ERRORES
Era incluso mucha más grande a la tienda donde yo solía ir. Esta era de dos pisos, con cuadros y posters en el techo, había estantes con vinilos y otras con casetes, había grabadoras, walkmans, bocinas y muchos instrumentos para la gente que le gustaba tocar.
—Eliot me dijo que bailaste hoy, así que tu pasión por la música está regresando, por eso este regalo.
—Lugur, esto es increíble, es... no tengo palabras para decirte que esto me encanta.
—Todo está a tu nombre—me llegó por la espalda y me dio unos papeles—. Es tuyo, tu decide lo que harás con él.
Me di la vuelta y me colgué de su cuello llenándole la cara de besos.
—¡Gracias, gracias, gracias! Me encanta.
—Ya lo sabía y si no te llegara a gustar, de todas formas, iba a ser un grano en el culo hasta que lo tomaras—me tomó de la mano y primero encendió la luz—. Aun te quedan más regalo.
Las persianas estaban cerradas, así que nadie nos podía ver dentro, y solo se veía muy debajo la luz por fuera. Me sorprendí cuando con la iluminación el lugar mejoró, se veía aún más grande e incluso tenia sillones donde podías sentarte a escuchar la música que quisieras.
—Segundo regalo—me dio un sobre beige.
—¿Acaso ahora me compraste una isla? —bromeé abriéndolo.
—Puedo comprarte una si quieres—se encogió de hombros.
—Con todo el dinero que gastas, podrías acabar con la hambruna—dije sacando el papel que venía adentro, era un cheque.
—Me gusta ser egoísta, el pobre es pobre porque quiere.
Negué con una sonrisa y mis ojos se abrieron aún más cuando vi la cantidad del cheque.
500,000 dólares.
—Lugur—hasta se me fue el aire.
—Ese dinero no es mío, es tuyo. Son las ganancias que lleva el boggo en los últimos 2 meses ¿Si recuerdas que te compré esa disco?
Lo había olvidado, había olvidado el hecho de que un día estando ebria, le pedí a este demonio que me comprara una disco, una disco de la que ahora estaba recibiendo ganancias.
—No puedo creerlo—murmuré.
—Eso se ganó en 2 meses, imagínate en un año cuanto tendrás—me quitó el chequee y me hoz verlo a sus hermosos ojos—. No volverás a trabajar en un lugar donde no te valoren, no volverás a ser una empleada. Ahora eres la jefa, la dueña y puedes hacer lo que se te de la puta gana y yo estaré contigo cuando tomes esas decisiones.
—¿Y si quiero trabajar aquí o en el boggo?
—Hazlo, siempre y cuando la gente de ahí sepa que con un chasquido los puedes a ser mierda.
—Me estas mimando demasiado—confesé besando su cuello.
—Yo también me merezco algo ¿no? —su mano me despojó de mi chamarra.
Cayó al suelo y me mordí el labio el me recorrió completa y luego quitó mis orejas junto con mi gorro.
—Creí que estaba en abstinencia.
—Y llevas 2 semanas mejorando, además es tu cumpleaños, podemos hacer una excepción.
Asentí emocionada, cuando me iba a bajar los tirantes de mi vestido, el me detuvo.
—Te dije que te quería follar con eso puesto—señaló con su cabeza el mostrador—. Súbete ahí.
Me di la vuelta y comencé avanzar a donde me ordenó, di un respingo cuando me lanzo un azote en el culo. Cuando me subí y mis piernas quedaron colgando, se puso delante de mí y apoyo sus manos en mis muslos subiendo mi vestido.
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LOS 7 PECADOS
ActionLos 80s era una época en donde gobernaba la música, la libertad y la mejor adolescencia para ella. Su vida no era perfecta, pero se conformaba con eso... Hasta que conoció a los demonios. Los 7 pecados capitales. Ellos invadieron cada célula de ella...