—¿Qué hacen? —les pregunté.
—¿Sabes? Me llaman en la rectoría, luego te sigo contando Ash —habló la morena sin mirarme y seguido de esto comenzó a caminar alejándose de nosotros.
—¿Me puedes decir qué demonios le pasa? —le pregunté a mi prima.
—No lo sé —respondió y quiso caminar para alejarse de mí pero la detuve.
—Sí lo sabes, y vas a decírmelo —la miré amenazadoramente.
—Sabes dónde puedes meterte tu mirada asesina, ¿verdad? —preguntó y empujó mi brazo para pasar.
—¡Ya vas a querer mi habitación! ¡Ya vas a llorar por ella y yo no te la voy a dar! —grité ya que se estaba alejando de mí.Giré para ir al jardín y fumar un cigarrillo pero detuve mis pasos al verlo allí mirándome con una sonrisa cínica.
—Te soltaron, Evans.
—No podían tenerme ahí por siempre, Stradlin —reí por lo bajo y lo miré con diversión.
—¿Te gusto la cárcel? Es un lugar muy parecido a ti.
—Si, puede ser —afirmó y caminó un poco más hacia mí—. Ya sé la verdad de todo Stradlin, ¿y sabes? No estoy enojado ni nada de eso, es más, quería pedirte perdón...
—¿Perdón? ¿Por qué?
—Y por como me comporté, yo no quería herir tus sentimientos —dijo con sonrisa irónica. Estaba logrando sacarme de nuevo—. Yo actué así porque pensé que tenías algo con Beth...
—Y sí lo tengo.
—Ya quisieras —dijo divertido. Se acercó más y apoyó una de sus manos en mi hombro. Lo miré despectivamente—. Conozco perfectamente a Elizabeth, de los pies a la cabeza. Conozco su forma de ser, su forma de pensar... Y sé que todo lo que dijo en el juicio fue sólo para sacarte de allí. Y lo entiendo, ella haría cualquier cosa por un AMIGO.
—Pues no le parezco muy amigo cuando nos revolcamos —dije despreocupado.
—Elizabeth no se acuesta con cualquiera, y mucho menos con tipos como tú que tienen más nombres de mujeres en una cama que un propio motel de mala muerte.
—Ella parece disfrutarlo bastante...
—Como digas Stradlin, ya entendí cómo es la cosa. Tú estás loquito por ella, ella ni te registra y por eso estás un poco "extraño" últimamente.
—Si no quieres terminar peor que la última vez, mejor cállate —le advertí. Se alejó de mí y puso sus manos en el aire.
—Tranquilo, tranquilo. Yo no quiero pelea, sólo quería aclararte que ya no hace falta que sigas esforzándote por mostrar algo que no es...
—Está bien, puede ser que aún no me la haya llevado a la cama, pero ¿quién te ha dicho que no lo voy a hacer? Falta menos de lo que imaginas para que eso suceda —dije muy seguro de aquello. Me miró con ojos venenosos. Él sabía que yo estaba hablando muy en serio.
—Eso lo veremos.
—Sí, sí lo verás. Cuando ella haya sido mía, vendré a refregártelo en la cara. Tal vez nos grabe para que veas cómo lo goza.
—Infeliz... —murmuró.
—Tranquilo Evans, no quiero pelear contigo. Sólo quiero que dejes de esforzarte para ser un imbécil, te sale muy bien por si solo.
—¿Pasa algo amigo? —preguntó Steven apareciendo detrás de Evans. Del otro lado apareció Axl.
—No, nada muchachos. Sólo intercambiamos opiniones con Matt, ¿no es así? —me miró fijo y luego se fue sin decir nada.
—¿Qué quería? —preguntó Axl.
—Nada, es sólo un pobre Infeliz —contesté despreocupado.Las horas comenzaron a pasar y la actitud de Elizabeth parecía empeorar, ahora no sólo no me miraba, ni siquiera me hablaba. Yo de verdad creo que ella quiere acabar conmigo y luego anotarlo como una victoria realizada en su vida.
En esas horas que pasaron mi humor había empeorado, ni siquiera yo mismo podía aguantarme. Mis amigos se acercaron a mí y gruñí frustrado.
—Uuuh, ¿qué sucede Stradlin? —preguntó ahora Steven.
—No molesten —les advertí mientras terminaba mi cigarrillo y tiraba la colilla con fuerza.
—Ya sé lo que te tiene así —dijo Axl y apoyó una de sus manos sobre mi hombro. Lo miré de reojo como advirtiéndole que no se pasara de listo—. Has perdido tu talento, ¿verdad?Lo miré realmente sorprendido, como se nota que estos dos me conocen.
—¿Cómo supiste? —cuestioné mientras seguíamos caminando.
—Ni siquiera tu padre logra ponerte de ese humor cuando no tienes sexo —me aclaró Axl.
—Lo que Axl dice tiene sentido —lo siguió Steven—. Izzy, tú definitivamente eres un ninfomaníaco.
—Eres un sexo-dependiente —agregó Axl.
—No puedes estar mucho tiempo sin ello... te vuelves completamente loco.
—¡Es que no puedo entenderlo! —bramé nervioso—. ¡No puedo acostarme con ninguna! ¡No me producen nada! ¡Estoy con ellas y... y no... no me excito!
—Pues claro —dijo Axl soltando un suspiro—. Tantos años de desenfreno tenían que cobrar su factura.
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Dangerous Obsession - [𝐈𝐳𝐳𝐲 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐝𝐥𝐢𝐧]
FanfictionMis defectos según ella: -Eres impulsivo, cínico, irrespetuoso algunas veces, mujeriego, egocéntrico, narcisista, vicioso, ninfómano -dijo todo de corrido y sin respirar. La miré realmente divertido. Yo podré ser todo eso, pero ella es todo eso y mu...