Capítulo 09: Aceptando el trato, estrechando manos.
Catalina estaba asombrada (no tanto para bien) al encontrar a Baudilio Bathory tomándola con fuerzas interrogándola sobre... ¡¿El poroto oloroso?! Inmediatamente, ella sí recordó haber visto aquello en la cocina pero evidentemente no sabía de dónde venía o qué tenía que ver con Anastasia.
—N—no sé de qué me está hablando.
—¿No? —arqueo una ceja —Anastasia aseguro tomar un te con esencia de estos porotos. Esta mañana se levanto en mal estado, ¿esto queria producir, verdad?
—¿Y por qué me culpa a mí? —le respondió empujándolo para mantenerlo más alejado —¿Por ser una descendiente impura se me va a culpar de absolutamente todos los males que pasen en esta JODIDA casa?
—¡Cuide mucho ese tono de voz!
—¡Yo NO tengo nada que ver con Anastasia y sus gases! —exclamó casi molesta cruzándose de brazos.
—¡Catalina! —regañó Baudilio casi perdiendo su cordura —Escúcheme, si usted no tuvo relación con el suceso, ¿por qué sostenía uno entre sus manos?
—Cuando anoche terminé de caminar con Boris, fui a la cocina para tomar un vaso de agua —explicaba con más serenidad —y fue ahí donde lo pisé. Estaban en el suelo y yo tomé uno. No sabía qué eran y—
—¿Señor Baudilio? —intervino Aurora subiendo la escalera, hasta ponerse al lado de Catalina, extiende su mano y muestra cuatro porotos más: —La señorita Catalina tiene razón. Anoche, yo me topé con los jóvenes Schneider haciendo un té cuando fui a preparar el de usted. Cuando salí de la cocina, ingresó la señorita Katyuska.
Catalina no estaba comprendiendo muy bien la discusión.
Baudilio parecía reconsiderar las acusaciones apresuradas hacia Catalina teniendo en cuenta la información reciente acotada por la dulce Aurora. Pensando en las palabras anteriores de Catalina, incluso los hechos coincidían a excepción de uno, que es la pregunta que rondaba por su cabeza:
¿Por qué Anastasia no me contó la verdad? Se preguntaba mentalmente.
—Está bien —terminó diciendo, le dedicó una mirada rápida a Catalina y sin más, se retiró.
—¡Gracias abuela! —abrazó Catalina como muestra de agradecimiento —Ah... perdón.
—No te disculpes, cariño —ella le masajeo la mano y se la tomó para acompañarla hasta el cuarto de Baudilio. —Le recomiendo que se dé una ducha, cambiaremos esas vendas y luego pasará a hablar con nuestro señor Bathory.
—¡¿Qué?! —esculpió pesadamente subiendo cuesta arriba los escalones —¿Acaso quiere llevarme con el desollador de cabezas, abuela? Si no hubiera llegado cinco minutos atrás, él me mataba.
—¿No quiere hablar con él?
Sí.
Sí quiero hablar con él pero... ¿Cómo resultará todo?
—Sí quiero hablar con él, pero tengo un poco de... —pensaba cuál sería la palabra correcta para definir lo que sentía.
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La hija de Alphas
WerewolfCatalina es una hija de dos poderosos Alphas puros en su totalidad. Ella se aleja de su manada para vivir el mundo que la rodea, descubrir cada misterio que se oculta y llenar sus curiosidades a pleno. Aventurera, valiente y poderosa, emprende su ma...