Capitulo 4

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(Tn)_________
El enojo y la inseguridad comenzaban a invadir todo mi ser, el que Evan estuviese en Londres hacia que mis temores se hicieran presentes y luego estaba el hecho de que mi hijo no sólo había evadido mis ordenes, si no que también había terminado en alguna situación completamente refutable.
-¿Señora Whitmore?- Dijo el policía que tenía frente a mi, con un montón de formularios que llenar, sacándome de mis pensamientos.
-Lo lamento, ¿En que estábamos?-
-No se preocupe, solo le comentaba que llenando estos formularios y con una simple advertencia su hijo podrá quedar libre- Lance un suspiro y asentí con la cabeza.
-Muchas gracias por no hacerle un expediente a mi hijo y por mantener esto lo mas discreto posible- Comente mientras comenzaba mi labor con los formularios.
-No tiene nada que agradecer, sirvió mucho de ayuda a su hijo el hecho de que el joven con quien tuvo el altercado tiene ya tres cargos por mal comportamiento y conflictos en vía pública.- Joder, agradecía en el alma el hecho de que no tuviesen acceso a los expedientes de las policía de New York o de lo contrario Evan estaría en las mismas que ese chico.
-Pero igual al chico no le afecta nada, pasa por encima de la ley por su padre- El hombre seguía hablando mientras mi concentración se cernía en las hojas frente a mi.
-Siempre es lo mismo Dylan Styles siempre se sale con la suya- y ento es sentí que la sangre se me congelaba, ¿había escuchado bien?
-¿Como dijo que se llamaba el chico?-
-oo Dylan Styles, supongo que debe reconocer su nombre, es hijo de un ex miembro de una banda muy famosa- Claro que conocía ese apellido, lo había evitado prácticamente desde hacía 17 años. Lo que no me cuadraba era que de todas las personas con las que Evan se podría haber topado, tenía que haber sido ese chico en especifico. Aparte aquello de mi mente y me apresure a terminar los formularios, entre más rápido terminara, más rápido sacaría a mi hijo de aquel lugar y especialmente de aquella ciudad.
-Termine, ¿puedo pasar por mi hijo?-
-No se preocupe, lo traeré para acá- El hombre tomo los formularios y salió del pequeño despacho, lo único que me quedaba era rogar por que Styles y su hijo ya se hubiesen largado de aquí, por que no hubiese visto a Evan y por que no me lo topará jamás.
No paso mucho cuando el hombre volvió acompañado por Evan, quien permanecía con sus maletas en mano y la cabeza gacha.
-Evan- Dije en el típico tono de madre indignada, no podía creer que en menos de 48 horas Evan hubiese apelado cualquiera de mis ordenes y tomado la decisión de subir a un avión y venir a Londres.
-Mamá, te juro que tengo una explicación-
-Ahora no, hablaremos en la casa- Me levante de la silla donde había estado, me despedí cordialmente y salí con mi hijo del brazo a un andar un tanto apresurado, en cuanto nos vimos montados en la limosina, sentí un poco mas de alivio, el cual se extendió cuando esta hecho a andar.
-Madre...-
-No Evan, no salgas con tus excusas absurdas e incoherentes, no tienes ni la menor idea de lo molesta que estoy- Me gire para ver a mi hijo, quien mantenía unos ojos firmes y brillantes, si algo caracterizaba a mi hijo era el hecho de jamás darle la espalda a sus problemas, cosa que estaba segura no había heredado de su padre.
-Lo sé y no te diré que lamento haberte desobedecido por que no es así-
-Evan..-
-No madre, escúchame, te pedí una simple respuesta y tu no quisiste dármela, no puedo seguir prendiendo que ese bastardo no existe, quisiera hacerlo, pero no puedo, esta fue la única forma que encontré para obtener mi respuesta-
-¿siendo arrestado? ¿En qué mierdas pensabas Evan?-
-Lamento esa parte, realmente no pretendía meterme en problemas, pero ese hijo de..-
-Evan, basta, arreglaremos esto en casa de tus abuelos- y sin decir mas Evan se giró hacia la venta y centró su atención en algún punto, no sabia que hacer, tenía la situación con Niall y tener a Evan aquí solo me alteraba mas.

EVAN
La casa de mis abuelos era mas grande de lo que aparentaba en las fotos de mamá, el jardín delantero era frondoso y estaba completamente florecido. Mi madre caminaba hacia el porche mientras yo le seguía con maletas en mano.
-Cariño- Dijo la voz dulzona de mi abuela en cuanto abrió la puerta de entrada, rodeo a mi madre en un fuerte abrazo, el cual deshizo en cuanto me vio parado detrás de mi madre.
-¿Evan?- Mi abuela parecía contrariada y pasaba su mirada de mi madre a mi, casi como si creyera que lo que veía no era real. ¿Que mierdas pasaba con todos hoy en día?
-Hola abuela a mi también me da gusto verte-
-Lo lamento cariño, claro que me alegra verte, es solo que tu madre me había dicho que te quedarías en New York-
- Y a si debió haber sido- Comento mi madre molesta mientras me fulminaba con la mirada. Si de algo podía estar seguro, era que en cuanto tuviera la oportunidad mi madre sacaría toda su furia y yo me vería gravemente afectado.
-Pero pasen, de seguro deben estar agotados- Mi madre y yo entramos detrás de mi abuela, la casa era mas imponente por dentro que por fuera. Pisos de caoba y lámparas de cristal, daban a la casa un toque victoriano.
-¿Donde esta papá?- Preguntó mi madre mientras mi abuela nos guiaba por un enorme pasillo lleno de pinturas y algunas que otras fotos familiares.
-Tu padre salío a resolver algunos asuntos de la oficina-
-¿Aun sigue llendo a ese despacho?Creí que había contratado quien tomará su lugar-
-Si lo hizo, pero tu sabes que tu padre no puede estar sin hacer nada por mucho tiempo-
-Debería dedicarse a cuidarse, eso es lo que debería hacer, el doctor le dijo que tuviera el menor estrés en su vida- Nos detuvimos en lo que estaba seguro era la sala de TV, una enorme pantalla plana ya hacía colgada en la pared, al igual que en el pasillo las paredes estaban decoradas con fotografías y una que otra pintura. Un sillón de cuero hacia juego con el piso de madera y las paredes color crema.
-Tomen asiento, iré a traerles algo de tomar- La abuela nos dejo en la enorme habitación y regreso por donde habíamos llegado.
-Es grande la casa- Dije tratando de romper el incómodo silencio que se había producido entre mi madre y yo.
-Volverás a New York- El comentario repentino de mi madre, hizo que de golpe centrará toda mi atención en ella. No estaba dispuesto a irme sin obtener aquello que había ido a buscar.
-No, no puedes obligarme- Mi madre lanzó un suspiro para después mirarme con ojos firmes.
-No estoy pidiendo tu opinión, esta noche volverás a casa y fin de la historia- No, me negaba a aceptar aquello. Mire fijamente a mi madre, sin vacilación, sin titubeos y con toda la firmeza que podría haber tenido jamás.
-No me ire, por lo menos hasta que consiga mis respuestas-
-¡Es que no hay nada que responder!- esta vez la voz de mi madre fue distorsionada por la desesperación, no tenía ni idea del por qué de su reacción, pero aquello solo hacia que me intrigara más sobre el tema.
-¿Por qué no quieres que sepa quien es mi padre?- Mi voz era calmada y casi desinteresada. Mi madre enmudeció y me observo por unos segundos.
-Creí que te bastaba con estar conmigo- Dijo de pronto, en forma resentida. Sabia por donde pintaba todo esto, me había hecho olvidar el tema de mi padre por años con aquella frase, siempre intentando verse como la dolida y haciéndome sentir como el peor hijo del mundo. Pero esta vez no, ahora lo suficientemente grande como para comprender el alcance de esas palabras.
-Claro que me basta y me sobra tenerte a ti como mi madre, pero eso no tiene nada que ver con mi necesidad de saber de donde jodidos provengo-
-Joder Evan, No insistas mas, no tiene caso-
-Si que lo tiene, quiero saber quien fue el imbecil que se atrevió a dejarnos, quiero verlo a la cara y que sepa lo bien que estamos sin el, quiero que se arrepienta por haberte hecho sufrir, madre ¿que no te das cuenta que lo único que quiero es hacerlo pagar por lo que te hizo?- Mi madre permaneció en silencio, sus ojos me miraban con preocupación. Se acercó a mi y colocó una de sus delgadas y finas manos en mi mejilla, dando pequeñas y tiernas caricias, mientras me observaba con cierta nostalgia.
-No quiero que tu tengas ese tipo de sentimientos tan enfermizos, déjame eso a mi, tu vive tu vida cariño y no te preocupes por el pasado que ese ya no tiene solución-
-Pero..-
-Solo olvídalo, el no vale la pena como para que tu intentes probarle algo- Mi madre deposito un beso en mi frente y acto seguido desapareció por el mismo pasillo por el que habíamos entrado.

Harry
-¿Quieres explicarme que mierdas estabas pensando?- Dije exaltado mientras observaba a mi hijo, quien mantenía una postura desinteresada, la cual me irritaba mas.
-Solo fue un pequeño altercado-
-Dylan, es tu 4 arresto en en menos de dos meses, ¿tienes una jodida idea de lo que eso implica?-
-¿Más historial?- Lance una mirada asesina a mi hijo en forma de advertencia, si algo detestaba de el, era lo cínico que podía llegar a hacer. La verdad era que me recordaba a mi en muchos aspectos, pero aquello eras de las pocas cosas, que estaba seguro, había heredado de su madre.
-¿Harry?- La voz de Niall detrás de la puerta del despacho, interrumpió cualquier cosa que estuviese apunto de decirle a mi hijo.
-Pasa- Niall entro por la enorme puerta y me observo con una sonrisa simplona en el rostro, este hombre podía llegar a verse tan joven como un chico de 20 años, con tan solo una jodida sonrisa.
-¿Interrumpo algo?- Niall paso su mirada de mi a Dylan, quien ya había comenzado a levantarse del sillón donde había pasado los últimos minutos, como bien sabia, ignorando mi regaño.
-Claro que no Tío, yo ya me iba, hablamos luego papá- Sin que pudiera decir nada, Dylan desapareció como un rayo por la puerta. Lance un suspiro tras la salida de mi hijo, tratar con el en esta edad, era agotador e incluso tedioso.
-¿Problemas con Dylan?-
-Nada grave, lo de siempre- Dije a mi amigo tras invitarlo a sentar frente a mi escritorio.
-Pero dime, ¿Que te trae por aquí?- Niall pareció recordar el motivo de su visita, puesto que recuperó la sonrisa de hacía unos segundos y me miro entusiasmado.
-¿qué harías si te dijera que (tn)______ esta en Londres?- y de pronto mi enojo de disolvió y mi atención quedo por completo en Niall.
-¿que? ¿Estas jugando conmigo?- (tn)______, su nombre era un detonante de un sin fin de sentimientos almacenados por años y todos mis allegados, incluyendo a Niall eran consientes de ello.
-No, ella esta aquí-
-Pero, ¿que hace aquí?- después de 17 años escuchar que ella había vuelto, era casi como si intentarán convencerme de que el mundo era cuadrado. Increíble e imposible.
-¿Recuerdas el edificio que estaba vendiendo?-
-Si, pero ¿eso qué tiene que ver con ella?-
-Adivina quien es la compradora-
-No lo puedo creer, ¿estas seguro?-
-Mierda Harry, te estoy diciendo la verdad, yo mismo la he visto hoy- Me quede callado analizando aquello, ella había vuelto, después de 17 años había regresado. y entonces vino a mi mente aquello que sabia era inevitable preguntar.
-¿Vino sola?-
-Si te refieres a que si lo trajo con ella, No el no vino con ella- Niall me miro con cierta cautela, sabia lo que para mi significaba el que (tn)____ estuviese de vuelta.
-¿Ella te lo dijo?-
-Si, aun que de haber venido con el, dudo mucho que lo dijera-
-¿Por qué?-
-por que sabe que te lo diría y ella no quiere que te acerques a el-
-Tengo que verla- Dije de golpe y sin pensarlo por mas tiempo.
-¿y si no quiere verte?-
-Insistiré, es momento de que (tn)____ y yo volvamos a vernos a la cara- Estaba decidido, no dejaría que esta oportunidad se pasara por alto. (Tn)_____ y yo volveríamos a estar frente a frente.

El hijo de Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora