Queridos mamá y papá

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La puerta de la sala fue sutilmente golpeada, David decidió levantarse para ver quién llamaba. No se esperaba ver la cabezera de dos personas reconocibles, que había visto también hace dos días días. Los pequeños Neil y Nikki.

- Podemos ver a Max?- preguntaron, se notaba su nerviosismo, llevaban semanas sin hablar, ambos se habían  evitado.

David se lo pensó un segundo, sabía que le habían hecho al pequeño, pero también sabía que no querían hacerle daño, que fue un error, y que intentaban enmendar sus errores, así que decidió que lo mejor era abrirles la puerta para que con suerte, Max reconectara con sus "amigos"

- Hola Max... Como te encuentras?- Neil pregunto por ambos, casi se traba intentando hablar.

- Bien, ya habéis visto cómo estoy, podéis volver a  contarle a todos como estoy... Si queréis hasta llevaron una copia de mi parte médico, así podría recitar todo a la perfección.

- No venimos a eso Max, venimos a ver cómo estás de verdad... Nos preocupaste mucho.

- Yo... Estoy bien, al menos fuera de peligro y esas mierdas...

- Y el resto? Te duele mucho?

- Estoy con antibióticos, así que el dolor está apaciguado, pero una vez que me los quiten estaré un poco peor... Pero me encuentro bien por ahora.

- Sabemos que no es que nos tengas gran aprecio, pero todos nos hemos preocupado mucho por ti, ayer Ered nos dijo que había vuelto, y todos nos reunimos para ir a pedirte perdón, nos comportamos muy mal hace unas semanas... Tuvimos que ver que lo estamos haciendo horrible.

- Y ahora venís a pedirme perdón para que os perdone y todo volvamos a ser amigos?

- No creo que nos vayas a perdonar tan rápido, y lo comprendemos perfectamente, pero queremos decirte que siempre que lo necesites, cualquiera de nosotros podremos ayudarte. Y que estaremos si necesitas algo.

Max se mantuvo en silencio, no sabía que podía decir , se había quedado son palabras. Nikki decidió seguir hablando.

- Trajimos unas cosas que nos dieron el resto del grupo, decidieron que era mejor que solo fuéramos nosotros, para no molestar demasiado... - Niki procedió a entrar alguna avisas que ella y Neil tenían entre las manos.

-Esto es una postal hecha por Dolf, tiene algunos de sus dibujos y la firma de todos nosotros... También unos chocolates, porque están muy ricos y eso...

- Gracias, es un detalle- recibió los dos detalles y los dejo en la mesa de su lado.

- Pues ... Nos retiramos, si eso podremos vernos cuando salgas de aquí... Adiós max.- Los dos jóvenes se despidieron y procedieron a salir por la puerta.

- Esperar!- se sorprendió por la rapidez de aus propias palabras.

- Si Max?

- También podéis pasar más tarde... Y pueden venir el resto... Para pedirme perdón y eso, que no me vale que solo lo hagáis vosotros.- Intento sonora intimidante, pero un crío de 10 años que estába costándole cada palabra que decía, no sonaba tan intenso como esperaba.

Los dos jóvenes d ela puerta se rieron sutilmente por ese comportamiento de su amigo, el cual no lo había imaginado nunca si, sin duda David le había cambiado.

- Sería aún placer para todos- Neil afirmó, apuntes de que fueran con una sonrisa en la cara, todo fue mejor de lo que esperaban.
David cerró la puerta, una vez que los dos se fueron y se quedó junto a Max , en la mala silla que tenía a su lado.

- No te parece muy bueno que hayan venido? Al menos se han dado cuenta de su error, y pretenden disculparse... Podías darles una oportunidad.- David actuaba como el padre que era, o el que iba a ser .

- Estoy seguro que Hitler se podría haber dado cuenta que también lo hizo mal... - Y Max actuaban como el crío que era.

- Pero el no lo hizo, y ellos si, así que más te vale que les des otra oportunidad.

- Claro Papá...- El mayor reacciono sonriendo para si mismo por la palabra utilizada por Max, el pequeño también sonrió cuando se dio cuenta.

- Que pone en la nota? - Se inclinó para verla, el azabache la tenia entre las manos mientras que la leía.

- "Lo sentimos por lo del otro día, esperamos que te recuperes correctamente" , y abajo están las firmas de todos, junto a un dibujo de Dolf en el cual se puede ver a un yo contento...

- Que bonito detalle suyo...

- Bueno, al menos los chocolates están ricos.- El pequeño ya le había incado el diente a la caja, la cual estaba en segundos medio vacía.

- No te comas todo o de dólares los dientes! Y también déjame probar una!

- No, esta es mi recompensa por toda la mierda que he tenido que pasar, si querés tu chocolates, recibe palizas antes!

- Eso es muy indecente de tu parte jovencito, muestrame un poco de respeto, que soy tu padre!

Max quería responde reciba más sarcasmo, pero no pudo aguantar la risa, no espero que la respuesta de David fuera esa, le tomó por sorpresa, el pelirrojo también se empezó a reír, vaya pareja de tontos.

Max se rió tanto que hasta su costilla le ego un viaje malo, el caul le hizo recordar el porque se encontraba en el hospital.

- Tenemos que tener más cuidado. No quiero que se cierre de mala manera... Mejor te tumbas en la cama y esperás un rato.

- Lo que digas viejo.

Max procedió a tumbarse en la camilla y al poco tiempo, sus ojos se cerraron estaba muy cansado. Necesitaba una sienta.