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-Cariño ¿Qué hacen?- rió margarita viendo a la pareja bajo la cobija de Harry.

-Un fuerte- contestó Louis asomado su sonrojada carita hacia la mujer.

Harry rió jalando el piecito de Louis hacia adentro de nuevo para continuar haciendole cosquillas.

Margarita rió y continuó su trabajo escuchando las risas de la pareja junto a murmuros que no lograba entender.

-Hazme una travesura Harry y te voy a azotar. No importa cuantos años tengas- advirtió escuchando a la pareja acercarse a ella.

Harry rió abrazando a Margarita por la espalda.

-Nos atrapó cariño- rió mirando a Louis quien le abrazaba también.

La alarma de Harry sonó recordándole que debía darle medicia a Louis.

-Ven niño te espera un rico jarabe- llamó tomando la manita de Louis.

Louis formó un puchero mientras Harry le sentaba en la barra y giraba para llenar el vasito .

-Abre el pico- ordenó tapando la naricita de Louis para que abriera la boca y poder meter el jarabe. -¿Rico?- molestó mirando a Louis quien formó una expresión de disgusto.

-Nop- contestó bajando de la barra para tomar la mano de Harry.

-¿Que haces príncipe?-

-Baila conmigo- pidió jalando a Harry a la cocina.

-No sé bailar amor- .

-Yo tampoco- rió mientras se abrazaba a él y comenzaba a balancearse de un lado a otro.

Comenzaron a balancearse trazando circulos en el suelo con sus piecitos.

-Harry- llamó el niño sin abrir sus ojitos mientras seguía el ritmo.

-Dime cariño- correspondió apoyando su cara en la coronilla de Louis sin abrir los ojos.

-¿Todavía me quieres?- .

Harry soltó una risita y soltó un suspiro .

-Todavía te quiero Louis, estoy casi seguro de que te quiero cada día más- respondió simple sin detener sus movimientos.

Louis suspiró escondiendo su cara en Harry .

-Yo también te quiero Harry- respondió acariciando su cuello con las manitas.

-Entonces es mutuo-

Louis asintió y continuaron su pequeño baile en la cocina.

Harry comenzó a besar lentamente a Louis mientras sentía las manitas del niño en el cabello y el acariciaba su pequeña cintura con la punta de los dedos.

-¿Quieres seguir jugando príncipe?- preguntó apretando las mejillas del niño quien asintió.

-¡Yo me escondo!- gritó mientras corría a alguna parte de la casa haciendo reír a Harry.

Harry se quedó sentado unos minutos mientras contaba hasta que escuchó un pequeño grito de Louis.

-¡Ya puedes buscarme!- gritó el niño emocionado.

Harry salió de la cocina a la sala buscando al niño sin éxito.

-toc toc-  llamó en voz alta.

-aquí estoy- respondió seguido de una risa.

-¿Toc toc?- .

-mhhh, aquí estoy-  contestó asomando su carita.

Harry subió hasta su habitación y abrió la puerta intentando no hacer ruido.

Escuchó una pequeña risa debajo de la cama y se recostó en el suelo.

-Te encontré- asustó al niño tomando su piecito jalándolo juguetonamente fuera de la cama.

Comenzó a hacerle cosquillas en el abdomen levantando su pequeña blusa, pegó sus labios a su abdomen y sopló para hacer trompetillas en su piel.

Louis pataleó alegre apretando el cabello de Harry quien se sentó acomodándolo en su regazo.

-Te toca buscarme- murmuró Harry mirando los labios del niño quien asintió.

Louis dejó un piquito en los labios de Harry y apoyó su carita en la almohada para contar.

Harry salió de la habitación y se escondió en el baño de abajo pues era algo alto para esconderse en otro lugar.

-Allá voy, allá voy- avisó emocionado mientras saltaba en la cama.

Salió buscando a Harry sin éxito sin saber realmente dónde buscar.

-Toc toc- preguntó con una sonrisa brillante.

-Aquí estoy- respondió asomando su cara para evitar hacer eco y que Louis le encontrara.

Louis saltó escaleras abajo pasando distraído junto al baño para dirigirse a la cocina.

Llevó su dedito a la boca para lamerlo por puro gusto mientras buscaba con la mirada.

-Tic Tac- llamó en voz alta de nuevo.

-Es toc toc- corrigió Harry haciendo que Louis girara su carita y le encontrara.

-Te encontré, te encontré- saltó mientras corría a sus brazos para que Harry lo levantara.

Margarita bajó con la ropa sucia mientras veía a la pareja jugar en el suelo.

Sonrió enternecida por la escena y pasó de largo sin querer interrumpir .

Continuaron girando un rato entre cosquillas y risas mientras Harry no pensaba en otra cosa que no fuera hacer sonreír a Louis.

Harry podía escuchar la preciosa risa del niño todo el dia sin cansarse de su compañía, sin importar cuán diferentes fueran.







































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