Capítulo 21

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—Lo siento... no sabía que estaban ocupados —se disculpó visiblemente incómodo.
—No Carl, no pasa nada. Ya me voy —habló ella y logró salir.

Miré a "Carl" y él entendió mi mensaje. Salí de allí rápidamente para buscar a Beth. No, ella no se me iba a escapar. Cuando la alcancé la tomé con cuidado del brazo y la giré a mí.

—Contéstame Beth.
—Oye, ¿puedo decirte algo? Creo que tu prima necesita urgente un psicólogo.
—¿Por qué? —fruncí el ceño.
—Ayer estaba hablando sola, me preocupa.
—No estaba hablando sola, estaba hablando conmigo. Y deja de dar vueltas, ahora contéstame lo que te pregunté.

Bajó la mirada y suspiró levemente.

—Creo que fui muy clara contigo.
—Entonces, ¿eso es un no?
—Izzy... ¿no crees que sería bueno ser amigos? ¿No te gustaría que fuera tu amiga?
—Amiga con derecho a cama —aseguré.
—¡Dios, es imposible tratar contigo! —exclamó irritada.
—¿No lo entiendes? —pregunté ya exasperado—. No puedo ser tu amigo Beth, no puedo. Es todo o nada.
—Pero... ¿acaso las pasas mal estando conmigo así... como personas que tienen un vinculo sólo afectivo... nada sexual? —preguntó y movió la manos—. Izzy, ¡Por dios! ¡A mí me encanta compartir tiempo contigo, eres insoportable a veces, pero eres divertido! No quiero arruinar eso...

Suspiré cansado y la miré fijo.

—Está bien, ¿quieres ser mi amiga?
—Sí —dijo asintiendo con una leve sonrisa.
—¿Podrás soportarlo?
—¿No crees que ya te soporté bastante? —me miró divertida.
—Podrías verme salir cada noche con una chica diferente, ¿no te importaría?

Ella se encogió de hombros.

—Es tu vida, mientras seas feliz...
—Pero yo no podría soportar verte salir con el imbécil de Evans —dije entre dientes.

Esa afirmación salió sin permiso de mi garganta. Sus ojos se abrieron bien. Sonrió levemente mientras yo me maldecía.

—Matt ya no está en mi lista de salidas —dijo y posó su mirada en la mía—. Por ahora estoy bien sola, con Ashley y Emma.
—Ashley es mi prima, pero aun así no me da confianza. Es demasiado open mind.
—Si vamos a ser amigos, creo que este tema no tendría que... incomodarnos. Es tu vida, y es mi vida... tú sales, yo salgo... tú vives, yo vivo... Ay Stradlin, sólo quiero estar bien contigo, pero como amigos, ¿sí?
—Está bien, creo que ese ya es un no bastante claro —comencé a caminar dejándola sola.
—Izzy —escuché como me llamaba, pero no me giré a verla—. Izzy, no seas infantil. No todo es blanco y negro... también hay matices.
—Ya, ya, tranquila —dije cuando me giré a verla—. Ya está todo claro, seamos amigos. Perfecto. Tú ahí y yo aquí. Cuando necesites algo, me llamas.

Volví a donde estaba Gina y le entregué las carpetas. Elizabeth entró unos segundos más tarde que yo. Quiso hablarme pero le dije que estaba muy ocupado y que luego hablaríamos. Ella se rindió y volvió a donde estaba sentada antes. La miré fijo mientras escribía, ¡y maldita sea la hora en que me fijé en ella! Se puso de pie y al instante la vi palidecer notoriamente. Se agarró a la mesa para no caerse. Gina se acercó a ella rápidamente y le dijo algo que no logré escuchar. Beth negó con la cabeza pero al instante se desplomó en los brazos de su madre.

—¡Beth! —chilló Gina. Dejé lo que estaba haciendo y rápidamente me acerqué a ellas. La alcé en brazos—. ¡Déjala en el suelo!

Con cuidado la apoyé en el suelo. Pensé que mi corazón iba a salir de mi pecho mientras la veía blanca y con los ojos cerrados. Un hombre alto se acercó a nosotros.

—Déjenme verla —dijo y se agachó.
Beth comenzó a abrir lentamente sus ojos. Arrugó la frente e intentó sentarse pero volvió a acostarse por un mareo.
—¿Qué es lo que tiene? —preguntó Gina nerviosa.
—Señora Wells, su hija está anémica —respondió el hombre—. Tiene las defensas muy bajas. Le falta hierro y un poco de calcio...
—¡Maldita sea Elizabeth! ¡Tú y tu estúpida idea de ser vegetariana van a matarme! —la regañó Gina.
—Ya, ya —dijo la morena mientras se lograba sentar—. No es nada, sólo no desayuné hoy... nada más.
—Juro que voy a encargarme de que comas, COMIDA NORMAL —le dije. Ella me miró fijo y negó con la cabeza.
—¿Por qué el mundo está contra mi? No lo sé —gruñó.

Dangerous Obsession - [𝐈𝐳𝐳𝐲 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐝𝐥𝐢𝐧]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora