HÉROE
LUGUR
—¿¡Eres una jodida bruja?! ¡Y me vengo enterando!
Negué molesto, mientras me colocaba mi armadura para ir al infierno. La loca de April, me acababa de decir que todo este tiempo no fue una jodida psíquica, sino una bruja por maldición de Lucifer.
—Pensé que te lo tomarías bien—confesó, acomodando velas en un círculo alrededor de ella.
—Oh si, oye ¿Crees que puedas leer mi futuro ya te me acabas de confesar esta pendejada? —le respondí con el genio por los cielos.
—Bueno, ya nos lo dijo y es lo importante ¿no? —la defendió Made.
—¿Tu ya sabias de esto? —le preguntó Isrál.
—De saber, les hubiera dicho.
—No me agrada mucho la idea de confiar en una mentirosa bruja para, poder sacar a la abusadita—el comentario de Ana me empeoró el carácter.
—Si vuelvas hablar así, no me va a importar que seas la mano derecha de Isral, porque te cortaré la garganta y se la daré de comer a los perros de la calle—sentencié, mientras abrochaba el cuero de mi chaqueta de pelea.
Ana miró a Isrál en busca de ayuda, a lo que él solo se encogió de hombros.
—¿Yo también debo ir? Porque la verdad, me importa muy poco la niñata esa. Prefiero quedarme hacer algo productivo aquí—dijo Julia, que me estaba poniendo mis botas.
—Llevaremos a un ejército de demonios al infierno. Una más o uno menos no importa, te puedes quedar, para ayudaras a April—le respondió Div.
Ella bufó y la tomé de los hombros, la puse de pie e hice que me viera. La sujeté por el cuello y levanté el mentón, ella imitó mi acción y me dio una pequeña sonrisa.
—Si tu no quieres ir por Donna, por lo que pasa entre ella y yo—dije recogiéndole un mechón—mejor, déjate de pendejadas y no actúes como una jodida niña celosa—su sonrisa se borró.
—¿Después de todo lo que he estado haciendo por ti así me pagaras?
Me relamí los labios y la miré serio.
—Lo que a ti te di, fue solo mi cuerpo, algo que le he dado a miles de mujeres que no puedo contar. Lo que le quiero dar a Donna, triplica el sentimiento y la acción. No hiciste nada estos años, solo me cuidaste la espalda y eso es tu trabajo al ser un demonio. Ubica tu lugar, Julia.
El silencio llenó la habitación y todos se me quedaron viendo, ¿Qué era la única persona en este puto local?
Julia me miró enojada y abandonó el local, Ana suspiró y luego bufó, la fue a seguir.
Blanqueé los ojos y dejé que opinaran la mierda que quisieran. Se me resbalaba lo que tuvieran que opinar.
—¿Y nos podemos ir?
La voz de Kate nos hizo verla, que estaba vestida con una armadura como la nuestra, las manos en su cintura y una sonrisa llena de esperanza.
—¿A dónde crees que iras? Los arcángeles no pueden ir al infierno, Katherina.
Ignoró el comentario de Isrál y se acercó a April que veía con el ceño fruncido su libro de hechizos, sus dientes tenían atrapado su labio inferior. Levantó la vista a Kate y cuando seguramente iba a salir la misma pregunta de sus labios, la mujer de ojos verdes se adelantó.
—Antes que me vuelvan a preguntar esa idiotez, les digo que pienso ir con ustedes.
—Yo creo que no—dijo Galu que ya estaba cambiado y esperaba recargado en la pared.
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LOS 7 PECADOS
AcciónLos 80s era una época en donde gobernaba la música, la libertad y la mejor adolescencia para ella. Su vida no era perfecta, pero se conformaba con eso... Hasta que conoció a los demonios. Los 7 pecados capitales. Ellos invadieron cada célula de ella...