𝓵𝓪𝔃𝓸 [Goyuu]

~𝟐8~

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Al entrar Gojo parecía un niño regañado, su semblante era completamente decaído y con la mirada completamente baja, con sus inusuales ojos de diamante analiza el lugar de manera veloz en búsqueda de algún salva vida y se topa con Nanami y Shoko sentados en el comedor. Satoru intenta ignorar su entorno para dirigirse de manera veloz hacia el rubio, pero el fuerte carraspeo de garganta del viejo Wasuke detiene su andar.

El albino se detiene y se voltea a ver al anciano.

Wasuke se le dibuja una sonrisa en la cara, lo que pone más nerviosos a Satoru, en su raciocinio, Gojo intenta indagar a ver si había hecho algo que alterara al alfa mayor, pero en sus memorias no recuerda haber hecho algo estúpido.

—¿Su-sucedió algo? — pregunta con cautela el joven alfa.

—Los invitados pueden esperar en la sala — el mayor seguía con la sonrisa en la cara a la vez, Wasuke desvió su mirada del joven y ve a Nanami y a Shoko por un momento, dándole una indicación silenciosa a Satoru y que debía hacer.

El semblante de Gojo cae más y se voltea a ver a Nanami y a Shoko, pero algo más atrae su atención, a la espalda de ambos, en la cocina se encontraba Esou, mirando al joven a la vez le guiña un ojo y esbozando una sonrisa pícara a Satoru.

Un sudor frío empieza a recorrerle la espalda del albino, de verdad que prefiere ser sofocado por el viejo mayor que estar cerca del hermano raro de Yuuji.

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***

Nuevamente en la sala, Gojo estaba junto a Nanami y Shoko sentados en el sofá de gran tamaño, mientras que los hermanos de Yuuji se encontraban del otro lado repartidos en la pequeña sala.

Los trillizos estaban en uno de los muebles individuales, dos de ellos estaban en ambos pasamanos y el que sobraba estaba sentado decentemente en el medio sentado, cuchicheaban entre ellos.

Nouranso se mantuvo en el otro mueble individual usando su celular y le mostraba algo a Shooso y Tanso quienes estaban a su espalda.

Kechizu se encontraba más al fondo, apoyado en la pared viendo de mala gana al albino,el resentimiento hacia Satoru había crecido más, ya que Yuuji todavía no quería dirigirle la palabra, por otra parte Choso se mantuvo sentado en las escaleras.

Wasuke había traído una de la silla del comedor a la sala, la había ubicado a un lado de los muebles individuales, Wasuke se encontraba algo sereno, estaba con las piernas y brazos cruzados a la espera de Esou, el cual estaba en la cocina preparando algo.

El primero en llamar la atención fue Gojo, el cual por fin empezó hablar

—G-Gojo Satoru — el albino se había levantado del sofá y estaba haciendo una reverencia a la vez que revelaba su identidad.

La incredulidad empieza a pasar por la cara de Nouranso, Shooso y Tanso , pero el asombro fue sobresaliente para Kechizu, un sonido fuerte se escuchó por donde él se encontraba, uno de los trillizos se voltea al escuchar el golpe tan sonoro y lo que ve es a su hermano tirado literalmente en el suelo desmayado por tal dato tan revelador .

—¡Hermano Kechizu!— Sanso sale a socorrerlo.

Shoso y Kosso, suponían algo.

—Vaya, sabíamos que era alguien con dinero por la ropa de marca que vestía— habla Shoso— pero no creí que fuera un magnate.

Kosso genera un silbido por el asombro.

—Yuuji sí que va a mejorar la raza. — Kosso habla sin escrúpulos.