Duality #2 (Terminando)

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Me estremezco horriblemente imaginando las cosas que podría hacerle al mundo.

-Matame. -le ordeno a Isis. -Tienes razón, morir sería lo mejor para la humanidad entera. He pretendido que los protego todo este tiempo de peligros ajenos, cuando el mayor riesgo para su vida he sido yo. -la veo sonreír con satisfacción.

-Me alegra que lo hayas entendido, tal vez te subestime y eres más inteligente de lo que pensé.

Se acerca un poco a la jaula y Payton la sigue con la mirada.

-Voy a cumplir con tú pedido.

En ese instante un fuego empieza a quemar mi piel desde la punta de los pies, y se distribuye en todo mi cuerpo.
Suelto un grito tan fuerte que siento como si me desgarrara la garganta.
Payton pega un salto, yo tengo que cerrar los ojos a causa del dolor.
No puedo parar de gritar y retorcerme, el fuego en mi interior es cada vez más y más fuerte.

-¡ISIS POR FAVOR! -grita Payton. -¡No lo hagas, te lo suplicó!

Lo único que oigo son mis gritos y la risa ruidosa de Isis.

Payton'Pov

Comienzo a transformarme, esta vez sintiendo una furia más grande creciendo en mi interior y rugiendo como un feroz y hambriento demonio.

-¡SUELTALA! -mi grito la hace salir volando hacía atrás.

Isis me mira sorprendida, intenta incorporarse del suelo, pero soy más rápido y creo un fuego a su alrededor, un circulo de llamas que crecen.

-Te quemare viva si te atreves a lastimarla de nuevo. -le dejo en claro.

Megan esta desmayada en el suelo, su cabello cubre su rostro, me arrodillo a su lado, empezando a tomar el control veo como mis manos dejan de ser garras y vuelve a aparecer solo la yema de mis dedos. La tomo en brazos, levantando su cabeza con cuidado, le acomodo el cabello detrás de la oreja, y la beso en la frente, noto la caliente que se encuentra, y me percato de que su cuerpo también.
Maldita Isis.

-¿Megan? -pregunto.

La veo abrir los ojos despacio, noto el dolor en su mirada.

A punto de decirle que todo estará bien, una explosión nos ensordece a todos. El fuego alrededor de Isis se disipa ya que mi concentración va dirigida solo a la masa de polvo y piedras que vuelan.
Y lo veo, el cuerpo arrugado de Seth se ha convertido en una bestia de alas rojas, sus ojos están teñidos en una mezcla de sangre y un negro opaco. Sus dientes transformados en colmillos, sonríe con una mirada de satisfacción.

-Sabía que la sangre de Megan me haría poderoso, pero no creí que tanto. -suelta, su voz ya no suena humana, ha cambiado por una rasposa y casi demoníaca.

-¿Por qué te haces esto a ti mismo? -le pregunto, Megan lo mira horrorizada incorporándose de un salto.

-Cierra la boca. -me ordena.

Chasquea los dedos y dos demonios salen por entre la enorme grieta que la explosión ha creado.
La jaula desaparece en cuanto Seth se acerca y la toca, se hace polvo a nuestros pies. Antes de que pueda hacer algo, un demonio me toma por las alas y los brazos al mismo tiempo, noto sus garras clavarse en mi carne.
Miro hacía todos lados para ver dónde se encuentra Megan y veo al otro demonio volando en lo alto, la tiene agarrada del cuello mientras se retuerce horriblemente.