A - 13.

1.1K 148 43
                                    

Mi nombre estaba en todos los canales, en cada programa político con un panel de expertos analizando la situación actual de mi relación con Peter, era la primera vez que el presidente mantenía una relación con una de sus trabajadoras o la primera vez que se hacía público. Lo que me daba mas tristeza de todo lo que estaba pasando es que estaba segura que mi bebé podía sentir mi angustia, mi dolor y sobretodo el miedo que me invadía cada vez que pensaba sobre mi futuro ¿A que iba a dedicar mi vida después de esto? Sería simplemente la novia de un político, jamás soñé eso para mi. Por la mañana me hacía la fuerte para que Peter no se preocupara mas de la cuenta, ya habia hecho demasiado por su carrera política, no podía darle más problemas, estaba segura que si me veía más afectaría directamente con su desempeño en el trabajo, entonces cuando él ponía un pie fuera de la habitación lloraba todo lo que no podía con su presencia, hasta que me dolía la cabeza o hasta que me daba dormida solo del cansancio.

—No puedes estar así —me decía Euge acariciandome la cabeza lentamente— esto le hace mal a tu bebé, te hace mal a ti... no importa lo que digan esos ridiculos sobre ti, no te conoces mi amor, te lo he dicho mil veces —la miré con una leve sonrisa— es más, la televisión debería estar apagada, para que quieres ver o escuchar todas esas estupideces? —me preguntó algo molesta

—Porque necesito saber que tan duro es todo, tengo que pensar en que puedo ayudar a Peter, no quiero que se aprovechen de esta situación para...

—Pero ya está mi amor, ya está. En este momento no hay nada que ustedes puedan hacer para que esto se termine, por lo menos hasta que venga otra noticia fuerte, no puedes ayudarlo. Además tu tienes que preocuparte de tu salud, el tiene un equipo que se hará cargo de eso, recuerda que no trabajas mas para...

—Es por mi culpa —la interrumpí— yo era la que estaba ocupada de velar por el bien de su carrera y terminamos de esta manera

—Terminaron de la mejor manera posible, formando su familia. Da lo mismo lo que digan esas personas —me puse la mano en la panza porque me comenzó a doler muchísimo— ¿Hay algo mas lindo que lo que les está pasando ahora? Van a traer un hijo al mundo, algo que les va a cambiar la vida para siempre, una persona que va a depender de ti por mucho tiempo —agregó con una sonrisa—  ell bebé te necesita mucho mas —se abrió la puerta y entró Bella con un te y unas galletas— por ejemplo, ahora tienes que comer

—No tengo ganas —dije acomodándome— me duele mucho la cabeza

—Stefanía dijo que no puedes estar sometida a estrés —me apagó la televisión— si no quieres comer por ti, entonces hazlo por el bebé

—Eugenia tiene razón, es lo que dijo esa italiana hija de puta —agregó Bella con toda la naturalidad del mundo y me hizo reir— lo hice para que se riera, no me cae mal tu ex

—Termínala —dijo Eugenia riendo

—Gracias por estar acá —dije con una sonrisa— estoy un poco preocupada por Peter —miré a Euge— no me refiero a su carrera política, me refiero a su salud, obviamente no la está pasando nada de bien

—Mi hermano estará bien si te ve bien a ti amiga, yo creo que tenemos que hacer un circulo de energía linda y protegerte de todo mal —agregó Euge con una sonrisa, Bella me miro con los ojos brillando

—Si quieres llorar hazlo amiga, no te guardes nada, pero Euge también tiene razón, hay una vida dentro de ti que en este momento depende de ti 100%, las palabras de esas personas solo tendrán poder si tu se las das. No tengas miedo, el trabajo nunca te va a faltar, eres la persona mas inteligente del mundo —agregó sonriendo mientras se le caían lágrimas, ella lloraba si me veía llorar a mi

—Voy a estar bien —me toqué la panza— te lo prometo porotito bebé, solo tienes que ser paciente con mamá —sonreí llorando

Bella me abrazó y rompí en llanto nuevamente, pasamos toda la tarde juntas llorando y riendo al mismo tiempo, por lo menos a pesar de todo lo feo que se veía la situación tenía el mejor circulo de todos y en algún momento esto iba a dejar de doler o esperaba que fuese así. En un momento entré a la baño y me miré la panza, aun ni siquiera se notaba, aun el mundo no lo sabia, eramos simplemente nosotros formando nuestra conexión

Cardigan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora