𝐂𝐎𝐃𝐈𝐆𝐎 𝐌𝐘𝐆𝟎𝟗𝟑 || 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍

ᴛʜɪʀᴛᴇᴇɴ ♡

Una vez que llegaron a la mesa donde habían empezado a almorzar junto a un grupo que recordaba ser los mismos que en algún tiempo fastidiaron a un amigo. No llevaba nada para comer; tenía algunas monedas en el bolsillo que le solían dejar antes que sus padres salgan a sus trabajos y no regresen hasta entrada la noche, aunque había veces en las que desaparecían por días. Miles de cosas y, según ellos, responsabilidades; a los ojos de los padres de Taehyung él ya estaba aún edad en la que podía tomar las cosas como deseara, pronto podría irse de su casa incluso, claro que su padre no lo dejaría. En cierta parte ese señor más que ver un hijo al cual educar para liderar su gobierno tecnológico, observaba un esclavo al cual maltratar para que en algún futuro tome el lugar de uno de sus tantos empleados buenos para nada. El joven era consciente de ello y había dejado de importarle esas cosas desde hace largos años, era uno de esos tantos que podía tener todo y nada a la vez.

Sintió unas leves caricias que lo hicieron romper la nube de pensamientos en la que se había metido, obligado a voltear se topó con la sonrisa de Hikaru que jugaba con sus rizados mechones. La chica parecía respetar su silencio, cosa que en otras ocasiones y con cierto grupo de personas se vio obligado a hablar a pesar de que él no esté listo para decir todo en voz alta. En sí había un chico en particular quien siempre estaba ahí para insistirle que le diga todo, alguien de cabello con puntas moradas en la actualidad que se la pasaba sonrojándose hasta por su existencia. Ezaki movió el brazo del mayor para pasarlo por sus hombros y así acurrucarse mientras que sus amigas hablaban de algunas cosas a las que ella no le había estado prestando atención por mirar los lunares que Taehyung tenía, descubrió uno en la oreja y otro muy cerca de su cuello, casi llegando a la quijada.

Para Kim todo se sentía tan monótono e irrelevante. Sus ánimos lo habían dejado al momento que dio luz verde a ese brillo para que tome alas y vuele lejos de su lado. Pasaba horas metido en su cabeza, sabiendo que lo que sea que otros deseaban decirle podía esperar, ahora su único propósito era mirar a un punto inespecífico, planteando tantos episodios que nunca realizaría. Las caricias en su mentón eran lejanas a su conciencia, él solo deseaba esos ojos marrones mirándole como antes solían hacerlo, con ese destello de alegría y un mar de emociones que nunca quiso navegar por no quedar herido. Esos ocelos habían dejado de mostrar ilusión, nada más trataban de sobrevivir al dolor que lo azotaba y lo peor es que él lo sabía, entendía todo ese remolino de demonios que iba con lentitud en su dirección.

Taehyung sabía quién era y sabía lo que hacía; después de todo, su cabeza le gritaba que estaba haciendo mal, pero que no se detenga. Si paraba mostraría su debilidad; si continuaba, su enemigo le ganaría en razón y eso era lo que más detestaba, que alguien le diga que se equivocó.

No era inmaduro, entendía cuando alguien le regañaba; todo cambiaba cuando ESA persona se burlaba en su cara y siempre le hacía sentir una basura, le hacía entender que no sería lo suficiente bueno para tomar su lugar y si es que no lo había desechado a un tuvo cuando cumplió las cinco semanas de existencia, fue por su progenitora a la que nunca reconoció como su madre.

— ¿Está todo bien, bubu? — su rostro fue girado cuando una suave voz le llamo.

— Ya te dije que no me gusta que me digas así. — se acomodó mejor, sintiendo que los demás estaban prestándoles atención.

No eran sus mejores amigos, pero había aprendido a tolerarlos debido a que eran cercanos a su chica. Sabía que todos llegaban a ser una bola de imbéciles con un maní de cerebro y que nunca entendería como es que llegaron a último año. Todos trataban de lucir ropas caras y accesorios de último modelo, charlando de cómo sus padres los continuaban meciendo en una cuna de oro, teniendo asistentes hasta para lavarle los dientes. Algunos de sus padres asistían a famosos artistas, razón por la que podían tener conciertos gratis, otros pertenecían a las ventas; algunos, a liderar empresas; y entre ellos resaltaba Taehyung con su padre que tenía una gran industria tecnológica en todo Corea.