𝐷𝑖𝑒𝑐𝑖𝑠𝑖𝑒𝑡𝑒

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                          Sunhee;

Miré la puerta de la oficina del director Taehyung y tomé una gran bocanada de aire. Toque primeramente la puerta, y unos cortos minutos después, escuché un pase desde atrás de esta que me pusieron tensa. Humedecí mis labios y empujé la puerta caminando despacio hacia el interior de la oficina. Encontrando a Taehyung sentado en uno de los sofás de la oficina mientras fumaba. Me adentre completamente y cerré la puerta detrás de mi.

—¿Quería verme? —pregunté captando su atención.

El expulsó el humo hacia arriba y afortunadamente el olor no llegó a mi. El presionó el cigarro contra el cenicero apagando este y se inclinó hacia delante apoyando sus brazos sobre sus piernas.

—Acercate —pide y yo camino despacio hasta llegar a él.

Toso un poco pero lo miro sin evitar en ningún momento su mirada fija en mi. Mi corazón no dejaba de retumbar contra mi pecho.

—Me dijo Lisa que ayer no viniste —es lo primero que dice.

—No —dije sinceramente.

Si sabía todo. Si sabia que había sido yo la que intentó matarlo ayer, iba a ir por todas. Y posiblemente, aunque terminase presa, cumpliría con mi objetivo.

—¿Puedo saber por qué? —cruza sus piernas y alza una ceja mirándome mientras esperaba una respuesta por parte mía.

Espera.

O sabía y estaba tratando de comprobarlo, o, realmente no sabía absolutamente nada y ni siquiera sospechaba de mi.

—Estaba enferma —mentí descaradamente—. Tenia un poco de fiebre y pensé que si era contagioso lo mejor era que no viniese a trabajar. Tengo un chequeo, por si quiere ver –hago como si fuese a sacar algo de mi bolso pero el niega.

—No hace falta —responde—. ¿Ya estás mejor? –pregunta seguido.

—Mhm. No suelo enfermarme mucho, y si lo hago suelo ponerme bien en seguida —eso si era muy cierto—. Igual iré de vez en cuando al medico para asegurarme de estar bien de salud.

El me observó por un largo tiempo. Tanto que sentía que podía cortar mi respiración. Tanto que parecía que podría leerme con la mirada.

—Ayer me asaltaron. O bueno...intentaron matarme —dijo levantandose continuamente del sofa y yendo hacia la pequeña nevera de la oficina para al parecer tomar agua.

—Lisa me lo dijo —lo seguí con la mirada—. ¿Se encuentra bien?.

—Lo estoy —aseguró apoyandose en la mesa detrás de él mientras daba un sorbo al agua y me miraba—. Era una chica.

—Oh —fue lo único que salió de mis labios–. ¿La conoce?. O...¿se le parecía alguién? –alzé una ceja.

El me miró por varios minutos más. Puso el agua en la mesa de atrás cruzando sus brazos mientras me miraba a la distancia. Y a pesar que no tenia ni una gota de miedo, realmente no podía evitar sentirme incómoda.

—Realmente no —dijo por fin—. No sé quien es. Y no tengo tampoco ni puta idea de porque intentó matarme.

—¿Alguna deuda? —solté encogiendome de hombros.

—No lo creo —dijo—. No tengo problemas con nadie.

—¿Seguro? —la pregunta salió por si sola de mis labios y el alzó una ceja mirandome. Me apresure a continuar—. Uno nunca sabe. A lo mejor usted piensa que no ha hecho nada y, realmente lo hizo.

—Estoy muy seguro de que no le he hecho nada a nadie —respondió—. Cómo sea....trataré de olvidar eso –suspiró–. Solo quería saber porque no viniste ayer. Ya...puedes irte.

Straight to you |𝐓𝐚𝐞𝐡𝐲𝐮𝐧𝐠 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora