Por siempre mía 2

19.Intentas arruinarme.

Mire mi casa con una gran sonrisa, tendría algo mio. De nuestra propiedad.

Estabamos por llegar a casa, cuando un auto paro delante de nosotros. El conductor salió molesto y con un bate de béisbol golpeo el vidrio delantero. Me asuste gritandole a Jon. Pero el sólo estaba en shock. Golpee su hombro, tome su rostro y nada. El sujeto siguió golpeando. Hasta qué alcancé a ver su rostro era Braian el que era padre adoptivo de jon.

—¡Maldito! Así que intentas arruinarme.—Se lo veia super molesto.

—¿Jon de que esta hablando?—Pregunte. El me miro a los ojos.

—No lose mi vida, pero tranquila.—Asentí. Arranco el auto. Vi como nos intentó seguir pero jon aceleró mucho mas fue por varias partes de Forks que yo ni conocía.

—Lo aprendí de Sam.—Dijo con una sonrisa. Toque mi pecho y intente parar mi frenético corazón.

Bajamos del auto, mi corazón y mis piernas temblaban del miedo.

—¿Estas bien?—Dijo tomando mi rostro. Asentí. Alex salió de la casa.

—Perdon amigo, vino aqui súper molestó y tuve que decirle donde estaban.—

—Alex no mientas fui yo,  ahora entren a la casa.—¿Ricardo? ¿Que hace aqui?

Entramos a la casa, la ex mama de Jon estaba llorando y tenía un ojo morado.

Monica se acercó a abrazarla.

—Cariño, Maite pidió quedarse en la casa de Sofi, unas semanas. —Me susurró mi madre.

—Claro madre, en la tarde hablaré con ella.—

Me senté junto a jon se lo veía molesto, tener la presencia de aquélla mujer que lo despreció por años.

Apreté su mano, el me dedicó una sonrisa.

—Se van... a casar..—Dijo mientras lloraba, y miraba nuestros anillos.

—Si.—Dijo cortante Jon. Ella intento tomar su mano pero el se negó. Me daba pena pero yo no estaba aqui para juzgar.

Jon tomó mi mano y fuimos a la habitación.

—En una hora llagará el camión para la mudanza, ah y también me gustaría llevarte a cenar en la noche sabes.. Debe ser hermoso comer al aire libre, creó que nunca lo hicimos también podríamos.. —

—Jon.— Dije pero el ni caso sólo estaba concentrado en un cuaderno anotando quien sabe qué.

—Amor, mirame.— Le pedí, necesitaba que me mostrara que estaba mal, no que se encierre en si mismo.

—Todo esta bien.—Dijo sonriendo.

—No, nada esta bien cariño. —Sus ojos se llenaron de lágrimas.

—Si lo esta, nos mudáremos y seremos felices allí.—

—También somos felices aquí. — Se levantó de la cama.

—¿No te a gustado la casa?—Preguntó con la voz temblorosa.

—Claro que si, me a encantado pero este es nuestro lugar también jon.—

—Yo no tengo hogar, ni padres, solo quiero ser feliz contigo en la pequeña casa es tanto pedir.—

—Tenemos un nuevo hogar, nos tienes a todos nosotros, ¿no te basta?—

—No se nota, y si me basta pero acaso no entiendes cuanto me duele saber que mis padres nunca me quisieron que pase de esa "Familia" a estar solo con mi hermana, no sabes cuanto duele lia, así que mejor tu quedate yo quiero estar solo.—Dio media vuelta y se marchó.

Me senté en la cama tape mi rostro con frustración.

Luego de un rato salí y baje al comedor.

La señora se había ido.

—Ven hija, jon se a ido muy molesto.—

—Lose madre.—

Nos sentamos todos en la mesa pero no tenía apetito solo quería dormir.