Jason se despidió en la mañana, no dijo nada sobre el beso y solo me abrazo con fuerza antes de irse, Chase aviso que se iría en la tarde, se llevará a Eliana con él para que la incluyan en su manada y Sami estuvo planeando con mamá conseguir un lugar donde vivir juntas, mamá esta acostumbrada a la presencia de alguien y Sami dijo que no podría volver a vivir sola. Su amigo Ryan las ayudará, él vive solo en un complejo de departamentos en la ciudad.
Mamá dice que prefiere algo de tranquilidad en el campo y Sami quiere lo mismo. Me alegra que vayan a vivir juntas, no podría dejar a mamá completamente sola, me sentiría muy mal.-Te prometo que cuidaré de Alaska. -me dice Sami.
Hace un tiempo tuvimos que conseguir una cueva por que su tamaño ya era demasiado grande para el refugio, vamos a darle su comida y a jugar con él todos los días, pero sin mi estará muy solito.
-Sé que lo harás, tengo que despedirlo antes de irme, así que las veo luego. -salgo del refugio y me adentro en el bosque.
Intento recordar hace cuanto que tengo a Alaska, mi cumpleaños viene a mi cabeza, todos estaban ahí, se que Sami me lo regalo.
-Recuerdo mi primer dragón, era un dragón de fuego. -esa voz resuena en mi cabeza, parece ser un recuerdo.
Pero no estoy segura de quién dijo eso.
Cruzo el arroyo y encuentro la enorme cueva, Alaska me escucho llegar y salta de emoción fuera de esta.
Lo veo revolotear con sus alitas, recuerdo cuando tuvimos que enseñarle a volar, era tan chiquito.
Me acerco a él y me lame la cara con su lengua, tengo que limpiarme con mi brazo.-Hola pequeño, sé que nos vimos en la mañana, pero olvide decirte algo muy importante, soy una mala madre. -Le digo.
Se sienta a mi lado, a veces creo que puede entenderme. Es un dragón adolescente y aún tiene un tamaño mediano. Tiene más o menos unos 8 metros, pero un dragón promedio es tan grande como un edificio. Así que a él a un le falta mucho crecer. Probablemente alcance los 20 o 30 metros, eso leí en el libro que Sami me dio ese mismo día.
-Me iré lejos un tiempo, tengo muchas cosas que resolver, el tiempo pasa mucho más lento en el lugar al que voy, un día allí equivale a una semana aquí, así que pensarás que me he ido por una eternidad, pero prometo volver a verte lo antes posible, no será para siempre. Espero me perdones y entiendas, Sami prometió cuidar de ti, se que la quieres mucho, casi no tendrás tiempo de pensar que me fui.
Lo abrazo con fuerza y envuelve su cuello a mi alrededor, se que entiende lo que he dicho, no parece triste.
-No te enojaras conmigo por dejarte aquí, ¿no es cierto?, te llevaría conmigo si pudiera. -mueve su enorme colita.
Aun es mi pequeño dragoncito dentro de esa caja, con sus alas de pollo y sus ojitos curiosos.
-Te extrañaré mucho. -me lame la cara de nuevo. -Sé que tu también. -le digo limpiándo la baba.
Agacha su cabeza, se lo que quiere hacer, desde que aprendió a volar ama llevarme a recorrer los lugares más hermosos con él, a pesar de que tengo alas, nada se compara a volar sobre un dragon. No sé cómo explicar el sentimiento.
Me subo sobre él.
-Llévame donde tu quieras, hoy será mi último día aquí, así que quiero disfrutar la vista de la tierra. -empieza a volar esquivando los árboles.
Subimos muy alto y todo parece pequeño e insignificante desde arriba, me hace olvidarme de todo por un rato.
(...)
Cuando vuelvo al refugió Chase esta allí para despedirme junto con Eliana.
-Gracias por darme la oportunidad de vivir todo lo que viví estando aquí, estaré eternamente agradecido contigo y con Payton. Mi vida nunca habría sido tan emocionante sin ustedes. Eres como mi hermana pequeña, así que cuídate Megan, por favor y avísame si necesitas que le rompa la cara a algún villano que aparezca en tu camino. Siempre estaré para ti. -me abraza antes de que pueda decir algo.
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Duality #2 (Terminando)
Fantasia○Segundo libro de la trilogía Ángeles y Demonios● Payton es para Megan como una llama de fuego, sabe que solo acercarse a él puede ser peligroso. Un solo toque la hará arder, pero también tiene claro que es el único que puede sacarla de la oscuridad...