Los cálidos rayos de sol se colaron por la ventana, pegando directamente en su cara... Quizás más temprano de lo que un día normal le hubiese gustado despertar, pero hoy no era un día normal...
Una sonrisa escapó de sus labios al recordarlo y aún con los ojos cerrados se removió y se estiró entre las sábanas antes de levantarse, cuando un firme brazo la detuvo.
- Es temprano aún... sigue durmiendo. - Susurró adormecido con voz ronca.
- ¡No puedo!, hay mucho que hacer, el avión sale en unas horas más y aún tengo que ir a mi apartamento a buscar mis maletas y revisar que no se me quede nada, aún tenemos que pasar por la empresa y...
- Rin - La interrumpió antes de que siguiera parloteando, ella lo miró con sus ojos cafés ya muy despiertos -, dejaste todo ordenado hace días, ayer ya revisaste que no se te quedara nada y aún faltan muchas horas para que salga el avión, vuelve a dormir, son las 6 a.m.
- Pero... no podemos perder el avión... - murmuró haciendo un puchero.
- No lo perderemos...
- Está bien... - Se recostó nuevamente y se acurrucó mirando al techo, contando los segundos que pasaban... Se movió para un lado, luego se movió para el otro... - No. No puedo volver a dormir, necesito levantarme.
Estaba ansiosa, ¿cómo no estarlo? hoy volvería a casa, finalmente mañana estaría en casa después de casi 3 años...
- ¡Ahg, está bien! - Respondió él, algo fastidiado - Me despertaste a mi también, eres demasiado inquieta.
- Lo siento... pero es que estoy emocionada, sabes como me pongo cuando estoy emocionada.
- Lo sé - Refunfuñó con el ceño fruncido y luego la besó con ternura en los labios - Anda a bañarte, prepararé el desayuno.
- Gracias amor - Susurró correspondiendo a su beso. Quizás era un poco gruñón, sobre todo cuando interrumpía su sueño porque era un dormilón, pero sabía que él la quería mucho y ella también lo quería a él... - Estoy muy feliz de alcanzar la primavera en Japón, es mi estación favorita, te va a encantar.
- Lo sé Rin, recuerda que yo también soy de allá...
- Es verdad, a veces lo olvido... - soltó una risita - Pero me cuesta creer que no vayas hace más de 15 años, creo que yo moriría.
- He ido varias veces por viajes de negocios por la empresa, sólo no vivo allá hace más de 15 años...
- ¿Y no lo extrañas o a tu familia?
- No tanto como tú, al parecer.
- Lo siento, es que... creo que nunca logré acostumbrarme por completo.
- Está bien, lo entiendo.
Después de bañarse, vestirse y desayunar, fueron a la empresa y luego a su apartamento a buscar sus maletas, mientras Rin daba vueltas y vueltas por el lugar para cerciorarse de que no se le quedara nada atrás. Por un instinto revisó por última vez los cajones de su mesa de noche junto a la cama y casi se le cae el corazón... Estuvo apunto de dejar una de las cosas más importantes que tenía.
- ¿Ves que teníamos que venir con tiempo? Casi lo olvido... Y lo peor fue que lo dejé aquí para no olvidarlo...
- Es sólo un libro, si lo dejabas podías comprarte otro en el aeropuerto...
- No es el libro lo que me preocupa... - Sacó la foto que tenía como marcador de páginas. - Era esto.
- ¿Qué es eso?
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Sempiterno
FanfictionNi uno de los dos imaginó los estragos que causaría ese fugaz encuentro casual, ni que los recuerdos de aquel serían tan difíciles de borrar... Incluso para él, un hombre frío y calculador, que no deja detalles al azar y con su exitoso futuro cuidad...