Parte 2: "Estelas químicas sobre el club de campo"
La mañana en la que partimos hacia nuestro viaje a casa, despierto en la cama junto a Theo. Por un momento desorientador, no está claro si nos acostamos o si simplemente hemos dormido juntos.
Theo aún viste toda su ropa de la noche anterior, aunque la mayoría no está ni en el estado ni en la ubicación original y, a pesar de que las mantas están un poco desordenadas, no hay ningún rastro de acción. Por lo tanto, aunque yo solo tenga puesto mi chaleco (que por alguna clase de hechicería ahora está abotonado en mi espalda) y un zapato, parece seguro asumir que ambos mantuvimos en reserva nuestras partes privadas.
Lo que me produce una suerte de alivio, porque me gustaría estar sobrio la primera vez que estemos juntos. Si es que en algún momento hay una primera vez. Lo cual comienza a parecer que no sucederá.
A mi lado, Theo rueda y por poco no me golpea la nariz cuando lanza un brazo sobre su cabeza. Su rostro se acomoda en el interior de mi codo mientras jala excesivamente de su parte de las mantas hacia su lado, sin despertar.
Su cabello apesta a cigarros y su aliento está rancio, aunque a juzgar por el sabor que se desliza en la parte posterior de mi garganta, una mezcla fuerte de ginebra y el perfume de un extraño, puedo decir que el mío es peor.
Desde el extremo opuesto de la habitación escucho mi móvil sonar, por accidente, antes de tomarlo, acabo levantando las persianas. La luz del sol me ataca. Alzo las manos para cubrir mi rostro. Theo despierta de una sacudida y suelta un graznido similar al de un cuervo.
Intenta rodar sobre sí mismo, me encuentra en su camino, continúa rodando y queda sobre mí. Mi vejiga protesta fervientemente ante la situación. Si tengo una resaca así de severa, debemos haber bebido una cantidad extraordinaria anoche.
Y yo que comenzaba a sentirme bastante confiado por mi aptitud para beber hasta perder la conciencia la mayoría de las noches y después ser una persona funcional la tarde siguiente, siempre y cuando la tarde en cuestión no comenzara temprano.
Y en este momento me doy cuenta de que estoy completamente destrozado y aún un poco ebrio.
No es de tarde, hora en la que estoy habituado a despertar, sino bastante temprano en la mañana, porque hoy, Theo y yo partiremos hacia el campo, a visitar a mi familia ya que el verano ha comenzado y estoy infinitamente agradecido de por fin pasarlo con Theo y presentarlo a mi familia, aunque sea como amigos.
Por fin y después de tanto esfuerzo logro tomar el móvil, deslizo el dedo y contesto, sin siquiera ver quién era la persona que llamaba a estas horas de la mañana.
—Buenos días, caballeros —dijo una voz que sonaba a la de un hombre.
¿Será el chico de la noche anterior con quién tuve algo y su perfume se impregnó en mí? Eso explicaría el olor a desconocido.
—¿Caballeros? —pregunto, apretando mis dedos contra mis ojos.
—Sí, Liam, sé que Theo está ahí contigo —al fin puedo reconocer su voz, es Mason—, la noche de ayer, después de la mano de piquet ambos se volvieron locos y trataste de tener sexo con él en medio de la segunda fiesta de la noche.
Mierda. Al menos, Theo no puede escuchar la llamada.
—Afortunadamente él también estaba borracho y no recuerda nada de lo que pasó, tuvimos que detenerte porque estabas quitando toda tu ropa, así que con ayuda de Corey y te subimos a la habitación, luego subimos a Theo después de que se desmayara en medio de la sala.
—Dime por favor que no me he acercado a él.
—Solamente lo tocaste un poco, nada más allá de su cabello y mejilla. En fin, llamaba para desearte suerte con tu viaje, y, para poder despertarlos a ambos, el vuelo sale en una hora, deberías dejar de tontear e irte al aeropuerto.
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Thiam Comfort One-Shots
FanfictionHistorias variadas sobre la relación de Liam Dunbar y Theo Raeken, personajes de la serie de MTV "Teen Wolf" dirigida y producida por Jeff Davis.