Pov Alison
Íbamos en el auto de Kilian y desde que salimos del centro comercial no me a hablado ni mirado siquiera. Suspiro frustrada, miro por la ventana y me doy cuenta que éste no es el camino a mi casa si no a la de él.—¿Daddy, no se supone que me lleves a mi casa? —y otra vez soy ignorada, esto es tan frustrante.
Después de un buen rato llegamos a su casa. Se estaciona para enseguida bajar del auto, yo hago lo mismo, en cuanto entramos no pasa ni un minuto y Kilian patea unos muebles de la entrada haciendo que pegue un salto del susto por la repentina acción.
—¡Ven acá Alison! —caminó hasta la sala, yo solo lo seguí en silencio —¡¿qué mierda se supone que hacías con ese imbécil?! —grita molesto caminando de un lugar a otro.
—Y-Yo... —¡maldición!, ni siquiera puedo hablar bien.
—¡¿Tú que Alison?! ¡¿tú qué?! —grita furioso apretando sus puños con fuerza y furia irradiando de sus ojos—. ¡Habla de una maldita vez y explícame porque mierda te estabas comportando como una cualquiera! —enseguida siento como mis ojos pican y mi corazón late con fuerza.
—¡Y tu no me contestaste por casi una semana porque seguro estabas con tu maldita secretaria, ni siquiera me prestaste atención por salir con esa zorra! —le grito, pero solo sentí como me dió una bofetada haciendo que gire la cabeza bruscamente.
—¡Cállate, no voy a permitir que me grites en mi propia casa! —me toma bruscamente del mentón para que lo mire —no puedo creer que andabas de ofrecida con ese idiota —ha este punto ya las lágrimas corren por mis mejillas libremente sin control.
No puedo creer que hace unos días decía amarme y que ahora me trate de zorra, que imbécil.
Aparto mi rostro bruscamente de su agarre y levanto mi mano para darle una bofetada, pero él fue más rápido y tomó mi muñeca con fuerza.
—No puedo creer que la niña que yo creía que eras es sólo una...
—¡Kilian, ya basta! —exclamé tratando de soltarme, pero lo único que hizo fue apretar con más fuerza mi muñeca hasta tal punto que pareciera que se fuera a romper en cualquier momento.
—¿Cómo me llamaste? —sujetó con más fuerza mi brazo —me equivoqué contigo Alison, eres igual a todas, solo eres una cualquiera, una simple zorra —las palabras que decía me lastimaban.
Empecé a forcejear hacia atrás, pero cuando él me soltó no me fijé y detrás mío había una pequeña mesa de vidrio con unos floreros con los cuales choqué.
—¡Aaaaah! —caí en la mesa y los floreros cayeron encima mío mojándome por completo. Habían vidrios regados por todo el piso y yo en medio de ellos. Estaba toda empapada, mis manos comenzaron a arder, al mirarlas me di cuenta que tenía varias cortadas en mis brazos y muñecas de las cuales salían sangre manchando así el suelo blanco de mármol.
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𝐀𝐋𝐈𝐒𝐎𝐍 +𝟏𝟖
Romance𝐋𝐈𝐁𝐑𝐎 𝐈 𝐒𝐀𝐆𝐀: 𝐔𝐍 𝐉𝐔𝐄𝐆𝐎 𝐃𝐄 𝐒𝐄𝐃𝐔𝐂𝐂𝐈Ó𝐍 "𝐌𝐢 𝐏𝐞𝐪𝐮𝐞ñ𝐚 𝐏𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐚" Alison Ivanov, una chica de dieciséis años con padres dueños de exitosas empresas tanto nacional como internacional. Ella lleva una vida normal como...