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Narrador omnisciente:
George entró a la enfermería y frunció el ceño al no ver a Joyce por ningún lado, obviamente la chica no iría a su cuarto así que...donde estaba?

Caminó hacía más adentro para mirar detrás de una cortina que separaba las dos áreas del lugar, cuando la vio curándose ella misma la mano sonrió con ternura.

-Suelo ser yo quien se mete en problemas cariño, que ha pasado?- preguntó este mientras tomaba una silla y la colocaba al lado de la chica para sentarse.
-Cállate.- le dijo Joyce aún alterada.- Lo siento, no estoy de humor.

-Eso puedo verlo...- dijo George sorprendido.- Te duele mucho?- preguntó mirando su mano.
-No tanto como le dolerá a ella.- respondió sin mirarlo.

-Te encuentras bien?- preguntó el pelirrojo una vez decidió hablar y colocar su mano en su hombro pero ella lo apartó.- Joyce?

-Como sé que esto no es algo por diversión, o es un simple juego? Como se que no me estás mintiendo para reírte después con tus amigos? O como se que esto no es una apuesta con el idiota de Alan para ver quién consigue primero...- empezó a decir pero fue interrumpida.

-No. No pienses nada de eso, Joyce por favor... que te hace pensar que podría hacerte algo así?- preguntó algo decepcionado.

La chica no respondió, se quedó pensando lo que llevaba pensando mucho tiempo.

-Sabes? Victoria me explicaba todo lo que hacíais. Me explicaba los besos y los coqueteos... me explicaba la forma en la que la mirabas y todo lo que le decías.

-No, no Joyce no es...- empezó a decir el chico pero la chica lo miró.
-Qué? Vas a decir que no era de verdad lo que decías? Que no lo sentías?- preguntó algo molesta.

-Yo...- empezó a balbucear George.- No se que puedo decir para que me creas. Lo siento.
-Bien.- terminó por decir la chica para intentar levantarse e irse.

-Joyce no, espera.- la paró George con nerviosismo.- No te vayas.
-George...realmente no quiero sufrir más, no quiero entrar en algo que se que no voy a salir.- le dijo a lo que el pelirrojo se acercó más a ella.

George se cruzó de brazos en ese instante y analizó a la chica detenidamente, como si quisiese saber que estaría pensando en esos momentos.
-George?- preguntó ella algo nerviosa, pues el pelirrojo no le quitaba la vista de encima.

-Lo siento.- dijo algo avergonzado.- Joyce...no se como decirte que en realidad...tú...- empezó a decir.

La chica esperaba que continuara la frase, se miró la mano vendada y suspiró con cansancio.
-George si no tienes nada más que decir...- dijo pero el pelirrojo bufó.

-Es que quiero decirte demasiadas cosas pero simplemente tenerte delante...lo haces mas
complicado.- intentó decir pero al parecer, Joyce no entendía nada.

-Quieres que me de la vuelta o algo parecido?- preguntó de forma sarcástica pero al ver la cara de aprobación de George rodó los ojos.- Enserio, tan importante es para que tenga que girarme?

La chica se dio la vuelta dándole la espalda ahora al pelirrojo que cerró los ojos para tranquilizarse antes de empezar a decir.

-Bien...te diré lo que pienso al respecto de todo.- empezó a decir.- Pero no se cómo decirte...que me has hecho sentir algo nuevo.

-Nuevo?- preguntó ella algo confundida.

George se empezó a acercar mas a ella.
-Nuevo...me has hecho sentir cosas que nunca había sentido con nadie, ni con Katie, ni con Alicia, ni con Victoria.- empezó a decir muy seguro de sí mismo.

Joyce casi se desmaya al sentir el aliento del chico en su cuello.
-Eres tú, Joyce...me gustas.- dijo finalmente.

-A cuantas más le has dicho eso?- consiguió pronunciar con su voz más fuerte posible para que el pelirrojo notara que no tenía debilidad en él.

George sonrió al ver el nerviosismo en la chica así que decidió seguir. Estaban tan juntos, cuerpo con cuerpo y ninguno se apartaba.
-A todas.- dijo con simpleza.

-A todas!?- dijo Joyce intentando separarse pero el pelirrojo fue más rápido y le dio la vuelta quedando cara con cara.

George tenía una mano en la cintura de la chica para que no se fuera y la otra... le tapaba la boca para que le dejara hablar.

-Si, a todas les digo que me gustas tu.- le respondió en un susurro, mirándola en todo momento.

La chica llevó su mano para apartar la de George que seguía en su boca.
-No dirás nada amor?- preguntó George al ver que la chica no tenía palabras.

-No hace falta.- respondió ella.

El pelirrojo pronunció un "qué?" pero entonces, sintió como los suaves labios de Joyce rozaban los suyos con delicadeza y cuidado, algo nerviosa y con la respiración entrecortada Joyce había tomado el valor de cortar la tensión entre ellos.

George se sorprendió bastante pero siendo sinceros, esperaba ese momento desde el primer día de curso que la vio. Joyce había conseguido sacar emociones y y sensaciones nuevas para él y sin duda podría estar así durante el resto de su vida.

El pelirrojo seguía profundizando el beso pues quería más de ella, nunca pensó que necesitara tanto ese beso...estaba siendo mágico.

Cuando George quiso bajar su mano más abajo de la cintura de la chica, esta se apartó de inmediato.
-Alto ahí caballero andante...- dijo aún con el sabor del pelirrojo entre sus labios.

-Oh...vamos.- dijo atrayéndola hacia él.- Sabía que acabarías sucumbiendo.- le susurró al oído a lo que ella sonrió.

-Por si creo recordar bien...has sido tú quien ha confesado primero. Yo gano.- le dijo con una sonrisa.

George la observó y sonrió más aún, sintiéndose genial con sigo mismo y feliz de tenerla en ese momento.
-Ahora qué?- le preguntó ella rodando los ojos.

-Millones de personas y tu sonrisa siempre será mi favorita.- le dijo a lo que ella se sonrojó.

-Que idiota eres a veces...- le dijo a lo que George la acercó para darle un beso en la frente.

-Idiota por ti, amor.- le respondió con su mejor sonrisa.

our last look (George Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora