"Underdog:
Asistí a tu fiesta, claro que eso ya lo notaste porque sería muy raro que encontraras esta carta y no hubiera asistido, alto miedo.
Bueno, sólo quería decirte que asistí para distraerme de todos los problemas que había tenido para poder pasar los exámenes, especialmente con matemáticas que no me terminan de entrar en la cabeza. Aunque tú siempre me inspiras a intentar ser una mejor persona, siempre estoy estudiando y esforzándome por ser mejor en todo.
Tal vez sea estúpido decir que el sólo hecho de que existas me hace tan feliz, a veces me he encontrado llorando en medio de la noche por todo lo que te amo, me pongo a pensar en todo lo que me has enseñado sin proponértelo y en todo lo feliz que me has hecho con sonreír, con reír, con hablar, con todo lo que en conjunto tú formas.
Jamás pensé sentirme así por alguien, y te seré sincero, tampoco lo pensaría de alguien como tú, pero no sé qué me hiciste que ahora mismo me encuentro amándote demasiado y no me puedo imaginar de otra forma.
KJE".
Y ahí estaba Joaquín Goodman un domingo a las nueve de la mañana, suspirando como un idiota enamorado por la carta que le dejó su admirador secreto en su habitación, ya la había leído más de cuatro veces y simplemente no podía superarla, no podía dejar de pensar en su admirador secreto y en el hecho de que habían estado en el mismo espacio durante dos horas completas.
Su madre ya lo había llamado a desayunar hace tiempo, pero él no se podía sacar la carta de la cabeza, así que decidió asistir al desayuno con la carta en la mano para seguir leyéndola mientras desayunaba, su padre lo vio con curiosidad al verlo pasar con la carta porque ya lo había visto con anterioridad salir al baño con la carta en la mano.
—Oh, ¿Ya leíste lo que te dejó tu admirador? — preguntó su madre aun revolviendo un par de cosas en la nevera mientras en la estufa se calentaba un huevo frito.
—Sí, me escribió cosas tan. . . un momento, ¿Tú cómo sabes que mi admirador me dejó algo? —Joaquín se sentó para comer al lado de su padre y hasta él volteó a mirar a su esposa confundido, aunque Joaquín estaba entrecerrando los ojos para reflejar su sospecha. Su madre continúo buscando cosas en la nevera sin parecer afectada por el tono de Joaquín.
—Oh, porque lo vi— al fin sacó la nariz de la nevera y Joaquín abrió la boca y los ojos tan grandes que parecía una bola de boliche, de hecho, no fue el único cuando volteó a ver a su padre y lucía exactamente igual.
—¿¡Cómo, mamá!? ¿¡Tú lo viste y no me dijiste!?— su madre se sobresaltó porque no se esperaba esa reacción de parte de su hijo, Joaquín se arrepintió dos nanosegundos después de haberle gritado a su madre—. Lo siento, no quería hacerlo, me alteré, ¡Pero dime! ¿¡Cómo era!?
—De acuerdo, era alto— su madre se colocó una mano en la barbilla en modo pensativo luego de dejarle pasar su momento agresivo—. Más alto que tú y una combinación de ojos entre marrón y verde . . .
-¿Ojos marrón con verde?- en ese momento Joaquín sí que alucinó, porque no se esperaba que su admirador tuviera los ojos así, hasta su padre se sorprendió.
-Oh, sí, muy guapo, por cierto— su madre le sonrió y le guiñó un ojo, haciendo que Joaquín sonriera también y se sonrojara. No se esperaba que su madre encontrara a su admirador guapo, pero era mejor eso a que no lo aceptara porque a Joaquín estaba comenzando a gustarle—. Aunque entró en pánico cuando me vio, pero le prometí no decirte nada, de hecho ya te dije demasiado a pesar de que básicamente no dije mucho. No tengo ni idea de quién es él y, por tu cara, deduzco que tú tampoco.
—No, ni idea— Joaquín suspiró, era verdad que no tenía ni idea de quién podría ser, había muchas personas que podrían entrar en esa descripción. Entonces Joaquín tuvo una idea—. Oh, mamá, ¿De qué color era su cabello?
-Estaba oscuro, no pude ver bien— ahí sí que se desinfló totalmente, su madre comenzó a servir el desayuno y su padre continúo leyendo el periódico, esta vez sin prestar mucha atención porque siempre era así, tenía un periódico enfrente y se olvidaba de todo. —pero estoy segura de que tenía el cabello algo oscuro, tal vez café, ¿Eso te sirve, corazón?
-Um, sí, eso creo— murmuró Joaquín pinchando su huevo con un tenedor siendo muy consciente de que a su madre no le gustaba que pinchara su comida, según ella, pinchar la comida era un tipo de violencia.
Repasó en su mente todas las personas que pudieran entrar en las características que dijo su madre, conocía a varios chicos con el cabello café, pero tenían los ojos de color o uno igual al de su cabello, casi no había chicos con los ojos así y, obviamente, Joaquín se frustró de no encontrar mentalmente a nadie que pudiera encajar en lo que su madre había dicho, ¿Qué tan difícil era encontrar a alguien con el cabello así y de ojos marrón con verde? Aparentemente lo era demasiado.
Y no ayudó decirles a sus amigos, Buffy se encontró aliviada por algo que Joaquín no supo entender, Amber y Renata estaban inconformes con tener esa nueva información y a Andrés no pareció importarle su color de cabello u ojos, él sólo dijo que había que empezar a buscar señales en las personas que se parecieran a lo que dijo su madre que era ese chico. Aunque no había realmente nadie que pareciera tener un crush en Joaquín, nadie encajaba y si lo hacían no parecía que quisieran a Joaquín.
Estaba frustrado, sí, en un principio no quería presionarlo para saber quién era, pero ahora que sabía que su madre lo había visto, se sentía ansioso por saber la identidad de su admirador no tan secreto. Siguió preguntándole a su madre por su admirador no tan secreto, pero ella no sabía cómo describir que era, tenía la cara en la mente, pero no podía descubrirla, así que Joaquín tomó fotos de todos los posibles candidatos y se las mostró a su madre para que ella deliberara sí era o no era.
En todas las veces le dijo que no era, y luego pareció recordar que le había prometido algo al chico que era su admirador secreto, así que a partir de la quinta foto mostrada su madre se negó a decirle nuevamente si alguno era, Joaquín se las mostraba, pero ella decía "No sé, ya no me acuerdo" aunque en días anteriores había afirmado que recordaba perfectamente su rostro. Así que, aunque Joaquín la dejaba en paz con el tema, sabía que ella estaba protegiendo el secreto de su admirador porque lo prometió.
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٭𝚄𝚗𝚍𝚎𝚛𝚍𝚘𝚐 || 𝙴𝚖𝚒𝚕𝚒𝚊𝚌𝚘 ° ٭⊹
Novela Juvenil↬𝕁𝕠𝕒𝕢𝕦𝕚𝕟 𝕖𝕤 𝕖𝕝 𝕥í𝕡𝕚𝕔𝕠 𝕔𝕙𝕚𝕔𝕠 𝕢𝕦𝕖 𝕥𝕠𝕕𝕠 𝕖𝕝 𝕞𝕦𝕟𝕕𝕠 𝕖𝕟 𝕖𝕝 𝕔𝕠𝕝𝕖𝕘𝕚𝕠 𝕒𝕕𝕠𝕣𝕒, 𝕝𝕒 𝕞𝕒𝕪𝕠𝕣í𝕒 𝕕𝕚𝕔𝕖 𝕖𝕤𝕥𝕒𝕣 𝕖𝕟𝕒𝕞𝕠𝕣𝕒𝕕𝕠 𝕕𝕖 é𝕝 𝕠 𝕕𝕖 𝕒𝕝𝕘𝕦𝕟𝕒 𝕔𝕦𝕒𝕝𝕚𝕕𝕒𝕕 𝕢𝕦𝕖 𝕡𝕠𝕤𝕖𝕖. 𝔼𝕩𝕔�...