Sorry, I'm Hualianromantic.

XXXVI. La verga d̶e̶ ̶W̶u̶d̶u nos trajo y la verga nos va a llevar

Miren, Pei Ming podía ser un idiota, pero no era estúpido. A él, nadie le veía la cara de pendejo.

Excepto Wudu, Wudu puede verme cara de lo que sea.

Le guiñó un ojo a Wudu con el pensamiento y el joven Shi solo lo ignoró, pasando la mirada sobre él cruelmente, Pei Ming, que no sabía cual era el mal que había hecho, terminó de besar a la décima persona que le tocaba y logró llevarse el pocky en los labios.

—¡Round 25! Gana Pei Ming —¡¿Por cuánto más se podía extender ese juego?!

Pei Ming ya había pasado 10 veces, ganado en algunas (no quiere hablar al respecto), perdido en otras (tampoco quiere hablar al respecto)

[Mucho mucho tiempo antes]

Pei Ming se arrepentía, se arrepentía mucho de jugar.

─Round 10, gana Quan Yizhen, perdedor, Pei Ming.

El ricitos gritó lleno de alegría─ ¡Ge! ¡gané! ─y se tiró sobre YinYu

Pei Ming hizo una mueca, ¿alguien puede explicarle...como llevaba varios rounds perdiendo?

¡Ya se había besado con medio mundo aquí!

Había jugado contra Yinyu y el tipo ni siquiera había pestañeado cuando le quito el pocky a Pei Ming de los labios y se lo comió todo.

Jugó contra Mingyan, pero tuvo que obligarse a perder ante la mirada pesada de Sha Hualing en su nuca, además, él respetaba a las parejas de sus amigos..

Ya que seamos compas, podremos compartir.

Luego, su contrincante había sido el mismísimo Luo Binghe, ¡e igual había perdido!

¡¿Cómo se perdía contra el chico que ni siquiera intentaba ganar?! ¡Solo esquivo a Pei Ming diciendo que se negaba hasta que por accidente Pei Ming se fue para atrás, soltando el pocky.

Era una decepción.

[ Mucho mucho tiempo después ]

Pero no era solo estar perdiendo lo mantenía intranquilo, tampoco tenía nada que ver que fuera contra Shen Jiu (quién tenía el mayor número de rondas ganadas), solamente que ¡no era normal que su nombre saliera tantas veces!

Alguien estaba tramando algo malvado en su contra.

Pero ¿Quién? ¿Quén se atrevería a hacerle daño a este pobre y misero hombre que sufre tragedias todos los días de su vida?

En su teatro, Pei Ming se secó una lágrima y Quan Yizhen que estaba sentado a su lado se alejó con preocupación —Ge, creo que Pei Ming necesita un doctor —le murmuró a Yinyu.

—Ya lo llevé —Pei Su se metió en la conversación con tono resignado— trató de coquetearle a la psicologa y ahora pago la terapia de ella.

Quan Yizhen abrió los ojos, asustado y se alejo otro poco.