𝐑𝐄𝐀𝐂𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒 ▹ Min Yoon Gi

▹ 𝒅𝒂𝒅

» Pedido: gigixxxxxx1

» Capítulo narrado por Yoongi.

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Tal vez si no hubiese dejado pasar tanto tiempo, ahora no me encontraría en un lío como este.

No culpo a mi situación, mucho menos la culpo a ella, pero sigo pensando en cómo decirle esto. No sé qué tan bueno o malo sea armar escenarios imaginarios, pero todos terminan mal.

Creo que debería confiar más en ella, pero...

—¿Qué tienes, papá? —su aniñada voz me sacó de mis pensamientos. Le vi con sus mirada llena de confusión y con sus manitas manchadas de color verde.

—Nada, estaba pensando en el trabajo —respondí lo más naturalmente que me fue posible—. ¿Y esa pintura? No pintaste las paredes de tu habitación, ¿o sí?

—No, estaba usando el cuaderno que me regaló el tío Tae —dijo con inocencia mientras frotaba ligeramente su nariz, llenándose de color verde ahí.

—Bueno, pero límpiate para cenar.

Él sólo corrió torpemente a hacer lo que le había dicho, para después sentarse a la mesa y comenzar a comer. Mientras cenábamos, mi mente comenzaba a divagar nuevamente.

No me quejo de mi vida, a pesar de que ha sido complicada, pero, como dije en un principio, no voy a culpar a Junho por la situación. Él para mí es un trozo muy importante de mi vida; nunca lo odié ni me lamenté por haberlo tenido, aunque mi anterior pareja, la madre de él, sí lo hizo.  La responsabilidad era de ambos, pero prefirió irse con las manos limpias, como si nada hubiera pasado para ella. Y, al final de cuentas, eso no estuvo tan mal, porque si hubiéramos seguido juntos estoy seguro de que todo estaría jodido.

Cuando Junho cumplió el año fue que nos quedamos solos, sin embargo, para mi buena suerte, conté con la ayuda de mis amigos para poder criar al pequeño. Porque sí, era tan diestro para cuidar niños como los pingüinos para volar.

Pero el tiempo pasó demasiado rápido y me convertí en, al menos, un padre decente. Todo este tiempo simplemente me preocupé por Junho para que pudiera tener lo mejor y creciera lo más estable posible, incluyendo el aspecto emocional. Sin embargo, me di cuenta de que yo terminé descuidándome emocionalmente.

Y, si no fuera por Junho, no tengo idea de lo que habría pasado. Sólo vivía por él, porque sabía que iba a sufrir si yo me daba por vencido.

Pero, en ese punto de mi vida, fue en donde ella entró.

No tenía idea de dónde venía ni quién era exactamente, pero su forma de comportarse conmigo, la manera en que me hablaba y cómo bromeaba, terminó por traspasar el escudo que siempre ponía entre las demás personas y yo. No fue de forma inmediata, pero como nos veíamos seguido por el trabajo, creo que simplemente terminó enganchándome.

La fui conociendo y supe que ella en realidad tampoco era la persona más extrovertida del mundo, sino que el trabajo la obligaba a serlo. Se agotaba mentalmente con facilidad, pero siempre intentaba tener un buen semblante. Algunas veces estaba muy sensible y hablaba conmigo sobre lo que sentía. Ella realmente no tenía mucho apoyo en casa, así que, de alguna forma, también comencé a tener un sentimiento de querer protegerla. Se convirtió en alguien demasiado importante para mí.