yo no podía parar de reír, pero poco a poco intente calmarme hasta que logré volver a la normalidad, sin embargo, el arlequín me miró de forma seductora que al chile me daba mala espina lo que se traía en manos —Tú te me acercas y te golpeo —amenacé, pero dicho pelirrojo sólo era una distracción para que míster Illumi me tumbara al suelo de un sólo movimiento —¡Ahhh! —pronto sentí el impacto contra el suelo que no pude evitar expresar un gesto de dolor —Hijos de la tostada, ven y no están viendo que su amix está que le lleva la parca, y ustedes vienen y hacen su complot maquiavélico —comenté con un tono de voz adolorido.
La risa de Hisoka, un tanto cínica, no se hizo esperar provocando que expresara un semblante serio-molesto. Me levanté del suelo sin importarme mucho el veneno en mi organismo, puesto que, no les iba a permitir dejarles ganar ante su complot bien elaborado, y también porque el arlequínsito no paraba de reírse, por ende tomaría cartas en el asunto. Sin previo aviso, me le abalancé a Hisoka para darle un puñetazo en la mejilla, pero para la suerte de éste, logró esquivarme mientras expresaba una sonrisa divertida, lo cual me hizo encender mi llamita, sin embargo, mi siguiente ataque no iba a ser dirigido para él, sino que sería para Illumi, sólo que ahora en vez de ser un puñetazo sería una patada voladora, no obstante, el ojos inexpresivos también corrió con la misma suerte que el arlequín, por lo que no me quedó de otra más que tomar mi distancia, incluso a pesar de sentir mi cuerpo sofocado a causa del veneno.
—Así que quieres jugar rudo, chico zorro…mmh bien. Harás que me excite —comentó el pelirrojo viéndome con ¿lujuria?, ¿diversión?, con un semblante extraño diría yo.
Un escalofrío recorrió mi cuerpo al oír las palabras de Hisoka —Oh rayos, creo que es momento de que salga corriendo a lo yolo —mencioné e inmediatamente me fui corriendo, porque meramente la verdad, Illumi no se quedaría de brazos cruzados por lo que le intenté hacer e Hisoka…bueno, ese es un caso especial que hay que tratar con más cuidado.
El veneno me mantenía agotada lo cual ocasionaba que mi velocidad disminuyera, pero no lo suficiente como para que aquellos dos me alcanzarán. En seguida logré llegar a la ciudad, así que me escondí para no llamar la atención mientras que a su vez estaba buscando el aeropuerto; sentía mi respiración agitada y a la vez cansada, como si estuviese a punto de desvanecerme, pero gracias a mi fuerza de voluntad, no me dejaba caer por ese veneno que me había incrustado, Enma.
Che mocosa hija de su madre, no te creas tan especial por haberme herido; Shikotsumyaku hubiese sido mejor rival que tú, él sí valdría la pena prestarle mi atención.
Logré llegar al aeropuerto sin ser vista y dio la casualidad de que a lo lejos observé una cabellera albina junto con un niño/niña vistiendo unas prendas rosadas —Espero no estar alucinando, pero si mal no veo, esos dos son el gato celoso y mi movio Alluka —mencioné en un murmuro intentando reconocer a esas dos personitas. De pronto sentí algo filoso amenazar mi cuello.
Carajo.
—Mmh no entiendo por qué te detuviste, estaba empezando a divertirme —habló la persona que me amenazaba de una forma seducto…extraña.
Me gire rápido para verle, dado que, no se trataba más que de Hisoka —¿Amenazar a una mujer con una carta?… —cuestioné con un tono de voz cansado —Sí…eso sería muy típico de ti, Hisoka… —terminé de hablar con el mismo tono.
El arlequín retiró su carta de mi cuello mientras emanaba una sonrisa complaciente —Y tú tienes una forma extraña de seducir a un hombre —alzó su mano para tocar mi frente —Estás ardiendo en fiebre —dijo cambiando su semblante a uno serio y ¿preocupado?.
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¿Estoy Soñando?
FanfictionLa vida no siempre es justa, pero eso no es algo que le importe a nuestra querida personaje, ella seguirá su vida cómo cualquier otra persona, sin embargo, no se esperaría lo que la vida le traería en cara. Con una personalidad muy peculiar y una me...