—Xuan Ji está embarazada! ¡Dicen que es de Pei Ming!
—¿Pei Ming? ¿El que salió con el hermano de la hermosa Mingyan?
—Ese mismo
—¿Qué no era joto?
—Pero antes salía con muchas chicas, entre ellas Xuanji, dicen que terminó con ella porque Xuan Ji se enteró de que él, bueno — levantó ambos dedos indices y los golpeó uno contra el otro con un rostro sugerente.
—¿Pero si le hace a... —la chica que estaba escuchadno al que contaba el chisme imitó sus señas— ¿Cómo fue que la embarazó?
El chico se encogió de hombros, Shi Wudu, que lo estaba escuchando todo mientras movía el elegante abanico que una chica del club de lectura le había entregado, cerró los ojos. Pensó en todas las veces que recogió a Pei Ming de casa de alguna chica, no importaba cuantas veces Ling Wen le repitiera a Pei Ming que debía cuidarse, no solo de accidentalmente dejar un hijo, si no de pegarse alguna enfermedad, el chico parecía hacer oídos sordos.
Cómo si fuera Ironman
Si Ironman fuera ninfómano
Shi Wudu bufó, Pei Ming era tan molesto...¿pero así de idiota para dejar a una chica embarazada? ¿Y sobre todo a Xuan Ji? Definitivamente era un asunto del que él se tendría que encargar.
Despúes de la obra...después de que el pecho le dejara de doler.
Cerró los ojos y se llevó una mano a la cabeza, entre Pei Ming y Qingxuan le sacarían canas verdes antes de que llegara a los 30, aunque quizá era su culpa por consentirlos tanto.
—Eso no es cierto —Wudu abrió los ojos, encontrándose con una presencia incluso más irritante que Pei Ming: He Xuan.
El chico tenía un ojo delineado y dos...íncreibles pechos falsos, tener a He Xuan enfrente con pechos gigantes aumentó su migraña. No le respondió y el novio de su hermanito tampoco era muy fan de las palabras, asi que solo agito la botella que tenía en la mano y se la tendió. La tomo con algo de duda, He Xuan se dió la vuelta pero no se fue sin antes decir algo que lo tomaría por sorpresa.
—No es cierto que Xuan Ji está embarazada, así que aún puedes ir detrás de Pei Ming.
Wudu no respondió y He Xuan se fue igual de rápido como llegó, abrió la botella dispuesto a beber algo de agua, irritado y sorprendido a partes iguales, cuando la luz frente a él, que apuntaba al escenario se encendió. Una tonada tétrica perteneciente al violín de alguna persona del club de música inundó el teatro, Xie Lian estaba vestido de novia moviéndose entre unas estatuas y detrás de él apareció otra figura, llevaba el velo levantado, sus ojos chocarón directamente con los de Wudu.
Era Pei Ming.
Incluso con el maquillaje y la poca iluminación, Wudu lo reconocería, por recogerlo tantas veces en antros de mala muerte, por llevarlo a fiestas dónde lo último que veía de él era su espalda entre los brazos de alguna chica, por que su presencia era regular cada fin de semana en su casa mientras se quejaba porque Wudu solo bebía té, porque desde hacía años Wudu estaba enamorado y conocía la silueta de la única persona que se esforzaba todo el tiempo por ignorar.
El amor, no era para él, así que trato de desechar esos sentimientos, los hundió tal cual barco en medio del océano. Pero ese barco resultó ser demasiado molesto, apareciendo una y otra vez. Pei Ming era molesto.
Pei Ming era quién lo había enamorado, pero Wudu no lo necesitaba, no necesitaba de nadie. Pero quizá solo se estaba mintiendo, porque la sonrisa que Pei Ming le dirigió en ese instante fue la misma sonrisa que le había dirigido hace años, cuando lo salvó de una golpiza. Porque a pesar de que era mejor estar solo, él quería ver esa sonrisa todos los días que se le permitiera.
Wudu dejó la botella de agua, si, tal vez debería hablar con Ling Wen antes de hacer la locura en la que estaba pensando.
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Sorry, I'm Hualianromantic.
ActionPei Ming acaba de descubrir que es lo que realmente le gusta a las chicas y como todo un galán, pone su mayor esfuerzo para investigar, sin embargo un desliz lo lleva a terminar siendo el HuaLianista número uno en el instituto. "¡Hasta tienen un clu...