Cap: 39 Tú eres yo, Yo soy tú. (Sin corregir)

1K 131 24
                                    

POV Jimin:

— J-jin hyung, por favor... - casi entraba en un ataque de panico, su voz salía temblorosa y nada que decir sobre sus ojos grandes, brillosos y muy abiertos.

— T-tal vez podríamos hablar, no es necesario llegar hasta este punto... - dije, de la misma manera, tratando de retroceder y alejarme de ese par de entes sin alma que nos acorralaban.

— L-lo lamentamos, sí? - algo alterado y muy temeroso se disculpó, apretando los dientes ante lo que veía muy de cerca.

— N-no volverá a pasar, por favor, ya... - mi corazón latía muy fuerte, lo sentía golpeando con fuerza contra mi pecho, más poderoso de lo que lo había hecho la noche anterior, teniendo las manos a punto de convulsionar y mi espalda lo más pegada a la pared, cerrando los ojos como forma de autodefensa.

— Debieron pensarlo antes de hacerme enojar, muchachos... - dijo, moviendo sus manos hacia el enchufe. Un chillido completamente aterrado inundó la cocina, al mismo tiempo que Jungkook se encogía con pavor, negando para que el mayor no lo hiciera.

Y, yo lo sabía, todos éramos conscientes de lo que se vendría una vez que ese cable fuera conectado con la electricidad. Sería desastroso y hasta traumático, pero, el mayor no parecía querer entrar en razón, todos lo mirábamos impresionados y temerosos de que llegara hasta ese punto, completamente firme y convencido de continuar, aún sabiendo lo que ocasionaría en el menor. No lo reconocíamos, era aterrador, con esa aura que, ni siquiera a nuestro líder dejaba acercarse para interceder por nosostros y por nuestro perdón.

Sí, hicimos mal, no pensamos las cosas, pero, esto se estaba saliendo de control...

— Por favor, ya basta... - algo acongojado y sin atreverse a alzar la vista, mi novio suplicó.

— Ahora sí, verdad, par de mocosos?! - exclamó, agitando el cable en su mano. - Ahora sí me tomarán enserio?! - interrogó con molestia, y, por supuesto, los dos asentimos inmediatamente. - Porque no me quedé toda la madrugada haciendo de niñera por nada, par de soquetes! - reclamó y, a ambos nos invadió una vergüenza enorme, haciendo que mi rostro se sienta arder, y estaba seguro que el azabache estaba igual, pues, ni siquiera podía levantar la cara de la pena.

— También lamentamos eso, Hyung, pero... Esto? - dije, sintiendo algo de asco por la mariposa que sostenía Taehyung enfrente de mí.

Sí, bueno, lo que ocurría justo ahora era el elaborado castigo que nuestro alfa mayor había planeado durante todas esas horas que lo obligamos a cuidar de Yoongi durante la noche, mientras nosotros hacíamos... Pues... "Eso"...

Cielos, ahora que lo pensaba, sí que resultaba demasiado bochornoso admitirlo frente a todos, aún más cuando ellos estuvieron presentes en el departamento mientras ocurría, seguramente habían escuchado algo de lo que hicimos, y, si no lo hicieron, tal vez se les hizo imposible no imaginárselo. Quería morirme de la vergüenza justo ahora, porque era tan penoso el solo pensar en que, mis amigos, esos que eran más que simples conocidos, llegando incluso a considerarlos familia, hermanos, me habían visto a mí y a Jungkook en pleno acto. Mis mejillas se sentían tan calientes como si estuvieran friéndose en lo más profundo del infierno como castigo por mis malas acciones y pecados que he cometido en toda mi vida, llegando hasta mi ojeras, las cuales seguramente ya estaban brillando en un tono rojizo que delataba la pura y enorme pena que tenía por mí mismo y por Jungkook. No quería mirar a la cara a nadie y menos me atrevía a hacerlo con Jin hyung, no cuando este desprendía un olor tan amargo e imponente que solo servía para delatar su molestia y enfado, así como el pequeño resentimiento que nos guardaba por ocasionarle ese par de ojeras que tenía justo debajo de sus ojos, producto de su desvelo por cuidar y consolar al bebé en la noche. O, al menos quería imaginarme que se debían a eso y no a que fuimos nosostros mismos los que lo mantuvimos despierto por algún ruido o alboroto que hayamos podido crear mientras hacíamos y deshacíamos en nuestra habitación, en esa colchoneta y en esas sábanas que, justo al despertar, estaban todas desordenadas y arrugadas.

°°La Manada°° [Kookmin] [Namjin] [Vhope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora