Capítulo 60

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ELLA:

El tío Álvaro junto su esposa Cristel y sus hijos (Evan, Joe y Madeleine), más la tía Selma y el tío Uriel (su esposo) junto con sus hijos (Mayra, Mariana, Susan e Isaac), más la tía Silvia con Paula Caitlyn y el tío David con Jessica llegaron hace unas horas.

Y aunque falta una familia de 5, a mi parecer somos bastantes personas.

Decidimos "tomarnos el día" primero que nada porque despertamos bastante tarde, también estábamos cansados y el resto de la familia tenía planes de llegar aquí, así que la noche cayó mientras ellos llegaban y para esta hora de la noche estamos terminando de cenar. Como es costumbre en esta casa, nunca hubo un silencio incómodo, en el fondo siempre se escuchaba música y la comida estuvo deliciosa.

Siendo honesta pensé que hasta cierto punto podría caer en los nervios iniciales de cuando los conocí por primera vez. Pensé que tal vez después de unos meses tardaría en volver a sentirme con confianza a su alrededor sin embargo no fue así. Los abuelos siempre tienen los mejores ánimos, los tíos son torbellinos de alegría, sus hijos son unas mini versiones de ellos y mis sobrinos son los únicos que para esta hora de la noche están cayendo debido al sueño.

Sin duda alguna, la manera en que más recuerdo este lugar, es que siempre nos envuelven sonrisas sinceras estando juntos.

Llegué a pensar que podría ser un tanto incómodo para Mauricio sin embargo no se ve ni un poco nervioso... de hecho, no me he pasado por alto las miraditas que le echa a mi prima...

— Familia, ya que todos estamos bien cenados y felices, nos gustaría hacer un anuncio — habló Mayra mientras tomaba la mano de su esposo — ha sido un secreto difícil de guardar, en especial para Ileana, así que dejaré que mi hija suelte la bomba.

— ¿En serio yo? — preguntó en un tono apenas audible mirando a Mayra quien asintió emocionada — ¿De verdad?

— Si no quieres lo digo yo...

— No, no, no. Sí quiero — habló interrumpiéndola y luego vimos a Ileana ponerse de pie sobre la silla donde se encontraba sentada llamando aún más la atención de todos — Tío Evan, ¿donde está Javi?

— En la sala cariño, no te preocupes puedes gritar todo lo que quieras — dijo sonriente y el hecho de que le haya dado permiso de gritar, aumento el nivel de emoción de Ileana notablemente.

— Okey, de acuerdo — dijo con una amplia sonrisa en sus labios — ¡Mi mamá tiene un bebé en la panza!

De un segundo a otro, el comedor fue invadido por risas, gritos, festejos y sobre todo felicitaciones.

La familia se hace más grande.

Una vez más.

Se suma un integrante a la familia Basurto...

— ¿Estas feliz? — la pregunta de Ileana me llevo a mirarla, la silla donde se había puesto de pie estaba justo a un lado mío así que simplemente bajo de ahí y me tomo por sorpresa abalanzándose sobre mi — tendré un hermanito. O hermanita. O varios. Dijo papá que eso es posible ¡Será asombroso!

— Lo es — dije asintiendo demostrando mi mejor sonrisa — te vas a divertir mucho.

— Seré la hermana mayor. Yo voy a mandar.

— Algo así — hable entre risas para que de un segundo a otro Ileana me rodeara con sus brazos.

Su sonrisa irradiaba más que la propia luz. Creo que incluso la sentí temblar un poco debido a toda su emoción acomulada y después de unos segundos sentimos que alguien se acercó hasta nuestro lado, nos separamos y vimos que era papá, tenía una enorme sonrisa en el rostro y en cuanto la mirada de Ileana dio con él, soltó una pequeña risa.

Otro tipo de amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora