_50_

105 20 12
                                    

-Que quieres que yo ,que! - grito la antigua consejera del campamento, haciendo un escándalo por el último comentario de su amigo.

- Gwen, por favor no grites... Y te vuelvo a pedir que ayudes con Max...

- Yo? Con críos!?

- Fuiste consejera en un campamento infantil, Gwen, por favor...

- Ya sé que trabaje ahí! Pero es distinto...me estás pidiendo que cuide cuide... No sólo no dejarlos morir.

- Necesito ayuda, Max es un joven que va a tomar mucho tiempo, necesito que me ayudes con el... Estilo Tía Gwen.

- Tia Gwen? Estamos hablando de Max, quizás el se haya podido acostumbrar a ti, pero nunca fuimos cercanos, no creo que le haga gracia que este haciendo de "familiar" suyo...

- Lo se, se que Max es complicado, y te lo pido por eso. Necesito ayuda, todo es muy complicado, y tú eres muy lista, necesito tu ayuda... Y aún qué fuera un desastre en el campamento, entiende que está pasando por mucho...

- David, yo... Puedo echate una mano, mientras que el enano no actúe como un capullo...

- Gracias Gwen, eres magnífica!

- Ya lo se... Dime algo nuevo para la próxima.

- Te pondré como número de emergencia por si acaso ocurre algo más.

- Que?

- Es algo nuevo, te pondré como número de emergencia si yo no puedo hacer algo por Max en ese momento. Tía Gwen...

- Bueno...te lo paso, pero me debes una, una muy grande.

- Por supuesto Gwen.

Los dos se quedaron en silencio, David ya había dicho lo que quería decirle a su amiga, necesitaba ayuda con Max, o tenía que estar preparado si es que alguna vez la necesitaba, no podía ser el único adulto en el que Max se apoyará, necesitaba más gente.

- Por cierto, como te encuentras David?

- Yo? Bien, por?

- Se que todo lo de Max te afectó muchísimo, y que es difícil estar en la situación en la que te encontraste. Solo quería ver cómo lo estabas llevando, perder a Max y recuperarlo en esa mala  situación... También tengo que preocuparme por ti.

- Yo estoy bien, quizás un poco destrozado por como Max a tenido que volver con sus padres unos días, aunque yo le pormetí que no le dejaría que llegase a ocurrir, pero ya aha vuelto. Y sus padres no van a volver a hacerle nada a el.

- Me alegro que veas la parte positiva de las cosas, al menos esta vez.

Gwen sonreía a David, el cual estaba feliz por qué no esperaba ver a su amiga ahí, ver qué también se preocupaban por el era un gran detalle.

- David... Gwen...hola.- Dijo un pelotón de 9 niños que acababan de llegar a la puerta de la habitación.

- Hola campistas! Bueno, hola chicos! Venís a visitar a máx?

- Si.. podemos entrar?no molestamos a Max?

- Max estar feliz de veros, pero tener cuidado, aún está dolorido, aunque no lo diga, no lo movais.

- Por supuesto.

El actor fue el que abrió la puerta de la sala, dejando pasar por delante suya a los otros 8 jóvenes, para después entrar y cerrar la puerta tras el. Max fue el primero en hablar.

- Bueno, habéis venido todos, tenéis algo que decir?

- Lo sentimos, actuamos fatal.- El astronauta fue el que duo un paso adelante y hablo por el grupo. - Nikki y Neil nos dijeron que si nos dejarías disculparnos... Y a eso venimos.

- Antes ellos te tarjeton unas tonterías que significaban que nos disculpamos, pero decíamos venir todos, no solo dos de nosotros, ya que la culpa fue de todos - El que habla era un joven con acento alemán.

- De que os disculpaís? - Max tenía orgullo, mucho, aún estando en una camilla del hospital doliendole cada palabra, quería hablar y demostrar quien era el.

- Sentimos haber actuado de una manera tan mierda, tu vida privada no es de nuestra incumbencia, y hemos actuado convirtiendo toda tu vida en una historia que queríamos contar... Sentimos haberte hecho todo ese daño. - Eres era la que decía esto, ella fue quien les dijo a todos los que sabía sobre Max, se sentía muy culpable sobre ello.

- También sentimos haberte hecho el vacío durante las últimas semanas, teníamos miedo, nos dimos cuenta de nuestro error tarde, tras el día en tu casa, y tras que re fueras. No deberíamos haber huido de ti por nuestro error, deberíamos haber hablado y despido perdón antes...- Nurf también se disculpaba, era un matón pero con principios.

- Prometemos no volver a actuar como lo hicimos, no hacer el vacío ni volver a meternos en tu vida.- Preston continuó diciendo.

- Y comprendemos que no quieras que estemos de nuevo a tu lado, hemos actuado faltan. Pero que sepas que nos arrepentimos y hemos aprendido de nuestro error para no repetirlo.- Nerris explicaba.

- Así que ya está todo dicho, si nos querés volver a ver, tienes el teléfono, puedes contactar con todos nosotros con esto.- Harrison decía mientras colocaba una hoja en la mesilla de Max.

- Nos vamos ya Max, descansa y recupérate , esperamos volver a verte- Nikki decía para abrir la puerta y que todos empezasen a salir, se notaba que estaba arrepentidos, no tenían energías ni para molestarle por nada.

- Adiós Max, descansa y recupérate.- Dijo Neil para crear la puerta dejando a Max de nuevo solo en la sala.

Ya vinieron todos a pedir perdón, se veía como se arrepentia y que también le había dolido a ellos, si no no hubieran llegado a ir todos a  la sala a pedirle perdón. Se merecían su perdón?

Le había hecho daño, ese día le destrozaron, sacaron todo de el como si de un libro sin emociones se tratase, el dolor de las siguientes semanas fue horrible, el silencio de Max solo era superado por el silencio de aquellos a los que una vez llegó a considerar amigos.

A lo planteo, necesitaba amigos, necesitaba gente a su lado, quizás les podría dar otra oportunidad. Sonrió para si mismo, aunque la cara le doliera a tiempos.

Estiró el brazo para ver lo que Harrison había dejado en la mesa, se trataba de una hija de papel con los nuevos de teléfono de todos, ya tenía el de Nikki y y el de Neil, también contaba el de algunos más, pero no todos, no tenía forma de contactar con sus amigos, hasta ahora.

Tomó el papel y el teléfono, empezó a colocar los contactos, tenía pocos en el teléfono, ahora tenía algunos más.

David entro en la habitación y vio a Max sonreír, eso le hizo sonreír a el también. Max estába feliz de ver a sus amigos, ya sabía que les había perdonado.

Queridos mamá y papá Donde viven las historias. Descúbrelo ahora