En un lugar donde la muerte es pan de cada día ¿podría existir algo más duradero? En esta historia como en muchas otras se empieza con eventos inesperados, con pérdidas y llanto, pero existe una tenue luz de esperanza, donde es posible tener un fina...
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Los meses pasaban, Aru y Pietro continuaban con sus deberes y el trabajo con el equipo de exploración, ella dormía poco, pero era bueno, pensaba, entre menos dormía, menos pesadillas había. Los chicos del escuadrón de Hange y Levi la habían aceptado bastante bien, les había enseñado varias técnicas nuevas de batalla, y se había casi completado la estrategia para volver a realizar una exploración fuera de las murallas.
Los titanes habían sido prácticamente exterminados gracias a las guillotinas de titanes y la próxima exploración iba a ser realmente importante. Aru no pudo ir a la exploración, para esos días con la repoblación de la muralla Maria estaba con exceso de trabajo, pero si fue parte de la estrategia de llegada, la creación de mapas, la distribución efectiva de suministros y hasta ayudó a Hange en la creación de prototipos de distintos artefactos.
Una semana antes de la ejecución de la misión de exploración, Aru decidió que sería bueno hacer una pequeña celebración para levantar el ánimo de todos.
— Pixis... ¿Crees que sea bueno hacer una cena para los chicos? — comentó Aru animada cuando se encontraba con el comandante
— Seria genial, sabes que las celebraciones me ponen de buen humor, y si llevamos buen vino será mucho mejor
— Jajaja sabes que no me gusta el vino
— Me encargaré de llevar cerveza también, no te preocupes, avísales a todos — le respondió guiñándole un ojo
— Yo me encargo de los preparativos y tu del licor, les diré que el viernes por la noche tendremos una cena — dijo esto poniendo cara seria como si tuviera una misión importante
Aru estaba realmente emocionada, corrió a contarle a Pietro y entre los dos invitaron a los chicos, cuando ella fue a decirle a Hange, se encontraba con Levi. Abrazó a Hange y les dijo
— ¡Chicos! Me alegra encontrarlos juntos
— Estas mas feliz de lo normal, me molesta — replicó Levi irritado
— Jajaja déjala, pero es cierto, ¿pasa algo? — agregó Hange
— Si, los vengo a invitar a una cena el viernes por la noche
— ¡Eso suena genial!
— Yo no pienso ir — respondió Levi de mala gana
— ¡¡Vamos Levi!! No seas así, recuerdas que una vez te dije que iba a hacer una fiesta para ustedes, bueno, no es una fiesta, pero por algo se empieza, no puedes faltar — le recordó Aru
— ¡Tsk!
— Claro que iremos, yo me encargaré de que Levi nos acompañe — Hange al decir esto señala a Levi con una sonrisa macabra
— Nos vemos el viernes, yo debo atender una situación en Mitras con el comandante Nile, regresare para la cena. No es nada formal, pueden ir con sus uniformes. Apartaré una sala en el restaurante del centro.
Aru soltó a Hange, que en toda la conversación la tuvo abrazada y se fue con la misma alegría con la que llegó. Levi incomodo con la escena solamente le comenta
— Todavía no me acostumbro a su intensidad, contigo era suficiente cuatro ojos
— Jajaja me alegra que se lleven mejor
Había llegado el día de la cena, eran las seis de la tarde y todos empezaron a llegar, al final Hange logro convencer a Levi. Había comida deliciosa por todos lados y por bebidas alcohólicas no había que preocuparse, Aru llego diez minutos después junto con Pietro y empezaron a cenar.
El comandante Pixis los acompañaba, mientras la noche pasaba las risas no faltaron, el licor ya hacía de las suyas y los ánimos se volvieron más alegres, Levi permanecía junto a Pixis hablando sobre la próxima expedición, los demás reían viendo a Jean y a Eren peleando mientras Armin intentaba separarlos, Aru había apostado con Connie para ver cuál de los dos bebía más, pero una hora después él se declaraba derrotado. Ya habían pasado varias horas, pero la cena no parecía que iba a terminar.
Aru se separó del grupo, tomó una botella de licor, vació el contenido en una cantimplora que llevaba y la introdujo en un pequeño bolso que llevaba en la cadera, Levi y el comandante Pixis lo notaron y el segundo le comenta
— Parece que ha decidido irse
— ¿A dónde va?
— No lo sé, supongo que tiene un escondite o algo por el estilo
Aru miro a los chicos, notó que Pietro la miraba y solo le dijo adiós con un ademan, dio media vuelta y se marchó. Levi distinguió que llevaba puesto el equipo de maniobras, al notarlo callado, el comandante Pixis le dijo
— Deberías seguirla, a veces se mete en problemas
Levi miro al comandante, sintió algo en su interior, no supo cómo describirlo, pero lo hizo levantarse
— Búscala en las alturas
Él buscó su equipo de maniobras y se marchó, nadie más lo notó. El comandante continuó tomando su trago con una sonrisa en los labios.
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