Miro su reflejo en el espejo de la habitación una vez más, exprimiendo un poco de crema humectante que le ayudaba a controlar sus arrugas. Dejo pequeños puntos en la punta de su nariz, su frente, ambas mejillas y barbilla. Una vez colocada, la unto por toda su piel hasta no dejar ninguna mancha blanca visible. Toda su piel pareció brillar, así que solo espero a que los poros absorbieran el cosmético.
Tapo el embace de la crema y tomo una pequeña loción que sobo alrededor de su cuello para disminuir las tenciones en su espalda. Sintió el aroma de lavanda acompañar de manera positiva al suave olor de vainilla que la crema poseía.
Amarro su cabello en un moño para terminar su sección de belleza de las noches. Abrió un cajón donde guardo sus aretes y en un pequeño estuche coloco sus lentes de contacto. Su visión no dejo de ser clara, pero algunos detalles se distorsionaban a la lejanía por su miopía.
— Eres hermosa. — le alago Namjoon desde la cama, leyendo un libro en tableta.
— Y tú un tonto.
— ¿Por qué siempre que te alago me responde con esa conducta, mi vida? — pregunto mientras veía como su mujer iba caminado a la cama que compartían desde hace veinte y ocho años.
Si existía algo que Namjoon siempre había amado era mirarla. Siempre se deleitó de ese magnífico cuerpo que su amada poseía. Nunca fue dueña de curvas exageradas, tenía unas proporciones perfectas a sus ojos. Su altura no era mucha, con unos tacos de diez centímetros le alcanzaba a sus mejillas. Para tener un cuerpo pequeño, se consideraba dentro de los estándares de belleza coreanos.
— Es una costumbre. — separo las mantas y se hecho a su lado, apoyando su cabeza en el hombro de su esposo.
Namjoon sostuvo la tablet con solo una mano, pasando su brazo derecho por el cuello de Jeongyeon, logrando sobar su hombro con cariño.
— ¿De qué estuviste hablando con Yoongi? — se atrevió a preguntar.
— Cosas.
— ¿Qué cosas?
— Cosas. — simplifico.
— Desde que éramos adolescentes me vienes diciendo cosas y esas "cosas" no resultan muy buenas. — volteo a verla, apagando el aparato y dejándolo a un lado.
Ya había tendió suficiente información de programación de los sistemas Betas y como aplicarlos en nuevos aparatos. Luego de tanto tiempo logró comprender como es que podía llegar a mover la energía por la frecuencia catorce y hacer que eleven su potencia a un total de 14Qh, creando actividades interesantes. Llegaría a manejar unas configuraciones y, con su compañero de trabajo, lograría empezar a diseñar los nuevos modelos que la compañía estaba pronosticando para marzo del año que venía.
— Estuve hablando de Yoongi, ósea nuestro hijo. — Min río por la aclaración que le colocaron.
Ya había comprendido que Jeongyeon se refería como Yoongi a su hijo y como MYG093 a quien le robo la apariencia. Hasta cierto nivel la entendía; aceptaba sus términos y condiciones para mantener a su lado al androide. Justo con quien, queriendo o no, empezaban a formar un lazo extraño, considerando que solo era un montón de metal.
— Me preguntó cómo era él. Yo traté de describirlo lo mejor que podía, acabé diciéndole que se parecían mucho. — paró unos segundos, acomodando las mantas sobre ella. — Aparte de la apariencia.
— Entiendo, también lo he notado.
— Cada que pienso en Yoonie mi pecho duele. Sé que ha pasado tanto tiempo, pero no logro superarlo. — su voz se ahogó como siempre, sintiendo como algo extraño se instalaba en su estómago y su garganta le cortaba el aire.
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𝐂𝐎𝐃𝐈𝐆𝐎 𝐌𝐘𝐆𝟎𝟗𝟑 || 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍
Fanfiction«ᴇʟ ᴄóᴅɪɢᴏ ᴍʏɢ093 ᴇʀᴀ ᴇʟ ᴄóᴅɪɢᴏ ᴅᴇ ᴀᴍᴏʀ ᴍᴀs ʜᴇʀᴍᴏsᴏ ǫᴜᴇ ʟᴀ ʜᴜᴍᴀɴɪᴅᴀᴅ ʟᴏɢʀᴀʀíᴀ ᴀᴘʀᴇᴄɪᴀʀ» ⌦ : : | . . ︿ ❀ ︿ . . Todos siempre suponemos que el amor debe de ser de persona a persona porque los sentimientos serían más puros. La interacción...