𝐑𝐄𝐀𝐂𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒 ▹ Min Yoon Gi

▹ 𝒃𝒆 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒕

» ⚠️ Este capítulo tratará sobre un tema serio y delicado. No se pretende ofender a nadie, pero me disculpo de antemano si el contenido no fue de tu agrado.

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La sensación de sentirte sucia, culpable y débil, era una sensación que desearías que acabara, pero era algo que quizás nunca terminaría.

Recuerdas escuchar comentarios de tus conocidos, advertencias de tus amigas e incluso noticias en la televisión, pero nunca imaginaste que terminaría pasándote a ti, ¿Por qué? Porque siempre confiaste en que por ser una "niña bien" y nunca ser una chica que hace de las suyas te salvarías; pero no. El abuso no hace excepción.

En el momento en que una persona ajena puso sus manos sobre ti, sentías que el mundo se te derrumbaba. Las ganas de gritar por ayuda te invadían, pero las amenazas te callaban. ¿Cuándo fue que comenzó este infierno? No hace mucho realmente.

Tu vida era normal, atareada pero feliz, siendo novia de un chico bastante ocupado. Esa persona, tu pareja, siempre ha sido alguien que admiras y amas bastante; eres capaz de hacer cualquier cosa para que él esté bien. Conoces que la carrera de tu novio es algo primordial para su vida, por eso tu relación con él no ha salido a la luz. La empresa cree que sería caótico ver en las noticias "Suga, de la banda BTS, revela su relación" o cosas así por el estilo.

Y bueno, tal vez sí podría llegar a ocasionar algunos inconvenientes, por eso, tanto tú como tu pareja prefieren esperar y tomarse las cosas con calma. Siempre actúan precavidos, solamente se dan muestras de afecto cuando están en casa o cuando están con los demás chicos del grupo, que ya son personas de confianza. Respecto al staff, también tomaban sus precauciones, ya que no querían que alguien pudiera filtrar información y tuvieran pruebas, como alguna fotografía de ustedes besándose o cosas así.

En realidad, todo iba bien, todo estaba tan perfecto, pero algo tenía que arruinarlo, comenzando con algo que tú creías que había sido un accidente.

Un día, después de tener una grabación, los chicos estaban quitándose sus atuendos con ayuda del staff. Tú estabas recargada en una pared esperando a Yoongi mientras usabas tu celular. En un momento levantaste tu mirada y la dirigiste a tu novio, él te sonrió y te hizo una seña para que te acercaras. Caminaste hacia él.

—Linda, ayúdame con las lentillas, ¿Si?—Dijo sentado en su silla. Sonreíste y te inclinaste un poco para sacar los lentes de sus ojos. Estabas tan concentrada para no lastimar a Yoongi, pero una incómoda sensación te hizo sobresaltar. Volteaste hacia atrás, pero no había nadie.
—¿Qué tienes?

—Ah... No, nada—Respondiste. Esa incómoda sensación que habías tenido de que te tocaban el trasero, supusiste que había sido un descuido de alguien; pero en realidad era el inicio de todo.

Cada que acompañabas a Yoongi a la empresa, comenzaste a sentirte observada, como si alguien estuviera esperando el momento exacto para devorarte. Pronto comenzaste a notar que alguien te tocaba repetidas veces, pero sin dejar rastro de quién era, como si sólo estuviera conociendo a su presa.

Cuando por fin lo descubriste, su cara sonriente te hizo sentir escalofríos, pero también coraje, así que decidiste enfrentarlo tú misma, sola y por tu propia cuenta, siendo este, tu mayor error.

—¿Por qué demonios te la pasas manoseándome?—Le reclamabas enojada.—Sabes que te puedo demandar, ¿Verdad?

Él comenzó a reír con descaro, y claro, tú habías sido tan ingenua al creer que enfrentarlo así lo detendría.

—Tú no puedes hacer nada—Se acercaba a ti—Y no abrirás la boca, ¿Me oyes?

—¿Y por qué? No te tengo miedo—Respondiste, haciendo que él volviera a burlarse de ti.

—¿Acaso quieres que el imbécil de tu novio salga afectado?—Preguntó amenazante—Si tú hablas, yo también hablo—En ese instante sacó fotografías de Yoongi estando contigo y haciendo cosas de pareja. Sólo tragaste saliva—Si quieres que él esté bien, entonces cállate.

Ese tipo estaba tocando tu punto débil de una forma tan cruel, que terminaste cediendo.

Ese mismo día, encerrados en uno de los baños, tu pesadilla comenzó. Sentir sus manos por debajo de tu ropa era tan desagradable, pero debías abstenerte de gritar. Lo único que te había aliviado, era que no había pasado a mayores.

Así fueron los demás días que acompañabas a Suga. Ese tipo se encerraba contigo y tocaba tu cuerpo, sintiéndose satisfecho por tus reacciones. Tú gritabas internamente llamando a Yoongi, pero él estaba tan confiado de que estabas segura, que no sentía la necesitad de preocuparse por ti estando dentro de la empresa.

Pasaron los días y ya habías llegado al límite. Comenzaste a negarte cuando Yoongi te pedía que lo acompañaras y también evitabas hablar sobre la agencia.

—Cariño, ¿Qué te pasa? ¿Ni siquiera irás por el cumpleaños de Namjoon?—Preguntó mirándote—No sé qué es lo que tienes y tampoco me dices nada. Me niegas todo, ya no puedo ni tocarte. ¿Qué hice? ¿Te lastimé? ¿O acaso ya no me quieres? ¿Tienes a otro? ¡Dime algo, mierda!

Tú no podías siquiera mirarlo. Sentías tanto asco por ti misma que, en efecto, no dejabas que Yoongi te tocara o te diera cariño, mucho menos tenían intimidad.

—P-perdón, sólo he estado un poco mal... Iré contigo—Fue lo único que dijiste.

Al llegar a la empresa, inmediatamente lo viste, a tu mayor pesadilla. Como siempre, él te sonreía gentilmente, esperándote para que tú le dieras placer.

Tú sólo intentabas esconderte detrás de tu novio y evitabas separarte de su lado. Pero el depredador siempre consigue a su presa, y de alguna forma, terminaste sola y claro, en manos de esa asquerosa persona.

—Tantos días sin verte, hermosa—Susurraba mientras te acariciaba—¿Por qué desapareciste? ¿Hice algo que no te gustara?—Preguntó con burla.

—Detente...—Pediste.

—Eres tan bonita como para desperdiciarte, así que no, no voy a detenerme—Decía—Si quieres que tu novio esté bien, sólo cállate.

Fueron segundos los que pasaron para que ese tipo estuviera en el suelo y con una pálida persona encima golpeándolo. Tú arreglaste tu ropa y retrocediste llena de miedo.

—¡Maldito! ¡Voy a matarte!—Gritaba Yoongi mientras lo golpeaba. No tardaron en llegar más personas que terminaron quitando a tu novio de encima, si no, de verdad terminaría matándolo—¡Voy a hundirte en la cárcel, imbécil!—Gritaba alterado. Namjoon y Hoseok tuvieron que sostenerlo con fuerza hasta que llegó la policía.

Cuando tu novio se tranquilizó, cayó en cuenta del error que había cometido. Se confió demás y no vio el peligro en el que te encontrabas, incluso fue capaz de imaginarse que tú lo estabas engañando. Precisamente por eso te había seguido, pero terminó descubriendo lo que sufrías por protegerlo a él.

—Perdón...—Dijiste con tu débil voz. Eso hizo que él se sintiera peor.

—No, cariño, yo soy el idiota que tiene que disculparse contigo. Te dejé sola y dudé de ti, pero eso no volverá a suceder, te lo juro—Susurró mientras te abrazaba.

Por un momento, Yoongi se despegó de ti, y fue hacia donde tenían al tipo; éste estaba esposado y en el suelo.

—Espero que te mueras en prisión, porque si no, te mataré yo mismo, recuérdalo.