Las Hermanas Jauregui| Camren

Capítulo 16 T2

Billie POV

Era una tarde fresca y tranquila del día siguiente cuando volví a abrir mis pesados párpados. La luz del sol invernal se asomaba por el horizonte nevado.

Los cazadores me habían escoltado hasta un ala del castillo fuertemente custodiada la noche anterior. Me permitieron quedarme en una habitación oscura con una ventana arqueada que daba a una gran plaza común al/este.

La cámara olía a hojas de otoño muertas cuando entré por primera vez, pero tema un ambiente acogedor. Desde la ventana podía ver un grupo de pequeñas casas de piedra que se extendían hacia el desierto verde oscuro.

La niebla se había aclarado fuera del vidrio esmerilado, pero el frío no había cesado en la habitación. Una chimenea encendida proporcionaba  calor e iluminaba el lugar con su resplandor dorado. Un  conjunto de viejos muebles acolchados se extendían alrededor de una gran alfombra bizantina descolorida. La cama de cuatro postes hecha de madera de roble estaba colocada junto a la otra pared. Era donde había dormido como un muerto, qué irónico, pero al menos mejoré y mis miembros ya no se sentían como si pertenecieran a otra persona. Incluso las heridas más profundas se habían curado prácticamente sin la menor cicatriz.

A Lyra no se le permitió estar conmigo esa noche, recordé que había insistido, pero fue en vano. Deben haberla mantenido alejada de mí debido a mis tendencias depredadoras. Pero no me importó. Era mejor para mí que me dejaran sola.

Cuando salí del salón con las dos cazadoras y algunas otras el día anterior, el hombre cuyo nombre no recordaba me había preparado una bolsa caliente de sangre fresca. Esto debió haber acelerado mi curación y mejorado un poco mi estado de ánimo, aunque todavía estaba confundida después de una sesión de conversación profunda con el anterior líder bolchevique, supuestamente muerto.

Trotsky también estuvo vivo todo este tiempo, bueno, más o menos. Ahora era el supuesto general de los cazadores. Había dejado en claro que su objetivo era derrocar a mi gobierno con mi ayuda. Era ridículo como sonaba, pero por alguna razón, su sugerencia inquietante todavía  dependía sobre mí como un peso invisible.

-Tienes que unirte a nosotros y ayudarnos a liberar a los humanos, Billie, este mundo no pertenece a los muertos, sino a los vivos. Tienes el poder de volver a arreglar las cosas.

Mis ojos todavía estaban enfocados en el vacío más allá del techo grisáceo cuando escuché un fuerte golpe en la puerta de madera antes de que Se abriera con un chirrido, y salieron algunos cazadores. Entonces Valentinq también entró en la habitación. Pasé mis piernas por encima de la cama y me puse de pie.

Mi movimiento hizo que al menos dos cazadores detrás de ella se aferraran a sus armas por precaución. Pero Vale los tranquilizó con un gesto de la mano.

Les di una sonrisa divertida mientras seguían mirándome de mala gana. Uno de los cazadores llevaba un montón de ropa en sus manos.

- Espérame afuera. - dijo Valentina  a sus compañeros y tomó la ropa.

- Pero ... Beta, no deberías estar a solas con ella. ¿Y si pasa algo? Puede ser peligrosa. - advirtió uno de ellos.

-No te preocupes. - ella se volvió de reojo hacia ellos. - Puedo manejarlo.

Dudaron por un momento antes de que finalmente asintieran y se fueran, cerrando la puerta mientras salían. Cuando se fueron, Vale puso la ropa sobre la mesa cerca de la puerta y se aclaró la garganta con torpeza.

- Me ordenaron que te mostrara los alrededores, así que debes prepararte. - dijo en un tono plano.

- ¿Y a quién le debo el honor?" Pregunté, arqueando las cejas con una sorpresa sarcástica.