Perdidos en la isla

Capitulo 23

Aurora

Will mira alrededor desesperadamente tratando de buscar algo. O a alguien.

- Estás loco Will - afirmo masticando mi plátano.

- ¿Ves esto? - pregunta señalando la arena y se veía un poco hundida - Es una huella.

- Es un hueco - le corrijo mientras Will seguía viendo y analizando las "huellas"

Will las persigue hasta que se topa con un árbol.

- Acá acaban - determina mirando el árbol - Se ha trepado al árbol.

- ¿Como sabes que es una persona?

- Buen punto...- asiente y se voltea a mirarme mientras se rasca la barbilla - Puede ser cualquier cosa que sea capaz de robar.

- Quizá es un animal que tenía hambre, nada más - comento dando otro mordisco.

- ¿Nada más? - repite mirando el árbol - Es la única comida que nos queda.

- Ya déjalo Will - digo echándome en la mesa.

Escucho un crujido de madera y lo volteo a ver inmediatamente. Will está intentando subirse al árbol.

- ¡Will! - le grito - Ya déjalo.

- Ya, está bien - se rinde alejándose del árbol y acercándose a la mesa - Hay que guardar la comida en la tienda.

- Como quieras - me eche en la mesa de nuevo, el sol estaba calentando pero igual la mesa tiene una sombrilla.

Siento un cosquilleo en mis pies que va subiendo por mi pierna. Alzo mi cabeza y veo a Will subiéndose a la mesa mientras me da besos desde los pies y va subiendo.

- Will...- rio mientras Will va subiendo - ¿No estás cansado?

- Nunca cuando se trata de ti - asegura besándome y hace que me ría más. Llega a mi intimidad y mi risa se convierte en una de placer- Pero si estás cansada...

- No, no lo estoy - respondo inmediatamente mientras que Will la devora. Me demora.

Will

Así no pasamos el día, comiéndonos de uno a otro. Primero fue en la cascada, luego la mesa, después nos fuimos a las camas del otro lado de la isla, también lo hicimos en la orilla del mar y finalmente ya completamente agotados en la tienda.
Nunca me cansaré de ella.

- Crees que ya habrán llegado? - pregunta Aurora mientras miraba el techo de la tienda. Echada sobre mi pecho - El barco.

- No estoy seguro...- respondo sobándole su espalda baja - Hemos pasado 5 días aquí y para que termine el crucero faltaban como 15 días.

- ¿Solo han pasado 5 días? - pregunta exaltada alzando su cabeza para mirarme - ¿Tan poco?

- ¿Te parece poco? - le devuelvo la pregunta.

- No...bueno si, no lo se - duda Aurora bajando su cabeza nuevamente a mi pecho - Parece que te hubiera conocido más tiempo.

- ¿Ah si? - pregunto curioso y emocionado - ¿Por qué lo dices?

- Ya conozco todo de ti, bueno lo que me has contado...- responde pasando su mano por mi abdomen bien marcado - Pero tu forma de ser ya me la sé toda.

- Yo también ya te conozco perfectamente - presumo.

- Lo dudo - sonríe ella  - A ver dime una cosa.

- Eres muy dormilona.

- Eso es muy general - ríe Aurora - Algo que en verdad me sorprenda.

Me pongo a pensar seriamente, Aurora hace ruidos de burla pensando que no iba a responder.

- Siempre te muestras como alguien segura, como si absolutamente nada te hiciera dudar, que todo lo puedes manejar tú sola y supongo que es porque has estado la mayoría de tu vida sola y has sufrido bastante, ademas que tuviste que independizarte en una edad temprana - digo y Aurora se desapoya de mi pecho para mirarme fijamente - Pero cuando logras entrar a ese cascarón y creo que lo he hecho...- continuo sobándole la cabeza - Eres como una niña que vive soñando en su propio mundo. En sus libros. Una niña que aún vive en el país de la maravillas y temes que alguien entre y te destruya eso.

Aurora

Lo miro intensamente, me inclino un poco y le doy un beso corto pero lleno de amor. Evitando a toda costa el escozor que ya sentía en los ojos.

- ¿Ahora si te sorprendí? - pregunta sonriendo Will y yo asiento sonriendo también.

- Gracias - le sonrío.

- ¿Que cosa? - pregunta confuso Will.

- Por querer entrar a ese cascarón - respondo sobándole la mejilla.

- Entonces ¿estoy dentro? - pregunta emocionado.

- Estás dentro - afirmo sonriendo dándole otro beso.

Will ríe y me abraza con más fuerza. Como si temiera soltarme.

- Pero...- le susurro - ¿Yo estoy dentro del tuyo?

Daría lo que fuera por poder verle la cara pero no puedo, solo puedo sentir su cuerpo junto al mío y puedo notar que se tensa.

- Buenas noches - le beso su pecho y me acurruco en el, lo abrazo mientras me quedo dormida.

Sé que quiero saber la respuesta pero yo misma dije sin presiones. Will es de esas personas que su mirada está llena de misterios y yo voy descubriendo poco a poco y no quiero ir tan deprisa. Aparte también tengo miedo de saber la respuesta.

Will

Aurora se queda dormida mientras yo ando en una guerra con mi interior. Dedo admitir que esa pregunta de Aurora me descuadro, sin embargo realmente la esperaba, solamente que no tengo una respuesta aún y supongo que Aurora lo sabe y lo entiende.

Quizá solo hayamos pasado 5 días aquí y 3 días más en el barco. La conozco hace como más de una semana pero siento cosas que jamás llegue a sentir.
Quizá es poco tiempo pero literalmente estos 5 días hemos estado las 24 horas juntos que es imposible no apegarse o conocerse.

Cuando conoces a alguien, sales a una cita o pasas una noche con esa persona pero son máximo 2 horas o ya 3 exagerando. Y así te vas enamorando hasta en un mes o más pero ¿qué tal si juntamos todas esas horas? ¿Si pasasen esas horas dividida en días en un solo día de 24 horas?
Sucede lo que a Aurora y a mi nos está sucediendo. Por eso ahora comprendo lo que Aurora piensa que nos pasa que es ese síndrome pero realmente analizando toda la situación, no siento que sea eso. El síndrome de Estocolmo es más como un secuestro literalmente y esa persona cree que esa costumbre es enamoramiento. Pero enamorarse es diferente...

Espera, ¿por qué estoy mencionando el enamoramiento? ¿Acaso estoy enamorado?

Dios mío, mejor ya me pongo a dormir.