Ojos sobre mí.
Salir de ese sitio fue un total dolor de cabeza, para cuando había salido del baño el lugar estaba infestado de agentes evacuando a la gente, afortunadamente con ayuda de los hombres de Theo y los míos pudimos salir por una puerta trasera olvidada sin hacer mucho drama.
Ahora nos encontramos de regreso a la mansión anticuada de Theo.
- Bien, objetivo cumplido –me dice Theo-. Buen trabajo -hace un puño con la mano en mi dirección.
- Buen trabajo -choco su puño- ¡Celebremos! –levanta una botella de Jack, que saca de su colección en el auto.
Una hora más cinco botellas y un hígado en la mierda después, andamos en Narnia.
- ¿Sabes? - Theo comienza a preguntar mientras arrastra la lengua para hablar.
- ¿El qué? –quiero vomitar, por eso no bebo tan seguido... bueno a veces sí.
- No entiendo cómo es que el FBI te está ayudando –pregunta con curiosidad, dibujando círculos en el aire.
- Es simple, no lo está haciendo –respondo con sinceridad.
- Es raro.
- ¿Porque?
- Primero te siguen hasta a un acantilado, luego en la reunión, pero resulta que el agente con el que te ibas a ver en el baño para darle las carpetas te deja libre como si nada, sin pelear –arma sus hipótesis con los dedos-. Si tanto se esfuerzan en seguirte, porque te dejan escapar sin mucha importancia.
- Si, es muy raro –me estoy mareando.
El auto se mueve demasiado.
- Saliste intacta del lugar -achica los ojos con desconfianza.
- ¿Por qué me miras así?
- Me estás ocultando algo –acusa.
- No, no lo hago –respondo con simpleza.
- Si, si lo haces -me contradice.
- Yo no lo creo.
- Pues yo creo que sí.
- Mmm -si cree que le voy a decir, algo esta muy equivocado.
Aunque Theo y yo tengamos cierta confianza, no es como si le pudiera contar todo. Si crecimos juntos, pero él tiene sus secretos y yo tengo los míos.
- Mmm –me imita-. Te voy a creer, aunque pienso que mientes, por lo que eres una mentirosa.
- No soy.
- Si eres.
- Cree lo que quieras.
Si digo una palabra más vómito, esta conversación ya no me está gustando.
- Esta bien, no me digas -dice con calma-, tarde o temprano me terminare enterando, hisopo.
- ¿Y ese milagro? -me sorprende que no me quiera sacar una verdad a rastras como siempre intenta.
- ¿Cuál? ¿Mi belleza? -me pregunta con su típica actitud de me creo lo mejor que existe-, pos es natural, de herencia supongo.
- No ese -chasqueó la lengua en negación.
- ¿Cuál más va a ser?, si es lo único que tengo. Ser bello naturalmente, es una bendición.
- Este otro -respondo haciéndole ver que no es eso-, el que no refutes por una respuesta como siempre haces.
- Estoy muy cansado como para sacarte la verdad- se recuesta en mi hombro-. Sin embargo hoy he aprendido el don de la paciencia, deberías practicarla, es muy práctica.
ESTÁS LEYENDO
Tentando al Diablo © +18 | Libro #1 | Genes Perversos
Mystery / ThrillerLibro 1: El Diablo corre por mis venas. Iris Ferrari vive en una comunidad regida por un General que se cree rey y puede manejar a todos como le dé la gana, además de ser su padre. Esta es nuestra comunidad, nuestro pueblo, somos Legislazione. Nadie...