ᴇʟᴇᴠᴇɴ ♡

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— Te dije que no teníamos que llegar tan temprano. — gruño otra vez Jimin mientras que comía un poco del algodón de azúcar que se había comprado.

— La puntualidad es una muestra de respeto.

Jimin rodó los ojos mientras arrancaba otro pedazo. — ¿Quieres un poco?

— No me gusta.

— ¡Nada te gusta! — Yoongi se encogió por lo dicho, pero de pronto se exaltó por el grito de Jimin. — ¡Por aquí, par de homosexuales!

Hoseok movió bruscamente a Taehyung y señalo al par que estaba cerca del lugar en cuestión. Jung fue jalado por Kim sin escuchar su reclamo y no dijo nada, manteniendo esa actitud tan serena como siempre la tenía.

— ¿Hace cuanto están acá?

— Es mi segundo algodón, así que espero que puedan entretenerme lo suficiente si no quieres que me suba a tu cabeza para jalarte los pelos. — Jimin apunto a Kim con su dulce, volviendo a comer un poco más.

— Ya ya, perdón. — Taehyung se cruzó de brazos y miro al rededor algo preocupado.

— ¿Sucede algo? — pregunto Hoseok.

— Hay algo que quiero comentarles... pero no se enojen por favor. — esa capa de dureza desapareció en un dos por tres y preocupo a todos sus amigos.

— ¿Qué?

Kim desenredo sus extremidades superiores y empezó a moverlas en sus bolsillos, jugando con lo que podía pensar que era un llavero. Miraba a otro lado, mostrando otro tipo de nerviosismo y malestar; comparado al que Jimin sentía cuando Yoongi le decía cosas lindas, este era generado por los glucocorticoides que era segregada en grandes niveles. Paseaba por toda su cortisona y cortisol, haciendo que se haga un poco más pesadas dichas zonas.

— Olvídenlo, se lo diré más tarde.

Luego de eso una secuencia de grandes momentos pasaron. Era como si se tratara de aquellos videos musicales de los artistas que tantos solían escuchar. Todos sonriendo y corriendo de acá para allá, sintiéndose libres y ligeros. Para los tres humanos les era curioso ver esa sonrisa tan natural que se formaba en los labios del robot. Ninguno de ellos conocía sobre lo que Yoongi era, pero igual les sorprendía verlo en una faceta que no sea serenidad, aunque sea podían comprobar que era humano y no un tipo de extraterrestre que los estudiaba. Bueno, viéndolo desde ese punto puede que no sean tan específicos, pues no era otra especie, ni siquiera era un ser vivo. Solo un conjunto de cables que ante ciertos estímulos lograba generar una reacción.

Eran simples detalles.

Para Yoongi era maravilloso todo lo que estaba viviendo. Esa fluides y poder sentirse un poco más humano, la actualización funcionaba con efectividad y la experiencia por la que estaba pasando lo llenaba de una gran paz que no podría describir. Namjoon tenía razón, poder pasar por eso no era algo que buscabas en internet y ya, conocías lo que era poder mirar a tus amigos y sentirte en un lugar seguro. No había palabras para mostrar la euforia que había logrado describir al ver esas personas que eran de vital importancia desde que se habían empezado a conocer.

Todo era tan especial. Tal vez más para Jimin, porque sentía gran placer cuando oía como Yoongi hablaba animadamente y sus ojos se achinaban por la felicidad.

— Am.... chicos. — los llamo Taehyung moviendo sus manos algo nervioso. Esa faceta otra vez. — Podemos ir donde los crepes, alguien más viene a la cita.

Eran las seis y, luego de tantas risas, Hoseok había propuesto ir por algo de comer para bajar un poco la energía. Los otros ajenos a los sentimientos de Taehyung, asintieron. Jung estuvo a su lado todo el rato, admirando como el rostro de Taehyung resaltaba y brillaba por la luz anaranjada que lo bañaba. Era tan hermoso que moría por tomar una foto, pero resultaría muy extraño. Claro que ignoraba la razón del ceño de su amado se arrugaba de tal forma y su lengua recorría sus labios por cuarta vez.

𝐂𝐎𝐃𝐈𝐆𝐎 𝐌𝐘𝐆𝟎𝟗𝟑 || 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora