~𝟏𝟏~

7K 785 63
                                    

Después de recibir la llamada inesperada, Satoru estaba en uno de los banquillos del parque a la espera de Suguru, se comunicó con su mejor amigo, para que lo fuera a recoger, el parque se había convertido en el punto de encuentro,

Mientras Suguru se tomaba su tiempo en llegar, aunque había algo que llamó su atención ese día no le quiso dar mucha vuelta al tema, además Satoru no dejaba de pensar ¿De que quiera hablar el hermano mayor de Yuuji?, Era lo que rondaba por su cabeza en ese momento. De algún modo se sentía aliviado, pues Choso ese día, no se mostró receloso al acercamiento que tenía al pequeño, fue todo lo contrario a sus otros tres hermanos.

Solo tal vez, hablarían de lo que puede y lo que no puede hacer, reflexionó.

Al Joven alfa no le fue difícil saber, que este hermano mayor actuaba más como un padre sobre protector, que un hermano celoso.

—¿Será qué? ya me están aceptando en el núcleo familiar— le habló a la nada y una sonrisa de medio lado se dibujó — Sí, sí debe ser eso.

Si ese era el caso, tenía que tomar muy en serio lo que le dijo al viejo Wasuke y Choso al final de la noche, no podía decaer nuevamente en su instinto animal, sino que tenía por seguro, que no iba a volver a tener una nueva oportunidad.

—¿A ti? ¿Cómo un familiar? —Alguien lo interrumpió —Eso lo tengo que ver.

— Suguru — Satoru lo miró con las cejas fruncidas, ahora era natural que el pelinegro se burlaba de él, sin importar el momento.

El joven suspiró y se levantó con pesadez, miró a su amigo y después desvió la mirada a un punto donde se encontraba un árbol que tenía una apariencia chueca, se volteó para empezar a andar y escondió sus manos en los bolsillos de su pantalón —me hubieras avisado.

— Me estaba asegurando que no estuviera perdido en tu mundo fantasía — levantó los hombros —La única forma de sacarte de ese trance, es tocándote la cara.

— Eh, claro — Satoru junto sus labios haciendo una especie de puchero — Solo fue esa vez.

— Nunca se sabe cuando vuelvas a caer.

Satoru suspiro de mala gana ante el comentario.

El «Me voy a controlar» volvió a él.

Suguru sin saber, había herido el orgullo del joven alfa.

—¡Vamos! Necesito preguntarte algo.

Se repetía lo mismo, el camino a la mansión, fue relativamente tranquilo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Se repetía lo mismo, el camino a la mansión, fue relativamente tranquilo. Geto empezó a sudar frío, todo se le hizo muy familiar.

Miro por el espejo retrovisor para ver a Satoru, a diferencia de aquella vez, cuando lo encontró pedido e intentaba esconderse en la esquina del automóvil para que no viera el debate interno que tenía esa vez. En esta ocasión era un poco diferente, su postura firme, con una pierna cruzada mientras afincaba parte de su cara en la palma de su mano, dejando parte de su peso en la puerta mientras miraba a través de la ventana del auto, daba a entender que estaba relajado.

𝓵𝓪𝔃𝓸 [Goyuu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora