Oscura tentación (Benedict Cumberbatch y Tú)

Café

Pasaron dos meses desde la cena con Benedict, ahora ya podíamos tutearnos fuera de la empresa.

Era un día horrible, tenía un montón de papeleo por hacer pero podía hacerlo sin problemas. Cuando estaba acabando un documento pronto Benedict me mandaba hacer otra tarea, parecía que le gustaba verme un poco alterada por las circunstancias.
Fui a buscarle un café, ya que me lo había ordenado y en la máquina me encontré con Sophie que era como si fuese la mano derecha de Cumberbatch. Odiaba a esa mujer con toda mi alma, era una estirada, se creía superior a todo el mundo solo porque Benedict le contaba muchas cosas y eso a mi me reventaba. Por supuesto el odio era mutuo, ya que ella no soportaba que el señor Cumberbatch me llamase a todas horas y de vez en cuando me diese algún pequeño obsequio por mi trabajo.
-Vaya- dijo ella -me sorprende que aún sigas trabajando aquí, la última secretaria no duró más de un mes-
-Tranquila- dije sonriendo falsamente -puedo soportar un largo periodo de tiempo en estas condiciones-
-Ya lo veremos- dijo con una sonrisa falsa.

De pronto una voz nos sorprendió desde nuestras espaldas.
-¿Algún problema señoritas?- dijo Benedict con tono serio.
-No- dijimos a la vez.
-Bueno si- dije yo -Sophie aún no termina de sacarse su café, por eso me he retrasado-
-Lo siento mucho linda- dijo ella agarrando su café con una sonrisa fingida.
-Sophie- dijo Benedict serio -no retrase a la señorita (T/Apellido)_____-
-Lo siento Señor Cumberbatch- dijo ella -si me disculpan debo irme, tengo que preparar la presentación de mañana-
-Ojalá te salga muy bien- dije falsamente.
-Gracias- dijo ella antes de seguir su camino.

Saqué el café de la máquina y lo preparé al gusto del señor Cumberbatch, me giré y se lo dí.
-Tenga- dije con una leve sonrisa -justo como le gusta-
-Gracias- dijo dandole un sorbo para luego mostrar una sonrisa ladeada -mucho mejor que el que me hacían antes-
-Gracias- dije poniendo mis manos en la espalda.
-Y por cierto- dijo él soplando un poco el vaso -se nota que Sophie y usted no se llevan muy bien, no finjan ante mí-
-Lo siento- dije mirando al suelo.
-No pasa nada- dijo él acompañándome al escritorio.

Coloqué algunos documentos mientras conversaba sobre la reunión de mañana con Benedict cuando Mike salió del ascensor con unas bolsas.
-Hola (T/N)_____- dijo Mike sonriendo antes de abrazarme y besar mi mejilla.
-¿Qué haces aquí?- dije riendo a pesar de que Benedict fulminaba con la mirada de forma sutil a Mike.
-Kate me dijo que te habías dejado el almuerzo en casa- dijo -por eso decidí traértelo, aunque te incorporado una cosa-
-¿el qué?- dije sacando de la bolsa un taper de galletas con forma de corazón con mermelada de fresa y moras -Ohhhh como te acuerdas de mí-
-Las hice esta mañana solo para ti- dijo sonrojado.
-Muchas gracias- dije dandole un abrazo y besando su mejilla -te veré mañana a las nueve para salir de fiesta con los demás-
-De acuerdo princesa- dijo antes de irse.

Dejé los tapers en una mesa vi que el señor Cumberbatch tenía la mandíbula apretada con un gesto de molestia ¿Estaría celoso de que Mike me hubiese visitado de aquella forma?.
De pronto sus ojos examinaron de nuevo toda mi figura, parecía que me quería comer con los ojos.
-No me gusta las compañías que tiene señorita (T/Apellido)______- dijo serio -y menos que la visiten en el trabajo-
-Es mi mejor amigo- dije seria -solo ha tenido el detalle de traerme mi almuerzo, eso es todo-
-No quiero que se distraiga- dijo acercándose a mí -sino no hará las tareas tan bien como hasta ahora y tendré que... castigarla-
-¿A si?- dije seria mientras notaba sus manos rodeando mi cintura, lo que hizo que mi pulso se acelerase -usted no puede decir con quien debo o no debo hablar-
-Me parece que tienes que mejorar tus modales jovencita- dijo pegándome aún más a él haciendo que nuestras narices se tocasen -y créeme que yo sé como enseñártelos-

Sus manos me pegaron a el con violencia, lo que me hizo excitarme bastante mientras apretaba mi cintura. Sus ojos reflejaban una lujuria extremadamente intensa, su pulso estaba acelerado al igual que el mío y notaba su cálido aliento sobre mis labios.
Nuestros labios casi se rozaban cuando una voz hizo que nos separásemos.
-Benedict- dijo Sophie dirigiéndose hacia nosotros -debo enseñarte la presentación-
-Claro- dijo el colocándose la corbata -Pasa a mi despacho-
-Por supuesto- dijo Sophie para luego mirarme con superioridad y entrar.
-Ya continuaremos esta conversación en otro momento señorita (T/Apellido)______- dijo él con una sonrisa ladeada -tengo otros asuntos importantes que atender. ¿Un café después?-
-Está bien- dije colocándome de nuevo la camisa.

Al poco tiempo el señor Grey abandonó el despacho y fuimos a hacer una sesión de fotos que le haría Mike en un hotel.
Verle posar ante aquella cámara me hizo sentirme algo más intimidada por él.
-Gracias por ofrecerse señor Cumberbatch- dijo Kate sonriendo a mi lado.
-Es un placer ayudar- dijo Benedict mientras Mike tomaba fotos.
-Amm- dijo Mike- ¿Que le parece si hacemos algunas sonriendo?-

Benedict se mantuvo serio durante toda la sesión y de vez en cuando me miraba, sus ojos me petrificaban pero no me importaba.
-No te quita la vista de encima- dijo Kate en un susurro.
-Luego iré a tomarme un café con él- le respondí susurrando y ella se rió -Kate Shh-

Terminamos la sesión de fotos y fuimos a una cafetería cercana donde el señor Cumberbatch me invitó a un café.
Sus ojos me examinaban mientras yo daba leves toquecitos en mi taza.
-Parece nerviosa- dijo él.
-Es que- dije suspirando -me resulta algo intimidante a veces-
-Lógico- dijo mientras le quitaba el papel a un muffin de chocolate -coma-
-Y algo prepotente- dije sonriendo levemente.
-ME acostumbro a salirme con la mía- dijo con la sonrisa ladeada.
-Debe de aburrirse mucho entonces- dije dando un sorbo a mi café.
-Háblame de tu familia- dijo el dando un sorbo a su café sin apartar la vista de mi-
-Pues...- dije tomando aire -mi madre nos abandonó cuando yo tenía 5 años, desde entonces fue mi padre el que me crió aunque esta es la cuarta novia que tiene ya, es todo un romántico-
-¿Y tú?- dijo él mostrando interés en la conversación -¿Te consideras una mujer romántica?-
-Si- dije encogiendo los hombros -no lo sé ciertamente-

Sus ojos comenzaron a ir de un lado para otro, parecía haberse puesto nervioso.
Se levantó y nos fuimos de la cafetería después de pagar.
-¿Qué ocurre?- dije caminando a su lado -¿He dicho algo malo?-
-No no es eso- dijo mirando al frente.
-¿Entonces qué?- dije poniéndome frente a él.
-¡Cuidado!- dijo pegándome a él evitando que un coche me atropellase.

Nuestras miradas se cruzaron, mi pulso se aceleró al perderme en sus maravillosos ojos.
Su mano subió a mi mejilla y la acarició con mucha suavidad.
-No soy un hombre para ti- dijo serio aunque algo de tristeza brillaba en sus ojos -deberías alejarte de mí. Debo... dejarte ir-
-Pues- dije suspirando -adiós señor Cumberbatch-

Me alejé y puse rumbo a mi casa dejando atrás al hombre más perfecto que ha pisado la faz de la tierra.