A - 20.

1.7K 118 21
                                    

Mi doctora me dio el alta y mientras el abuelo Lanzani se ocupaba de Olivia André me ayudó a mi, yo me sentía en perfectas condiciones pero todos exageraban con respecto a mi salud.

—Está el auto, hay seguridad fuera porque hay fotógrafos esperando por ustedes —dijo papá— lo único que pido es que por favor respetes el tema de tu descanso, si quieres saludar hazlo sin problema, pero es importante que en cuanto salgas te subas de una vez al auto

—Estoy de acuerdo con tu papá, hay bastante fotógrafos y personas que te quieren saludar, lo mas sano para ti es subir directamente al auto, porque solamente pusieron una pequeña valla —dijo André mientras cargaba mi bolso, me puse perfume, lo guardé y los miré con una sonrisa

—Ok, gracias. No me den órdenes —sonreí— mamá ya regresó a la Casa Blanca? —pregunté

—No, está en la ciudad en una reunión del partido, están insistiendo bastante porque la quieren confirmar para la reelección pero tu mamá no está del todo segura, entonces la están invitando a reuniones, como se dieron cuenta que estaba acá por Olí, no dejaron de joderla. Me dijo que en cuanto termine va a llegar directo a casa —dijo papá mientras caminaba por la habitación con Oli— está completamente dormir, me parece que le encanta pasar tiempo con su abuelo —André me miró con una sonrisa

—¿No se te queda nada mi amor? —preguntó André revisando todo, negué con una sonrisa y me acerqué a besarlo— Estas hermosa

—Te amo —sonreí

—Tos tos tos —dijo papá y nos hizo reir

Abrió la puerta y me despedí de las chicas que me atendieron espectacular, todas fueron muy amorosas, bajamos juntos por el ascensor, cuando se abrió la puerta me felicitaron unos desconocidos, les agradecí y aparecieron unos guardias que median unos tres metros, obviamente papá iba a exagerar cada segundo.

—No le sigas todo el juego a papá André —dije cuando nos quedamos un poco más atrás— no me gusta que me den órdenes —el me miró con una leve sonrisa y asintió, salimos del hospital y escuché todos los sonidos de la cámaras, saludé hacía los dos lugares donde estaban, después de todo era su trabajo —todos me gritaban al mismo tiempo preguntas— no los escucho nada —dije con una sonrisa

—¿Cómo te sientes? —me gritaban

—Muy bien, muchas gracias —sonreí, habían unas personas con peluches que me los mostraban saltando

—Permiso —le dije al guardia que se puso en mi camino cuando estaba acerdandome para saludar— Hola amores, muchas gracias —tomé los regalos que pude— gracias por venir, que tengan un buen regreso a casa. Los quiero mucho, gracias por venir —sonreí, sentí una mano en mi espalda y cuando me giré estaba André mirándome con una sonrisa

—lo qué pasa es que el médico nos ha pedido que descanse, asi que la voy a robar para que vaya a dormir. Gracias por venir chicos, cuídense. Gracias por el cariño —me tomó la mano y me llevó hasta el auto

—La idea siempre es ignorar lo que tu papá dice —dijo papá moviendo la cabeza, mientras André me miraba simplemente

—La idea es que ustedes no se metan en mis cosas como si fuese un bebé. Tu no hagas las cosas que papá hace —miré a mi novio que soltó una sonrisa— ¿Está dormida? —pregunté

—Algo así —dijo papá que estaba sentado a su lado— está tratando de luchar con el sueño pero creo que va a perder —la miró con una sonrisa— ¿Habían visto un bebé tan lindo? —preguntó emocionado— me da mucho amor, no quiero que nadie perturbe su tranquilidad y por mismo soy un poco exagerado, necesitas medidas de seguridad extras porque tu mamá es la presidenta de este lugar y porque este país está lleno de loquitos. Sabías que sufrió un ataque? Cuando yo era presidente

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 13, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cardigan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora