Después de unas vacaciones regrese a Londres y tengo la sorpresa de que mi novio esta esperando la llegada de su mejor amigo, un amigo del que me ya contado tantas maravillas de él. He bromeado diciendo que tal vez esta enamorado de su mejor amigo p...
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Narra Alina
Cerré mis ojos y sentí como Tom seguía con sus movimientos, mis ganas de orinar aumentaban cada vez más, esa sensación que llega a mi cuerpo cada vez que un orgasmo viene se hizo presente. Mis gemidos no paraban de salir de mi boca, sentí un líquido salir y correr entre mis piernas y segundos después mi orgasmo, cerré mis piernas por inercia, deje escuchar otro gemido pero esta vez más alto y él retiro sus dedos, se acercó a besarme y abrazarme.
— ¿Te gustó? - él susurro -
— Sí.
Mi respiración estaba demasiado agitada, sentía mi pecho subir y bajar con velocidad.
— Haré vibrar cada parte de tu cuerpo, Alina - él susurro en mis labios y dejo un casto beso -
— Quisiera - abrí mis ojos y choque con su mirada - quisiera devolverlo...
— ¿Lo has hecho antes?
— No - negué - enséñame.
Me tomo de mi mano y me hizo levantar, dejo un beso sobre mi mano y después él se sentó en la cama.
— Arrodíllate - él me miro -
Hice lo que dijo y me arrodille, paso su mano por mi mejilla y yo cerré mis ojos, cada vez que sus dedos pasaban por mi piel era inevitable sentir una corriente eléctrica correr por mi cuerpo.
— Dame tu mano - habló y se la di - vas a tomarlo desde aquí y vas a ir haciendo movimientos, subiendo y bajando y cuando tú creas conveniente puedes ir estimulando con tu boca, lengua o labios.
— De acuerdo - respondí -
— Hazlo sola.
Puse mi mano alrededor de su miembro, Tom me veía muy concentrado, su mirada es tan intimidante tan imponente que da miedo pero a la vez me hacía sentir demasiado... Candente.
Me concentre en hacer lo que estaba haciendo, él soltó un ligero jadeo eso significa que estoy haciéndolo bien. Me acerque a la punta de su pene y deje un suave beso haciendo que él se moviera un poco. Volvió a dejar otro beso y esta vez soltó un quejido, lo bese con delicadeza para después pasar mi lengua por encima, su mano derecha sujeto fuertemente mi cabello haciéndome jadear.
Seguí moviendo mi mano de arriba abajo, fui introduciendo su pene a mi boca y darle placer con mi boca también. Él comenzó a dejar escuchar gemidos, dejo de hacer presión y estirar mi cabello, solo sostenía mi cabeza. Un par de minutos después él termino en mi boca, el liquido estaba caliente no tenía un mal sabor ni tampoco era del todo agradable.
— ¿Te gustó? - lo mire -
— Me encantó.
Me hizo poner de pie junto con él, me abrazo por la cintura para después besarme apasionadamente, camino un poco hasta sentir que mi espalda chocaba con algo, era uno de los sofás individuales. Me hizo darle la espalda también hizo que subiera una de mis piernas al sofá, él seguía estando detrás de mí, me tomo de las caderas hasta sentir que entraba lentamente en mí, era lo que más necesitaba en estos momentos, se quedó inmóvil unos segundos hasta que sentí que volvía a moverse.
