Willow.
—¿Eso fue lo que te dijo?
Asentí con la cabeza al tener la boca repleta de castañas. Amber hizo un gesto de completo desagrado por mi respuesta, en cambio, Rose se río a carcajada libre.
—Tendrías que haberlo insultado de nuevo para que te castigara metiéndote la verga en la boca por maleducada.
Eso fue suficiente para que comenzara a atragantarme con lo que momentos antes estaba comiendo. Una tos fuerte me ataco, y termino con Amber alzándome los brazos mientras yo escupía todas las castañas sin tragar.
—¡Rosalie!—reprendió la castaña a mi amiga—. Ya dijimos que no puedes hacer ese tipo de comentarios cuando está comiendo, casi se muere, y justo antes de trabajar.
—Es cierto, tendríamos que buscar un reemplazo rápido, eso sería imposible—bromeó aún sin detener su risa.
Le di una mala mirada entre tanto yo recuperaba la respiración. Ahogarme de esa forma no era una de mis situaciones favoritas para morir.
Llevábamos en mi departamento ya una hora después de salir de la universidad. Durante el transcurso de las clases no pude contarles por completo lo que había sucedido con Wells, solo algo breve de que tenía ganas de asesinarlo con todas mis fuerzas, pero nada en especifico de lo ocurrido en sí.
Me sentía muy abatida, frustrada, y las castañas eran de buena ayuda para aliviar esas feas sensaciones.
—Me alegra saber que mi situación complicada con el profesor Wells es divertido para ustedes—espeté cuando al fin pude hablar correctamente.
—No es tan complicada, solo tuvieron dos discusiones, te dijo idiota, tú imbécil, sientes que hay tensión entre ustedes—enumeró todo lo sucedido con mucha tranquilidad metiendo dos uvas en el proceso—. ¿Sabes cómo se arregla eso?
Negué como si de verdad no conociera la respuesta.
—Debe comenzar a preocuparse más por entregar los trabajos a tiempo.
—Tener sexo con el profesor Wells.
Tanto Amber como Rose respondieron al mismo tiempo, cada una con una respuesta completamente diferente a la otra.
Detuve todos mis movimientos, mi cerebro solo capto y presto atención a la respuesta de Rose, ignorando por completo las palabras, de seguro correctas, de Amber.
Amber no me dio tiempo a responder ya que le dio un fuerte golpe en el hombro a la otra en modo de regaño.
—Dale una respuesta verdadera.
Rose la observó indignada.
—Lo es.
—Una que no perjudique su carrera en la universidad, idiota.
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Insaciable © [+21]
RomanceUn club nocturno. Una bailarina exótica. Un profesor recién llegado a la ciudad de Chicago. Y un baile demasiado excitante para el hombre que creía que iba a ser una noche aburrida. ¿Qué ocurrirá cuando el profesor descubra quien es la bailarina qu...