42

633 102 67
                                    

Jongho entró a su habitación con la duda de a dónde querría llevarlo Yunho, sin embargo, dejó de pensar en eso enseguida al ver a Seonghwa sentado sobre la cama de Hongjoong, dándole la espalda.

Cerró suavemente la puerta, cuidándose de no hacer ruido. Se fue acercando lentamente. El mayor sólo estaba sentado, quieto, con la almohada del Kim entre sus brazos. Jongho alzó una ceja. ¿Qué demonios querría él ahora?

—¿Qué haces aquí? —le preguntó cuando estuvo a unos pasos. Seonghwa pegó un brinco y se alejó instintivamente de él, a la vez que soltaba la almohada.

—Jongho... —contestó—. No te sentí entrar.

—No tengo por qué anunciar cuando entro a esta habitación. Sin embargo, tú sí...

—Quería hablar contigo —juntó aplomo de repente—. Y es una charla seria.

el Choi alzó de nuevo su ceja.

—¿Qué podrías querer tú conmigo? Yo no soy rubio, delgado y no me llamo Hongjoong. ¿No crees que te confundiste?

Seonghwa decidió ignorar el comentario irónico del menor y se acomodó cruzando los pies sobre la cama.

——Siéntate —le pidió, señalando la superficie frente a él—. Y sé perfectamente que no eres Hongjoong. Es contigo con quien quiero hablar.

Jongho se dejó caer sobre la cama de mala gana. Hace un minuto había estado de muy buen humor pero, por alguna razón, le daba la sensación de que Seonghwa estaba a punto de arruinar eso.

—Ya sé que eres un híbrido.

¿Por qué carajo tenía que tener razón en momentos como ese?

Le dedicó una mirada amenazante a Seonghwa. Notó como el humano pasaba saliva. A pesar del aplomo, estaba nervioso, y él estaba más que dispuesto a aprovechar eso.

—¿Y? ¿Qué planeas hacer con eso?

—Sé que no quieres que Yunho se entere —Jongho sabía que estaba tratando de ponerlo nervioso a él también, pero eso iba a ser imposible. Seonghwa no transmitía la más mínima intimidación. Jongho había enfrentado a un montón de alfas a los cuales el Park no les llegaba ni a la suela. Si quería ponerlo nervioso, iba a tener que ponerle un poco más de ánimo.

—Si se lo quisieras contar estarías con él, no aquí, hablando conmigo —se rascó el cabello, impaciente—. Así que dime qué quieres de una buena vez.

—Hongjoong —contestó Seonghwa.

—¿Qué hay con Hongjoong? Creo que ya quedó claro que no hay nada entre él y yo.

—Lo sé. Precisamente por eso.

—No te estoy entendiendo.

—Ayúdame a conseguirlo.

—¿Qué? —esta vez sí que no pudo evitar sorprenderse—. ¿Estás loco? Hong... Hongjoong no.

—Sé que Hongjoong es un híbrido. Y no me importa. Me gusta. Tienes que ayudarme.

—No, no tengo que hacerlo.

—Se lo contaré a Yunho si no me ayudas —se puso de pie de un brinco—. ¡Puedo ir ahora mismo! —intentó salir de la habitación pero Jongho lo detuvo y de un tirón lo sentó de nuevo sobre la cama.

—¡Cálmate! ¿Quieres? —soltó aire, irritado—. No sabes lo que estás diciendo. Hongjoong no te gusta, sólo es un enamoramiento pasajero.

—No puedes decirme eso cuando eres tú el que deja que Yunho le meta la lengua hasta la tráquea.

No Pets Allowed! | 2HoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora