Los médicos caminaban de un lugar a otro había pasado una semana de lo que le paso a Noah. Hoy le darían el alta luego de haberles curado y cocer su herida y alimentarlo por sonda. No volverá al departamento ni tampoco a su casa, al salir de aquí la policia lo ingresara a un centro de auto ayuda.
Sera obligatorio que siga asistiendo a las terapias.
Y tendrá que hacer caso si no quiere ir a la cárcel por asesinato. Aunque fue en defensa propia porque iba a lastimarme igual es culpable pero al ser menor de edad no lo harán, en cuanto cumpla los dieciocho años lo pasaran a la celda.
Se acerco a mi, pero su madre me tomo del brazo.
—Quiero hablar contigo.— La seguí.
—Mira, la situación de mi hijo no es fácil, así que de por favor aléjate de el.—
—No puede venir aquí, y pedirme eso el a estado a cargo mio estos meses desde que la psiquiatra me pidió que lo vigile.—
—¿Y como termino mi hijo por tu protección?—
—¿Y usted?, ¿Donde estaba?— Me dio una bofetada.
—Yo soy su madre y se lo que es mejor para mi hijo.—
—Su hijo necesitaba de usted y nunca lo cuido como debía, así que me niego a alejarme de Noah.—
–¿Crees que es fácil cuidar de seis hijos sola?–
—No debe ser fácil, pero tampoco imposible señora.—
—Le dire a mi padre que le de empleo en la empresa.—
—No quiero la lastima de una niña rica como tu.—
—Podre ser todo lo que usted diga, pero la voy a ayudar aunque no quiera.—
—Gracias.— Sonreí.
Su madre lo tomo del brazo y lo acompaño a la patrulla.
—Vez, ahí ya esta su mamá, ahora vuelve a ser tu.— Hablo Thomas. Suspire y saque mi telefono.
*¿Papa?*
*Dime cariño*
*Puedes darle empleo a la madre de Noah*
*El mismo que te hizo llorar*
*Me dijiste que demuestre que soy mejor persona*
*Bien nena, dile que aparezca mañana a las 08:00 am*
*Gracias papa te amo*
*Tambien yo nena*
—Tiene que estar mañana a las ocho.— Estrecho nuestras manos.
—Gracias.—
—Ten, esta es la dirección.— Tomo la tarjeta.
—Luego te dire donde lo traslarán, ahora cuida de ti.— Se marcho en el taxi.
Mi mejor amigo me abrazo, y subimos al auto de Ethan.
—Mi querida Alma, se acerca tu cumpleaños número dieciséis.—
—¿Y?—
—¡Como "Y"!, ¡Tenemos que organizarte la mejor fiesta.—
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Por siempre mía 2
AcakComo dijo esa señora "esos chicos están rodeados de desgracias". Lo comprendía nuestra vida era un caos. ¿Quien diría que aun seguiríamos vivos? Pasamos por tantas cosas, pero aquí estamos todos juntos aprendiendo de nuestros errores. Intentando ser...