ᴛᴡᴇɴᴛʏ sɪx ♡

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Cuando Yoongi dijo que daría lo mejor de él para que Jimin este cómodo jamás imagino que se tomaría al pie de la letra las palabras. Es verdad que Park no era la persona con mayor historia de amor en toda la vida, pero había momentos en lo que sentía que no estaba viviendo en la vida real, sino en una película antigua donde las paletas de colores son cálidas. Era verdad que Min no era humano, pero siempre existió dicha frase "no hay nada que sea perfecto" que no parecía llevarse muy bien con Min. Era un androide que fue diseñado para ser el modelo ideal según sus programaciones lo decían y en ese momento Jimin tenía toda una sección dentro de su panel principal.

Hoseok cuando se enteró no supo bien qué decir. La pareja se había puesto de acuerdo de ir paso a paso, las cosas bruscas hubieran perturbado a Jimin y eso era lo mínimo que quería. Cuando regresaron a la escuela, Jung sintió algo raro cuando vio bajar a Park del carro de Min y luego al susodicho. No fue mucho trabajo sacarle la verdad al humano cuando en el recreo se lo llevó a comprar algo. Le fue tierno ver la forma particular en la que Jimin achinaba los ojos y parecía saltar de felicidad. Si no conociera al chico podría jurar que se había cogido a Min Yoongi.

El tiempo voló para ambos. El rechazo en su escuela era claro, pero Yoongi estaba tan centrado pintar la vida de Jimin que a ninguno le importo. Pasaron los días y luego semanas. Park recordaba que cuando cumplieron los quince días de novios Yoongi le regalo un pequeño peluche, eso ya le pareció un poco agobiante. ¿Enserió Min estaba gastando tanto dinero en él? Está bien que sea billonario, pero tampoco era para pasarse. Sentía como si estuviera saliendo con un viejo que residía en Dubai, aunque era casi lo mismo.

En fin, ambos acordaron en ser más simples. Cosas como unos buenos días, o tal vez un abrazo. Un alfajor o alguna ayuda en tareas. No todo tenía que ser material y al final, lo abstracto era lo mejor para Jimin.

Cosas pequeñas y bonitas, como sus salidas. Cuando el tiempo terminó por volar y el primer mes de pareja oficial llegó, Jimin noto que coincidía con un paseo que haría con su familia que venía por el cumpleaños de la mamá de Park. El plan era ir a un zoológico con toda la amplia familia y al chico le pareció un buen momento para presentar formalmente a Yoongi. Era algo rápido, lo sabía, pero también sabía que sería algo que duraría, tenía mucha fe de que fuera así.

Por eso cuando la familia de Jimin llegó a la entrada del zoológico empezó a buscar a Yoongi por todo el lugar. La cantidad masiva de gente y vendedores le sorprendía. Muchos niños corrían de un sitio a otro, algunos gritaban y otros reían. También había muchos reclamos por las colas masivas que había. Si Jimin tenía un comentario sobre todo sería que le sorprendía el escenario; hasta donde sabía muchos niños preferían quedarse en sus casas viendo su celular o jugando con las cosas tecnológicas que tenían. Ver como la población trataba de volver a fomentar cosas como salir en familia o jugar en los parques le agradaba, estaban cambiando.

Las máquinas eran geniales, pero no era para tener que depender de ellas toda la vida.

— Minie, Minie. — la menor de la familia Park tenía dos años y esa su sobrina. Siempre que la veía la pequeña se emocionaba por ver a su tío favorito. — ¡Minie ven!

Jimin no tuvo que escuchar más y se acercó a su sobrina. Primero la saludo con un golpe puño y luego se agarró para elevarla en aire. Uso su antebrazo para poder sentarla y tener un puente de apoyo. Con cuidado tiro su espalda para atrás y empezó a caminar a donde estaba sus padres.

— Estás enorme. — alago a la niña mientras presionaba su nariz con fuerza. — ¿Qué animal quieres ver?

— ¡Perro!

— Minyi no hay perros en los zoológicos. — al sentir que sus brazos empezaban a adormecerse tuvo que verse obligado a dejar a su sobrina en el piso y dejarla correr, siempre bajo la supervisión de algún adulto.

𝐂𝐎𝐃𝐈𝐆𝐎 𝐌𝐘𝐆𝟎𝟗𝟑 || 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora