Cardigan

26.

Durante la semana la prensa comenzó a publicar noticias sobre los soldados que estaban en la misión de afganistán y las intenciones que la administración de Lanzani tenía con ellos, el fondo de todo Peter no era un político, era un economista y su objetivo principal siempre sería la economía del país, más allá de lo que él pudiese decir, yo sabía perfectamente que ese era tu verdadero interés. El miércoles por la mañana llamó a un consejo de seguridad especial, antes de entrar a esa oficina supe lo que iba a pasar.

—Buenas tardes —dijo David entrado con una carpeta a la sala de reuniones, estábamos solo los secretarios del comité político importante— El presidente está por venir —dijo mirando su reloj— estábamos en un reunión con los generales de afganistán —miré a vicepresidenta inmediatamente, en ese momento Peter entró mirando su celular y se sentó a la cabeza.

—Buenas tardes a todos —se abrió el botón de la chaqueta, estaba con un traje color gris, se veía hermoso como siempre pero no podía pensar en eso en este momento porque ya me estaba sintiendo un poco molesta— no quiero quitarles mucho tiempo porque sé que tienen muchas cosas que hacer y que estas reuniones de emergencia desordenan sus agendas. Como todos ustedes saben mi intención siempre ha sido terminar con la misión de afganistán y le pedí al secretario de defensa que se ocupe de la evacuación segura de las tropas —miré al secretario de relaciones exteriores que comenzó a escribir en su computador inmediatamente— hoy tuvimos la primera reunión con el general a cargo, se les va a comunicar a los militares esta semana la decisión

—¿Cuándo van a salir? —preguntó la vicepresidenta

—El general dice que podemos salir en un mes del lugar —dijo David, lo odiaba intensamente

—¿Un mes? —dije sorprendida y todos me miraron— ¿Es seguro? —pregunté

—El general dice que no deberíamos demorar más de eso debido a que cada vez hay menos tropas en el lugar —dijo David— también dice que no deberíamos tener problemas para salir, estamos con un buen poder en el lugar, tenemos control de la zona

—Entiendo perfecto que tenemos el control de la zona, me refiero a si es seguro para las personas que están ahí, nosotros vamos a salir después de todos los años que estuvimos, después de todo lo que generamos en ese sitio ¿Es seguro para la gente que se va a quedar? —pregunté

—¿A que te refieres? —preguntó David— nosotros tenemos que ocuparnos de nuestras personas, las personas que viven en ese lugar no son nuestro tema —miró a Peter sin entender— entiendo las buenas intenciones pero esto es parte de la misión, es un daño colateral del que no podemos hacernos cargos

—Los talibanes van a tomar el poder en cuanto salgamos de la zona —dijo la vicepresidente mirando a Peter— es a lo que se refiere Mariana.

—Hablamos de ese tema con el general pero no podemos hacer demasiado porque no está en nuestras manos, podemos dar aviso con tiempo a las organizaciones internacionales para que pongan ojo en el lugar o tomen algunas medidas pero la verdad es que no podemos hacer demasiado —dijo Peter— esa misión nos está costando lo mismo que vale construir cinco hospitales anuales, es un dineral, es una locura lo que se gasta en ese lugar y no estamos consiguiendo nada a cambio. Solo el poder en un sitio completamente lejano. Vamos a salir

—Va a tener un costo grande —dije con personalidad— me refiero que si las cosas salen mal en ese lugar vas a ser el principal responsable de todo lo que suceda, incluso internacionalmente

—Las cosas no tienen que salir mal Mariana, por lo mismo estoy llamando a una reunión con todos ustedes —me interrumpió con un tono de voz diferente al que usaba siempre— ustedes se tienen que ocupar de que las cosas no salgan mal, todos los que estamos en esta mesa queremos lo mejor para este país y para nuestros ciudadanos, ellos son nuestra principal preocupación