ONE-SHOT 39

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Parte 39: "Rodeado por tí"

Liam estaba estresado. La combinación de exámenes en la escuela, los entrenamientos de lacrosse y el campeonato que se vislumbraba en el horizonte y el hecho de que una parte de la manada (incluidos Theo y Scott) estaba fuera de la ciudad y cuidando a unos cuantos cazadores, le estaba afectando mucho.

No es que estuviera perdiendo el control, gracias a Theo y al trabajo duro en eso mejoró el control en situaciones de estrés, pero estaba tenso, sus nervios estaban a flor de piel. Siempre estaba inquieto y se movía de un lado a otro, y no era capaz de quedarse quieto, excepto cuando participaba en los exámenes de la escuela. Incluso entonces, sus pensamientos iban a toda velocidad y era ingobernable.

No mejoró cuando se quedó dormido esta mañana y tuvo que apresurarse a prepararse, poniéndose algo de ropa por ahí y corriendo hacia la escuela. Casi llegó tarde, aunque corrió por el pasillo y casi chocó con su profesor. El hombre le dirigió una mirada severa, pero dejó que Liam entrara en clase antes que él, y éste se dirigió apresuradamente a su pupitre y se sentó. Sacando su libro y su bloc de notas, empezó a garabatear lo que el profesor les decía.

A pesar de lo estresante de la mañana, a Liam le resultaba más fácil seguir la clase de su profesor, no sólo en la primera hora, sino también en todas las demás. Incluso un examen sorpresa de álgebra no le estresó tanto como pensaba, y quizás debería haberse preocupado por ello, pero después de haber estado constantemente bajo presión durante los últimos días, Liam disfrutó de este agradable cambio.

Cuando llegó la hora del almuerzo, Liam obtuvo una explicación de por qué se sentía tan tranquilo, todo gracias a Mason. Liam acababa de sentarse con sus amigos y tenía la intención de comer cuando vio la mirada de Mason.

—¿Qué? —preguntó y Mason ladeó la cabeza.

—¿Es la camiseta de Theo? —preguntó Mason, todavía evaluando la mirada de Liam—. Creo que lo vi con ella puesta antes de que se fuera de la ciudad con Scott.

Liam miró hacia abajo, tirando de la prenda en cuestión. Realmente no había prestado atención a lo que había cogido esta mañana, gracias a que llegó tarde. Al oler la camisa, Liam tuvo que estar de acuerdo con Mason. Efectivamente, era la camisa de la quimera.

—Sabes que esta mañana se me hizo tarde, no presté atención a lo que llevaba puesto —explicó Liam y frunció el ceño hacia Corey, que soltó una risita—. ¿Qué es tan gracioso?

Corey se encogió de hombros. —Nada, sólo.... pensé que los hombres lobo tienen como súper narices. ¿Cómo no te diste cuenta de eso?

—Bueno —dijo Liam—. Tenía prisa y... —Se encogió de hombros antes de sonreír suavemente—. Huele a él, es cómo calmante.

—Calmante —Mason repitió como un loro.

—Sí, porque está acostumbrado a ese olor. No olvides que viven juntos —Corey adivinó y Liam asintió.

—Lo que Corey ha dicho.

Su teléfono sonó con un texto en ese mismo momento y Liam lo miró.

—Scott me envió un mensaje. Quiere que nos reunamos en casa de Deaton. Ahora —anunció y se levantó, cogiendo su bandeja en el progreso. Si Scott los sacaba de la escuela, era importante. Sus amigos siguieron a Liam y pronto se encontraron entrando en la clínica de animales.

Al entrar fueron recibidos con Malia siendo remendada por Deaton en la mesa de operaciones mientras Scott estaba a su lado y discutía las cosas con Theo que se apoyaba en la pared. Se detuvieron cuando Liam y los demás entraron y Liam se encontró revisando a Theo en busca de lesiones visibles antes de sonreírle a su amigo, quien le devolvió la sonrisa suavemente.

Thiam Comfort One-ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora