Habían pasado dos meses desde el retumbar, Aru había decidido quedarse con Marlo y su esposa, volvió a trabajar en el bar como en los viejos tiempos, no cantaba, pero se encargaba de limpiar las mesas y servir tragos, su personalidad si era más bien la de un pequeño troll malhumorado, siempre atraía las risas de los demás con sus ocurrencias e insultos que inventaba con gran facilidad, ganándose el corazón y el respeto de los clientes rápidamente.
Eran las tres de la madrugada de una noche fría, eran los inicios del invierno y aunque en la ciudad subterránea no llovía si era más fría que allá arriba, ese día se cerró el bar más tarde de lo normal, el frío hacía que el alcohol fuera la única forma de mantenerse caliente. Ella subía las sillas sobre las mesas cuando escuchó que intentaban forzar la entrada del bar – malditos ingenuos – pensó mientras se apresuraba a sacar la escopeta de la barra del bar. Cuando lograron abrir la puerta, el tipo cayó de bruces quedando tumbado en el suelo con la escopeta apuntando su nuca
— Este no es un buen lugar para hacer de las tuyas — dice ella empujando el arma
— Espera, espera, estoy buscando a alguien
— Cuando buscas a alguien no irrumpes a la fuerza
— Busco a Aru Damin, tengo que entregarle algo
— Voltéate
El hombre se volteó lentamente quedando boca arriba como un gato indefenso, ese parche en el ojo ahora era el distintivo de ese hombre que intentó hacerle daño hace algún tiempo
— Lucas Corond... ¿Qué demonios haces aquí?
— Tengo algo para ti
Ella le ayudó a levantarse y se dirigió hacia la barra a devolver la escopeta que había tomado, escuchó pasos que bajaban corriendo y Marlo los apuntaba con otra arma desde las escaleras
— Déjala o te vuelo la cabeza — gritó él enfurecido
— Tranquilo Marlo, es un viejo conocido de la superficie
Marlo bajó el arma y ella le hizo un ademán para que los dejara solos, él indeciso volvió a subir y le dijo a su esposa que todo estaba bien. Aru puso un vaso en la barra y le sirvió un trago del licor más fuerte de la ciudad subterránea
— Toma, la casa invita
— Agghh ¿Qué se supone que es esto?
— Eso es por lo que nunca lograste embriagarme
— Ahora lo entiendo
— ¿Qué puedes tener que me interese?
— Hace unos días llegó una carta con tu nombre
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La vida secreta de Levi (Levi x OC)
Hayran KurguEn un lugar donde la muerte es pan de cada día ¿podría existir algo más duradero? En esta historia como en muchas otras se empieza con eventos inesperados, con pérdidas y llanto, pero existe una tenue luz de esperanza, donde es posible tener un fina...