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He tratado de descansar un poco, pero cada vez que cierro los ojos, oigo una voz llamando a mi nombre.
Como si no quisiera que llegase a dormirme por alguna razón, tal vez estoy empezando a volverme loca, sinceramente espero que solo sea mi imaginación.

Me levanto y camino a la cocina, tengo la garganta seca y empiezo a sospechar que sin importar que haga, no podre dormir.
Tomo asiento en una de las sillas y me quedo mirando a la nada. Estoy realmente cansada, pero esa voz no me deja en paz. Ahora empiezo a oírla en mi cabeza. Cierro los ojos por unos segundos.

-Megan. -susurran. -Megan.

Me suena familiar, pero no estoy segura de ello.

-Te necesito. -esta vez el susurro proviene de algún lugar un poco más profundo. No comprendo de donde. -Necesito tu ayuda. -lo oigo más cerca, casi como si estuviera a mi lado. -Abre los ojos.

Me percato de que los he tenido cerrados todo este tiempo, los abro lentamente. Solo veo la misma pared frente a mi, la misma silla y la misma mesa. Sí, estoy volviéndome loca.

-Date la vuelta. -una voz detrás de mi me da escalofríos en la nuca.

Tal vez estoy soñando, abriré los ojos realmente y me iré a la cama.

-Megan. -un susurro en mi oído me hace voltear de repente.

Suelto un grito de felicidad cuando lo veo, por un momento me pregunto si estoy en un sueño o realmente se encuentra a solo unos centímetros de mi.
Me levanto de la silla, doy un paso adelante y una sonrisa se forma en sus labios. Sin pensarlo salto sobre su cuerpo rodeando mis brazos en su nuca. Unas lagrimas de felicidad se desprenden de mis ojos. Payton me toma por la cintura y me hace girar varías veces.

-Te prometí que volvería. -susurra en mi oído cuando ha dejado de girar.

-Y jamás dude ello. -susurro a su vez.

Me deja en el suelo y miro sus hermosos ojos, los he extrañado tanto. He extrañado cada parte de él.
Posa sus labios contra los míos y se sienten tan cálidos que podría quedarme así todo la noche. Nos movemos lentamente, disfrutando de cada contacto como si fuera la última vez que tuviéramos la oportunidad de hacerlo. Aunque teniendo en cuenta mi invitación al cielo para ser la nueva jefa y su estado actual que carece de autocontrol, nunca se sabe cuando será la última vez que podremos hacerlo tan abiertamente. Ahora mismo puedo jurar que ya no me importa en lo absoluto perderlo todo por él, su ausencia me hizo darme cuenta de cuanto lo necesito, sin importar nuestra raza o lo que puedan llegar a pensar de mi. No estoy completa si no lo tengo a mi lado.
Suena ridículo, tal vez lo sea, pero lo amo, lo amo con cada célula en mi cuerpo y no podre olvidar jamás la manera en la que me hace sentir.
Sin importar cuanto quieran decirnos que estar juntos es un pecado, sin importar si me destierran o quitan mis alas y poderes, ya no me importa nada. No soy feliz sin él a mi lado, si tenerlo significa perderlo todo, pues lo perdería por él, como se que él arriesgaría su vida por mi.

Payton'Pov

Había pensado que decirle a Megan donde me encontraba exactamente sería lo más conveniente, pero tal vez volver y saludar a la manada sería agradable, hace casi 3 meses que me fui o eso creo. He perdido la noción del tiempo más de una vez, por varias razones, para empezar despertaba luego de días y noches enteras sin control sobre mi propio cuerpo. Con rasguños, golpes o el cuerpo lleno de sangre seca de algún animal o incluso la mía. Y para completar, no tengo mi celular aquí, ni siquiera un reloj. Todo lo que traje termino perdido en el medio del bosque, culpa de aquellas veces en que empezaba a convertirme en aquel monstruo asesino.
Si hubiera sabido que el precio de mis alas costaba tanto, le hubiera pedido a mi padre que me matara y salvara a mis amigos si así lo prefería.

No hay nada más horrible que alejarme de Megan. Sufrir con esa maldición ha sido suficiente, pero extrañarla es la peor tortura. Desearía no tener que haberme alejado así, aunque sé que fue lo mejor por su bien y el de la manada.

Descubrí que mis alas aún son rápidas como cuando solía usarlas en el inframundo, vuelo lo más rápido que puedo hacía el refugio, aunque no estoy seguro que tan lejos estoy. Mientras lo hago, siento la voz de Megan susurrando, no sé como es posible, si quiera estoy durmiendo como para poder conectar con ella a través de los sueños, como ha ocurrido otras veces.
Debe ser por que ella esta dormida, maldita sea, no te duermas ahora Megan, prometo llegar pronto.

-Megan. -digo en mi cabeza. Espero que funcione.

Por alguna razón desde aquel día en el refugio cuando Thot logro entrar y amenazo con asesinarnos, Megan y yo hemos podido hablarnos a través de nuestra mente, como alguna especie de conexión. Recuerdo haber planeado con ella la manera en la que lograríamos sacar a Thot del refugio, todo a través de palabras transportadas a la mente del otro. Creí que solo era posible estando a su lado. Ahora lo veo, esa conexión ha evolucionado, tal vez incluso tenga que ver con mis poderes o los de Megan, que siguen desarrollándose. No estoy seguro, lo que si se es que podemos hablar con el otro cuando lo necesitamos. Resulta agradable y extraño.

-Megan. -sigo diciendo. Pero no obtengo respuesta.

Me mantengo llamando a su nombre cuanto mas puedo, espero que este oyendo mi voz.

-Te necesito. -digo de repente.

Tal vez así responda algo.
Silencio, absoluto silencio, mierda.

-Necesito tu ayuda. -vuelvo a hablar, debe estar dormida. -Abre los ojos.

De un segundo a otro me veo transportado al refugio, quiero preguntar por qué ha ocurrido o de que manera he logrado transportarme, pero la veo frente a mi.
Esta sentada de espaldas, mirando la pared frente a ella. Veo sus alas, blancas y hermosas como lo han sido siempre, su cabello recogido en un rodete y la silueta de su cuerpo apoyada en la silla de la cocina.

-Date la vuelta. -la veo sorprenderse. Cree que esta loca, puedo darme cuenta.

Me acerco a su oído y susurro.

-Megan.

Voltea de repente, esta algo asustada, pero cuando me ve salta de felicidad a mis brazos, me rodea con los mismos.
Su cuerpo es cálido, como lo recordaba. Su aroma exquisito y su sola presencia reconfortante.
Extrañaba cada parte de ella, prometo jamás volver a alejarme.

Duality #2 (Terminando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora