Capítulo 44

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Los días se fueron convirtiendo en semanas, y en todo ese tiempo la investigación con respecto a la muerte de Ling quedaba en nada.

Eso para Shaoran era demasiado frustrante porque no podía limpiar su nombre. Sakura intenta tranquilizarlo pero es inútil. En esas semanas su dolor de cabeza ha estado aumentando y eso le preocupaba mucho. Si bien es cierto que él no lo demuestra delante de ella y su hija, Sakura no es tonta y lo ha encontrado varias veces con una mueca de dolor.

Akane después de la muerte de su madre, se refugió de lleno en los brazos de Shaoran. A pesar de haber descubierto que no es su hija, la ama como tal y está dispuesto a cuidarla y protegerla de todo quien ose hacerle daño. Eso también incluye a Sakura y sus hijos.

El embarazo se está notando, el cuerpo de Sakura está mucho más radiante así como su cabello y sus ojos. Shaoran cada vez la cuida y consiente mucho, al igual que Akane siempre está al pendiente de ella cuando su papá está ausente por el trabajo.

Meiling, Tomoyo y Ali también la consienten mucho, esos niños están siendo muy esperados con ansias. Incluso ya han comprado muchas cosas para la llegada de los dos. Eso para Sakura son acciones que se guarda muy al fondo de su corazón y los atesora como a nada.

La convivencia con Akane y Shaoran ha sido excelente, él decidió comprar una cada con jardín, por petición de Akane, la casa donde vivía con su madre fué vendida, ella no quiso volver para nada a ella, le traía malos recuerdos, incluso Shaoran tuvo que poner a su hija en terapia con Clow Reed ya que todos lo acontecimientos la marcaron para mal.

En uno de esos días cuando él estaba en su oficina recibió la llamada de alguien que no pensó escuchar. Se le hizo muy extraño que lo llame pero lo que le dijo hizo que a Shaoran se le acelere el corazón y sufra un nuevo golpe emocional.

—¿Li Xiao-Lang?—la voz de una mujer como de la edad de su madre lo sorprende.

—Soy yo¿ Con quién tengo el gusto?—pregunta extrañado.

—Soy la madre de Xiang—Shaoran abre los ojos con sorpresa, desde hace bastante tiempo no sabe nada de él, es como si la tierra se lo hubiera tragado—. Te sorprende mi llamada¿Verdad?

—Si me lo permite, sí señora, hace tiempo que no sé nada de él¿Cómo está?—pregunta acomodándose en su asiento y aflojando su corbata.

Al otro lado de la línea se forma un silencio que para él no es nada agradable, de un momento a otro, escucha llorar con tristeza a la mujer. Shaoran se preocupa, a pesar de la última vez que salieron discutiendo por tratar de aconsejarlo él lo siguió considerando su amigo. Pero las lágrimas de su madre le indican que algo está mal.

—¿Señora, que pasa, se siente bien?—pregunta levantándose de su asiento.

—El...—hipando y con un nudo en su garganta Shaoran queda en estado de shock al escuchar lo que no imagino escuchar—. Él se fue, me dejó muerta en vida, lo mataron. ¡Mataron a mi hijo!

Shaoran se desplomó en el suelo, su pecho está bajando y subiendo con mucha rapidez, unas lágrimas salen de sus ojos sin que pueda detenerlos, intenta asimilar otra muerte más, primero Ling, la madre de su hija, y compañera de aventuras en la secundaria, ahora Xiang el que estuvo con él con sus ocurrencias y locuras en la secundaria a gracias a él a veces escapaban de tantas responsabilidades, las bromas a los maestros él fué siempre la mente maestra.

Shaoran se limpia sus lágrimas con  la manga de su camisa, intenta buscar palabras de consuelo para su madre pero es inútil. Él también en ese momento las necesita. Con la muerte de ellos dos es como si estuviera muriendo y olvidando una parte de su pasado que fue feliz y tranquila. Solo lamenta no haber visto los sentimientos que le profesaba a Ling. Hubiera hecho lo posible por juntarlos y tal vez hubieran sido felices.

𝐍𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐨 𝐏𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora