Capítulo 2. ¡¿Pandilleros?!

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Ya estaba de camino a casa mientras pensaba en cómo comentarle a mis padres lo de Emma. Al final no pude hablar con las chicas respecto a mi plan "Conquistar al peliazul de mis sueños", pero no importa. Tengo tiempo así que buscaré otro momento para hablar con ellas.

Llego a casa y voy directamente a la cocina en busca de alguien en específico.

--Hola, hola, Aiko.-- saludé a la chica que preparaba la cena. Aiko, 25 años, de estatura pequeña, cabello corto y marrón y grandes ojos del mismo color. Es la chica que ayuda a mis padres en la casa, con todas las responsabilidades del club ellos generalmente están ocupados.

--Oh, hola, Rin-chan.-- me saludó con una amplia sonrisa. --¿Cómo estás?, ¿Estabas con las chicas?-- preguntó mientras me pasaba el tarro donde habían colocadeo las galletas que -supongo- había hecho en la mañana.

--Muy bien, Ai, gracias.-- le sonreí. --Y sí, estaba con las chicas donde siempre, ya sabes.-- le guiñé un ojo a lo que ella soltó una pequeña risa. --¿Mamá y papá no han llegado?.

--No, Rin. Pero mira-- señaló el reloj. --Ya no falta mucho para que sean las 7pm, deben llegar pronto.

--Tienes razón, tengo que hablar con ellos.-- le conté mientras tomaba mi bolso nuevamente. --Subiré a mi habitación, nos vemos.

Me despedí y subí las escaleras hacia mi habitación, en el camino toqué la puerta de Tetsuo y me asomé luego de escuchar un -pase-.

--Hola, fea.-- dijo apenas asomé la cabeza.

--Hola, Tetsu.-- dije sonriéndole. --¿Todo bien?.

--Todo bien. ¿Y tú, donde andabas?

--Yo estoy bien. Y estaba con Chi y Hana, donde siempre.

--Ahh, ya veo. Que bueno.--dijo asintiendo. --¿Vas a pasar o qué?-- me preguntó mientras se sentaba en su cama y palmeaba la parte libre frente a él.

Entré en su habitación y dejé mi bolso en la silla de su escritorio para luego ir a su cama y sentarme en el espacio libre que me dejó.

--Tengo que comentarle algo a mamá y papá.-- le dije, saber la opinión de Tetsuo siempre era de ayuda.

--¿Qué cosa?-- preguntó mirándome fijamente.

--¿Recuerdas a mi amiga Emma?.

--Umm...-- guardé silencio mientras Tetsuo buscaba en sus archivos mentales el nombre de Emma. --¿Emma es... la chica que conociste en la cafetería y que sale contigo y tus amigas?

--Así es.-- el pelinegro frente a mi sonrió como si estuviera orgulloso de haber recordado quien era Emma. --Bueno, el punto es que se acerca el cumpleaños de alguien especial para ella y quise ayudarla, así que le ofrecí un piso del club.

Tetsuo levantó las cejas sorprendido. --¿Un piso del club sólo para ellos? ¿Sabes cuánto cuesta eso?.

--Sí... Pero estoy segura de que no serían muchas personas. ¿Crees que papá y mamá acepten ayudar?.

Pareció pensárselo un momento, considerando las opciones que tenía.

--Bueno, mientras no sean muchas personas y no coincida con ninguna fiesta importante, entonces creo que no tendrán problema.-- dijo y atrapó mi nariz con sus dedos para sacudirla, mientras le daba manotazos para que me soltara y él sólo reía.

--¡Ya, suéltame, abusivo!-- dije mientras trataba de soltarme, y me liberó. --Por Dios, si se deforma mi hermosa nariz será completamente tú culpa.-- amenacé mientras me levantaba de la cama y tomaba mi bolso para ir a mi habitación.

Magia de Luna azul | Souta Kawata - Tokyo RevengersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora