𝓵𝓪𝔃𝓸 [Goyuu]

~𝟏5~

Fue al minimercado de manera espontánea sin dar se cuenta de su error, se encontraba pensativo y a la vez furioso, si Toji que era ajeno a todo lo que estaba pasando se dio cuenta de las feromonas de Yuuji, era más que obvio que todas las personas que se encontraban a su alrededor mientras iba a su encuentro al minimercado también se dieron cuenta de las feromonas del pequeño.

Satoru detuvo su andar para ver el cielo, el resplandor del sol lo tenía deslumbrado, pequeñas lágrimas salieron de sus ojos, era molesto como la luz natural penetraba en su iris, pero era el castigo que se había implementado por su estúpido comportamiento despreocupado, suspiro pesadamente, ya se había regañado con anterioridad y se dijo que fuera precavido, pero al parecer todavía no había asimilado de todo lo que estaba ocurriendo y no lo iba a negar que se sentía muy cómodo además de orgulloso el tener el olor del pequeño en él.

Su alfa se quejó y le impidió por un momento el uso del difusor de feromonas, le resultaba asqueroso el producto.

¿Cómo era posible que hicieras tal cosa? Se quejaba su alfa

Apretó fuertemente el maldito producto tipo spray que tenía escondido en el bolsillo del pantalón, ahora debía de usar este tipo de infame artículo de tienda, en su interior era como se intentara ocultar la existencia de su pequeño omega.

— ¡Maldita sea! — Era claro lo irritado que estaba.

Su alfa estaba loco en volver con el pequeño omega, en ese momento necesita más que nada estar cerca del pequeño y explicarle el motivo del empleo del difusor, aunque era su instinto que le decía que debía justificar el motivo del porqué no estaban las feromonas de Yuuji en él. Su parte racional sabía que el pequeño todavía no era lo suficientemente maduro para entender todo lo que su parte animal intentaba explicar.

¿Cómo podía calmar a su alfa de no hacer una locura cuando viera a Yuuji? Era el debate que tenía en ese momento. Mientras pensaba seriamente que debía hacer, una persona ajena a sus pensamientos se tropezó con él, golpeando su hombro izquierdo, el sonido de la bolsa que llevaba lo hizo volver, se volteó a ver a la persona, esta se tambaleaba de un lado a otro, no había duda que estaba borracho y desorientado. Perdió rápidamente el interés del ebrio y dirigió su mirada hacia la bolsa. Se había traído dos pudines de la tienda para degustar, uno era de fresa y el otro de vainilla, con pesadez agarro el de vainilla y lo destapo para comérselo. Tal vez el dulce lo podía ayudar a bajar un poco sus ansias, este era la manera en que el joven alfa mantenía a raya su estrés y obligación, al momento cuando llevó la pequeña paleta a su boca, una idea llegó a él.

¿Qué tal si le llevaba el otro pudin a su pequeño omega? Le gustaba la idea de darle de comer el rico postre a Yuuji. Se lo imagino degustando maravillado el sabor de las fresas, su alfa se agitó un poco, estaba de acuerdo con la idea, además estaba el hecho de que ese día iban a salir a comer helado, estas ideas calmaron a su afanoso alfa.

Choso había dejado que su pequeño hermano se encargará de terminar el rompecabezas, mientras que él atendía los suministros que debía de pedir para el bar, El hermano mayor acompañaba a Yuuji en la sala, este se había sentado con una pierna cruzada en los muebles individuales, en una mano tenía una pequeña libreta donde había una lista, mientras que veía los precios y comprobará gastos en su celular.