Cap: 44 Está saliendo conmigo. (Sin corregir)

677 83 12
                                    

— Maestro Jimin! Ya no lo veremos? - preguntó, por casi milésima vez una de las niñas de la guardería, sujetándose de mi pierna con ninguna intención de dejarme ir.

— No es así, Ali, seguiré viniendo, pero, antes tengo que ir a donde el alfa indicó. - contesté, agachándome hacia su altura y quedando cara a cara a ella, queriendo sonar tan confiado y firme como para convencerla lo suficiente y conseguir que me soltara de una vez antes de que los demás se fueran y me dejaran ahí.

— No le creo! - negó con su cabecita, agitando su cabello corto y con coletas que llevaba usualmente, tomando su distancia conmigo algo indignada y triste. - Se va a ir y nos va a abandonar como todos... - lloriqueó, formando un adorable y sollozante puchero en sus labios abultados.

— No es así, Ali. Lo digo enserio. - me apresuré a reponer, sintiéndome algo conmovido por sus palabras, llevando una de mis manos hacia su rostro para acariciarle y evitar que se pusiera a llorar allí mismo.

La verdad era que, mi corazón se había encogido en ese mismo instante que la escuché, pues, yo había estado igual de desilusionado al oir que debíamos de cambiar de área ahora que nos hemos integrado tan bien en la manada. Ya habían pasado alrededor de dos meses desde que llegamos y, afortunadamente hemos sido capaces de adaptarnos y conocer a los demás habitantes como para empezar a sentirnos cómodos entre este territorio, sin embargo, unos nuevos jóvenes lobos vagabundos habían sido encontrados a mitad de las calles de la ciudad de Gyeongsangnam y, con el método que nos aplicaron a nosostros, fueron rápidamente trasladados hacia aquí. Yo aún no los había conocido personalmente, pero sí que podía afirmar que eran unos cuantos años menores a mí, siendo en total ocho chicos con apariencias algo intimidantes a a primera vista, los cuales, ahora, estaban a punto de ser enviados a la guardería en la cual estaba, con el mismo objetivo que con el que nos mandaron a nosostros desde el principio.

"Integrarse".

Por lo que, inevitablemente, el tiempo de mi manada con los cachorros había terminado desde el momento en el que el alfa Bang había llegado a nuestra habitación irrimpiendo tan imprudentemente como sólo él sabe hacer, anunciándonos que, ese sería el último día en el que trabajaríamos en la guardería, y que, después de nuestra jornada deberíamos de dirigirnos al sur del territorio para reunirnos con un equipo especial de caza que nos entrenarían lo suficiente como para empezar a contribuir de manera más eficiente de ahora en adelante. No hubo tiempo para refutar ni siquiera aunque lo hubiéramos deseado, pues, tan pronto como sus palabras terminaron de salir de sus labios, el alfa regordete y bajito salió de nuestra habitación compartida sin oportunidad para objetar, dejándonos saber que, aunque su apariencia parezca gentil, posee una severidad que no tiene contemplaciones, ni siquiera para nosostros. Permitiéndonos únicamente quedarnos en silencio mientras aún contemplábamos nuestra propia existencia al estar recién levantados después de haber vivido una de las noches más extrañas y poco recreativas que habíamos tenido en nuestras vidas.

Sucedió que, después de que Taehyung fuera casi arrastrado hacia el exterior por Hobi hyung, una pequeña inquietud quedó en la boca del estómago de cada uno de los que estábamos en la habitación, atinando únicamente a continuar cada uno con nuestras tareas, mientras escuchábamos cómo Jin y Namjoon hyung comenzaban una pelea por la autoridad que estaban "perdiendo" con nosostros. Ante esto yo unicamente pude reaccionar a cargar a Yoongi y alejarlo para que no viera el pequeño alboroto que estaba comenzando a desarrollarse con los dos mayores, iniciando a tararear una canción que inventaba para que tampoco oyera nada, manteniéndolo distraído al mismo tiempo en el que Jungkook intentaba ponerse meloso conmigo. Ya había pasado demasiado tiempo desde que los dos compartíamos alguna especie de intimidad y, la verdad era que a los dos ya empezaba a pasarnos factura ese hecho. Estoy seguro que, tanto Jungkookie como yo hemos sufrido las consecuencias de vivir y dormir literalmente todos juntos. Y, no era para nada fácil, pues, estábamos hablando de seis chicos ya adultos y un bebé de a penas un año, por lo que, en varias ocasiones habíamos tenido uno que otro altercado por cosas de nuestra privacidad que han sido ultrajadas conforme pasan los días y nuestra convivencia casi se vuelve forzada. Por supuesto, eso no significa para nada que ya nos estemos casi golpeando ni odiando, para nada, simplemente que estos eventos nos recuerdan lo elemental que es la privacidad para cada uno, porque, si antes de llegar aquí nos peleábamos por el baño o sitios en el sillón, ahora estás discusiones ascienden hasta el punto de elegir la cama, lado o rincón en el cual queremos dormir durante las noches luego de cumplir con una jornada de trabajo normal.

°°La Manada°° [Kookmin] [Namjin] [Vhope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora